Pasillos y corredores de Hogwarts

Evelyn Holder

—Uaaah~ Un problema menos en el mundo, hoy ya he hecho mi buena acción del día. Quizás pueda recompensarme tomándome el resto del día para... ¡No, no, mejor: con un helado de chocolate! Hm, ¿pero dónde encuentro helado en una escuela de magia y hechicería? ¿Habrá alguna tiendecita por aquí cerca?

Y ahí estaba yo, Evelyn Holder, la aspirante a la mejor maga del universo universal... sin saber muy bien qué hacer ahora en mi vida. Y eso era realmente molesto, porque yo no me imaginaba sin hacer nada, ¡no podía aburrirme, sería impropio de mí! Los pasillos parecían ser bastante transitados a estas horas del día, al parecer no era la única con la hora libre. Jé, pobres, ya se aburrirán como yo en algún momenton

¿O es que era la única que ahora mismo no tenía idea de qué hacer? Y a todo esto, ¿dónde se metieron todos? ¿Y Kara? Definitivamente miles de incógnitas asomaban mi cabeza, sin encontrar respuestas aparentes. Pero entonces encontré en mi paseo matutino la biblioteca al fondo del pasillo, y pensé que lo mejor sería quitarse la tarea de encima de una vez. Aunque no fuese entretenido, no quedaba otra ahora mismo.

—Bueno, allá vamos~ —encogí mis hombros sin darle mucha más importancia y, entre saltitos, me encaminé hacia mi nuevo objetivo, buscándole algo de diversión inexitente al asunto.

 

Ryder Parker.

Luego de la locura del tal "Pubis" o como sea que se llame el feo e inmaduro fantasma de la cocina, al fin pude encontrar una ducha y darme la necesaria limpieza luego de recibir golpes de bichos con fiebre azul y gases avejentados descompuestos con el aliento horrendo.

—Bueno, creo que ahora me toca ir a la clase de Encantamientos. Por lo que supe ya alcancé el nivel 2 por lo que puedo aprender otro hechizo.

Sé que sueno como entusiasmado por aprender magia, pero no saquen conclusiones rápidas. Yo sólo quiero salir rápido de los deberes pendientes para luego poder exigir mi recompensa libre de culpas. Era lo que tenía que hacer luego de no haberle dado bola a esta dimensión cavernícola por semanas y haberme atrasado un tanto en todas las actividades.

 

Ryder Parker.

Suspiré con un potente aire de superioridad. Sí, lo sé. Apenas soy nivel 2 y recién llevo tres conjuros aprendidos, ¿pero qué importa eso? Yo ya había avanzado y eso significaba que ya estaba cumpliendo mi parte, por lo que podría exigirles libremente a mis padres que cumplieran con la suya. Es lo justo, ¿no? Que a nadie se le olvide con qué condiciones llegué acá, yo lo tengo bien presente, y hasta el momento eso no ha cambiado.

—Vaya, que tranquilidad... —susurré al notar el silencio reinante en los pasillos—. ¡Así me gusta, Hogwarts!

 

Kara Willson

¡Me había quedado dormida!

Me había quedado un par de minutos en la sala común de los Hufflepuf intentando decidir si tenía que hacer los deberes con tiempo o disfrutar un rato entrenando o algo así pero... no sabía en que momento me había quedado dormida y había despertado probablemente muchas horas después donde habría podido hacer algo más interesante.

"¡¿Por qué Jay no me había despertado!?"

Y en mi camino a explorar al castillo di una "pequeña" vuelta "muy lenta" y para mi mala suerte había terminado chocando con alguien — ¡Ah! ¡lo siento, lo siento!.. — me disculpé lo más rápido que pude cuando noté que si, efectivamente también había terminado tirando al chico en el proceso.

— ¿Estas bien? ¿Sí? ¿Te hiciste daño?

 

Ryder Parker.

Seguí caminando serenamente, cuando de repente... ¡Pum! Una acelerada chica hizo una especie de voltereta a 360° tal cual bailarina y me pasó a golpear en su aparente espectáculo.

Mi cabeza chocó contra el barandal y posteriormente caí al piso. Me levanté, adolorido. Lo primero que vi fue el barandal, me sorprende que no se haya roto, es que estas construcciones se ven tan... viejas, que a veces da la sensación que fuera a hacerse pedazos. Me dispuse a sobarme la cabeza, cuando la chica me hizo como tres preguntas seguidas, no dándome tiempo de responder ninguna, porque apenas abría la boca para contestar, me hacía otra pregunta y... ¡Uh! Era necesario un corte.

—¡Shh! -exclamé, haciendo una seña en el aire para que me dejara responder. Tomé aire hondamente. Entre el golpe y su hiperactividad, se me había ido toda la tranquilidad que había logrado reunir, pero bueno... haré el intento por mantener la compostura—. Estoy bien, sí. Sólo me duele un poco la cabeza, pero creo que se me pasara en un rato.

>>Además no pienso ir a la enfermería de aquí, por ahí escuché que te dan excremento de planta exótica o algo así.

 

Kara Willson

"Shh"

Fruncí ligeramente el ceño cuando quiso callarme de esa forma, ¿qué pasaba con él? ¡solo quería hacerle un par de preguntas para ver si todo estaba en orden o no!, inflé levemente mis mejillas y no dije nada hasta que él hablo y por suerte me comentó que estaba bien y me pude relajar un rato. — Mira, mira... si no quieres ir a la enfermería esta bien pero debes asegurarme al 100% que estas bien, ¿vale? — me levanté rápidamente, sacudí mi falda y estiré mi mano hacia él para que se levantara también.

