Tu amor ¿Sera para mi?

Re: Tu amor ¿Sera para mi?

Os doy la bien venida a las nuevas que se han unido a mi fic jiji me alegra mucho que os guste y aquí os traigo el siguiente capitulo espero que os guste.
Capitulo20:Nueva casa, nuevo pueblo, y un libro de mis sentimientos.
-Pues entonces en marcha-
Kagome y Sango estuvieron toda la mañana de compras y visitando Francia en concreto la torre eiffel ya que se encontraban en Paris, hasta que estuvieron cansadas y pararon a descansar en los bancos de un gran parque.
-Menudo paseo que hemos dado Kagome ¿Kagome?-Pregunto al ver que su amiga no respondía.-Kagome ¿Te sucede algo?-Ya preocupada.
-He no, solo pensaba-Miro para atrás suya.-Sango ¿No tienes la sensación de que alguien nos espía?-
-Pero que tonterías dices, Kagome anda vamos a casa tengo hambre-
-Tu igual que siempre-
Se levantaron del banco para ir de camino a casa, mientras que unos ojos les espiaban desde unos arbustos. Al legar hasta su casa, Kagome subió a su cuarto para llamar a Paila, mientras Sango llamaba por su celular a un restaurante para encargar comida.
Con Kagome.
-¿Sí?-
-¿Paila?-
-¿Kagome?-Dijo la chica al otro lado del telefono con voz muy feliz.
-Sí, cuanto tiempo ¿qué tal estas?-
-Yo muy bien ¿y tu? ¿Dónde te encuentra, por que te marchaste?-
-Yo estoy muy bien, me marche después de encontrar a Inuyasha con... otra, luego acepte una beca aquí en Francia donde me ofrecían una casa y me vine con Sango. ¿Y Inuyasha? No estará por hay escuchando ¿Verdad?-
-Pues... Inuyasha no se encuentra aquí en Tokio-
-¿Cómo que no se encuentra en Tokio?-
-Pues, cuando leyó la carta se enfadó tanto consigo mismo que se marcho a buscarte, no sé a donde-
-“Inuyasha”- Dijo Kagome en su mente mientras derramaba lagrimas.
-Kagome-No respondió.-Kagome ¿Estas hay?-
-He si lo siento ¿Está por hay Izayoi? Me gustaría hablar con ella-
-Si claro enseguida la llamo-
Kagome estuvo hablando con Izayoi cerca de dos horas, luego subió a su habitación para darse una ducha ya que tenia el baño junto a su habitación, una vez que acabo se cambio para colocarse un camisón blanco con corazones rojos. Bajo hasta la cocina para comer algo ya que no había comido y tenia un poco de hambre, cuando se hizo de comer se sentó en la mesa del comedor para comer mientras pensaba una y otra vez en donde se podía encontrar Inuyasha y si de verdad quería buscarla, hasta que entró al comedor Sango la cual bestia con una pijama con que consistía en un chaleco blanco y unos pantalones cortos de corazones, en su mano llevaba un baso de leche. Kagome empezó a reír por lo bajo al ver como iba vestida Sango.
-Oye ¿De qué te ríes? Si puede saberse-
-De la menuda coincidencia-Mientras seguía riendo ante la cara de incredulidad de su amiga.
-¿Menuda coincidencia?-Sin comprender a lo que se refería.
-Recuerdas que compremos unos pijamas iguales, pero yo compre el camisón y tú es conjunto-
-Sí, si que me acuerdo ya que venían juntos y lo paguemos a medias además me gusta mucho-
-Pues la coincidencia es que nos lo hemos puesto las dos hoy mismo sin tener ni idea-Mientras que se levantaba de la silla.
Sango empezó a reír al igual que Kagome, una vez que se calmaron Sango se marcho al salón para poner una película y esperar a que llegara Kagome con las palomitas y los refrescos para verla juntas, mientras que Kagome se encontraba en la cocina fregando hasta que se escuchó el microondas avisando que las palomitas ya estaban listas como una botella de coca cola del refrigerador y las palomitas ya en un cacharro, para dirime hasta el salón donde se encontraba Sango. Cuando llegue le di su refresco y me senté junto a ella en el sofá, sujetó el mando para pulsar el botón que pondría en marcha la película.
Cuando llego a la parte más bonita en donde el hombre en este caso un vampiro entra al castillo donde se hallaba la muchacha derrumbando la puerta, al encontrarla allí atada en un altar, corrió hasta llegar hasta ella para soltarla y abrazarla mientras que le decía lo mucho que la amaba y la besaba apasionadamente, pero después llegaron unas personas que se suponía que eras los padres de ella y querían matarla, en un despiste del no muerto la acuchillaron por la espalda para caer en el suelo sangrando. El chico de un golpe se libro de ellos para correr hasta ella abrazarla y salir del castillo con ella en brazos al estilo nupcial miente le decía unos “Te amo” y demás.
-Como me gustaría eso-Dijo la pelinegra..
-¿Qué tus padres te acuchillen por la espalda?-Dijo la castaña con algo de bula en su voz.
-¡Claro que no! Lo que me gustaría es eso un hombre que venga por mí me rescate y me proteja de todo, para decirme te quiero y te amo mientras me carga en sus brazos hasta el fin del mundo-
-Hay, que soñadora que eres Kagome, encontrar un hombre así es casi imposible-
-Si, pero soñar no cuesta nada y es muy bonito tener sueños así-
-Si, y por eso estas como estas-Para lanzar un cojín a la cara de la pelinegra.
-¡Oye! Hay te has pasado-Siguieron con la guerra hasta que cayeron rendidas en el suelo, para luego marcharse cada una a su habitación.
Seis años después Kagome y Sango tenían ya 21 años, Kagome acabó la carrera de escritura y había sacado ya su primer libro, donde una chica tras cruzar una puerta de una gran mansión llega hasta un mundo alterno donde conoce allí un extraño ser, el cual quería a otra que poco a poco se fueron enamorando, hasta que la chica se dio cuenta que había jugado con sus sentimientos he emprende en un viaje donde conocerá a nueva gente que se convertirá en sus compañeros de viaje.
Kagome se hallaba en una nueva casa en un pequeño pueblo que parecía de cuentos, ya que todos vestían a estilo medieval y los niños corrían por las calles jugando mientras la gente compraba en el mercado. Fuera del pueblo era una ciudad normal donde la gente viste normal y siempre van con prisa hablando por el móvil y estresadas. Kagome se estiro en la cama para levantarse y asomarse por la ventana.
-Creo que voy a ir a la biblioteca a coger algunos libros-
-Oye, Kagome-
-¿Sí? Dime Shippo-
-¿Puedo acompañarte?-Con cara de cachorro abandonado-
-Claro que puedes Shippo, menos mal que te dejan que entres con migo-
Kagome y Shippo salieron de lacaza para caminar hasta llegar a la biblioteca, la biblioteca era enorme de dos plantas y adornado a estilo antiguo, Kagome cogió tres libros para luego dirigirse al mercado para comprar los ingredientes que necesitaba para preparar la cena. Al llegar a la casa Kagome preparo la cena mientras que Shippo daba vueltas por el pueblo, unos minutos después sonó el teléfono de la casa, Kagome soltó el cuchillo y corrió a coger el teléfono.
-¿Sí? Diga-Nadie contestó.
-Hay, hay alguien ¿Hay?-
-Este es tu fin-
-Sango, sé que eres tú, va ¿Qué quieres?-
-Pues que hoy no voy a cenar, me voy me voy de marcha con unos compañeros-
-Vale, esta bien-
-Y mañana nos marchamos unos diítas a la costa-
-¿Qué? Que cara ¿No?-
-Bueno, mañana te llamo ¿Sí? ale adiós, un beso-
-Pues valla- Se volvió a la cocina para seguir cocinando, una vez que acabo se marcho a su cuarto para tenderse en la cama ya que se encontraba algo cansada.
Mientras tanto a las afueras de Tokio en un castillo un muchacho de pelo plateado entraba por la puerta serrándola de un portazo. Subió hasta sus aposentos para echarse en la cama de sabanas negras mientras miraba un punto de la nada, en eso una chica que vestía con un bonito vestido largo y el pelo suelto con ondulaciones, la cual avanzaba poco a poco hasta llegar junto a la cama y sentarse en el borde de la cama.
-Aun sigues buscándola y no la has encontrado ¿Cierto?-
-Sí, y no sé que hacer ni donde buscar, y lo siento por lo que te dije aquel día-
-Tranquilo no pasa nada, pero debes de admitirlo y ese crío es un demonio ¿Estas seguro que tú eres el padre?-
-¿Quién más sino? Pero ahora eso no me importa, lo único que me importa es encontrar a Kagome-
-Pues no sé yo que decirte la verdad, pero yo sé donde esta Kagome-
-¿Sabes donde esta Kagome? Vamos dímelo-
-Te lo diré, pero ella no sabe que te lo he dicho ni nada ¿Entendido?-
-Entendido-
-Se encuentra en Francia, estudio literatura y a sacado ya su primer libro, mira es este-Entregándole un libro algo grueso.-Oye por favor, no me iras a dejar con la víbora y el demonio ¿Verdad?-
-¿Por qué no? Eres una buena niñera-
-¡No! De eso nada, yo me voy con tigo, además quiero asegurarme que no haces nada-
-Esta bien, va y así leo el libro por el camino-
Inuyasha fue a preparar la maleta de Paila y la suya mientras que Paila buscaba por Internet, casas para alojarse en aquel pequeño pueblo donde vivían Sango y Kagome.
Mientras tanto en Francia, Kagome se había levantado y bajo hasta el pequeño salón para prender la televisión, fue pasando de canal hasta que se le cayo el mando quedando justo en las noticias, las cuales decían.”Les informamos que en Tokio esta habiendo un caso raro de desapariciones, en un mes han desaparecido 18 chicas todas de entre Dieciséis y veintiún años de edad, se sospecha que son casos de vampirismo, ya que se han hallado algunos cuerpos de chicas con dos marcas en sus cuellos además de otros cortes, total mente desangrados.”
Kagome apago la televisión quedando tendida en el sofá mientras que pensaba.

Hasta aquí lo dejo de momento espero que os haya gustado he intentare poner conti cuanto antes. Besos!!!
Aquí abajo os dejo la casa la biblioteca el vestido y el peinado de Paila.

 

Re: Tu amor ¿Sera para mi?

ola!!
esto es una cosa que me decis siempre por que he dejado que pasara tanto tiempo, para que kagome fuese mas mallor y acabara la carrera y escribiera el libro que dice como se siente ella y Paila no le dijo antes para que Inuyasha sufriera algo se lo tenia merecido por que ella sabe que kagome a s ufrido mucho por lo que sucedio jejeje luego o mañana abra conti, espero que la leais
Besos, cuidense!!!