>> Intenta correr en linea recta y dar un giro mientras saltas, así sabre al 100% que estas bien, ¿si? — le sonreí amablemente, esperando alguna respuesta de su parte

 

Ryder Parker.

Whaaaaat?

A ver, a ver... Recapitulemos. Iba caminando con total tranquilidad y por un momento este horrendo lugar con olor a antiguo se me hizo agradable porque no se escuchaba ni el zumbido de una mosca, cuando de repente sale una niña brincando y bailando como esos juegos de Kinder. No había dicho nada puesto que no se veía mala persona, pero... ¿hacerme correr y dar un salto con un giro? Que petición tan rara es esa. Y nooo pienso hacer eso, ¡qué flojera!

—A ver, disculpa, me perdí... ¿eres la profesora de gimnasia o algo así? —pregunté, medio irónico—. Estás pidiéndome como tres ejercicios juntos que una persona en su vida cotidiana no hace para nada. De casualidad tú no te pegaste en la cabeza también, ¿verdad?

 

Kara Willson

Poco a poco fui cruzando mis brazos, fingiendo seriedad a las cosas que él me estaba diciendo pero, sin más, cuando terminó de hablar volví a mi posición normal y levanté uno de mis brazos justo para tocar con uno de mis dedos su nariz con una pequeña sonrisa retadora. — ¿Te crees incapaz de hacer un reto así? — pregunté riendo bastante divertida a decir verdad. — ¿Tú no corres en tu vida cotidiana?, ¿Tú no saltas? — negué suavemente con mi cabeza, como si lo estuviera desaprobando por completo.

>> Pero tranquilo, lo comprendo. No quieres hacerlo porque sabes que yo lo haré mejor, es normal~

 

Ryder Parker.

Y acto siguiente, la chica aparentemente divertida me tocó la nariz con uno de sus dedos, haciendo que quedara perplejo... ¿y ésta a quién le salió tan feliz? Parece la versión humana de Burbuja de las chicas súper poderosas.

"¿Tú no corres en tu vida cotidiana?, ¿Tú no saltas? Pero tranquilo, lo comprendo. No quieres hacerlo porque sabes que yo lo haré mejor, es normal~"

Solté una risa irónica, ¿cómo había dicho?, ¿qué si acaso tenía miedo? Claaaaaaaaaaro.

—Límpiate que tienes un poquito de egocentrismo en la boca —le dije—. Pues, bien. Un reto será. Veamos quién corre y salta mejor.

Dudé un poco de lo que dije. Cielos, que ridículo era todo esto. Íbamos a parecer como esos tipos de los programas de TV que hacen volteretas y maromas para ganar dinero, pero lo triste, es que aquí no habría dinero para ver quién lo hacía mejor. Pero no importa. Esta chica me desafió y yo no iba a retroceder como miedoso.

 

Kara Willson

Sonreí triunfante cuando por fin aceptó hacer mi examen de buena salud, y de esa manera todo iba de acuerdo al plan, solo tenía que animarlo un poco más y vería que tan bien estaba para tal vez irme tranquila por el castillo a seguir con lo mio, quien sabe.

— ¡Perfecto!, como yo te reté y no quiero opacarte con mi gran agilidad al hacer todas esas cosas, te daré el placer — volví a tocar su nariz — Sí, como lo escuchas, el placer de iniciar a ti primero.

>> A menos claro, que te de miedo hacerlo después de verme.

 

Ryder Parker.

—De acuerdo, yo no sé si es que quieres sacarme un moco o qué onda pero... ¿podrías dejar de tocarme la nariz? —le pedí, lo más pacientemente posible.

Di un paso adelante, haciéndole caso a señorita rayito de sol yo siempre sonrío. Tomé aire y miré a todos lados. Afortunadamente nadie más estaba viendo, que vergüenza. Corrí a toda velocidad, pegué un salto, y di un giro, tal como la chica lo había pedido.

—Bien, señorita sonrisa Pepsodent, es tu turno —dije, cruzándome de brazos.

 

Kara Willson

"De acuerdo, yo no sé si es que quieres sacarme un moco o qué onda pero... ¿podrías dejar de tocarme la nariz?"

Arrugué mi nariz levemente al imaginarme esa idea, ¿acaso él lo hacía y por eso preguntaba eso? ¡que asco!, pero a pesar de eso decidí no responder nada para que hiciera más rápido mi ejercicio y cuando lo logró di un saltito de alegría para correr rápidamente con él y abrazarlo.

— ¡Perfecto! — le felicité una vez que me separé de él — Me alegra saber que realmente estas bien, no pensé que lo hicieras, es algo muy vergonzoso pero tenía que impulsarte a hacerlo. Pero tengo que confesarte algo... — rápidamente puse mis manos sobre sus hombros, tomando la mayor seriedad del mundo.

>> Yo jamás haría algo como eso, pero tú lo hiciste, lo cual significa que eres el mejor haciendo eso, felicidades

 

Ryder Parker.

—¿...qué?

La chica salió disparada a abrazarme y a felicitarme y a decir cómo ella no lo iba a hacer porque estaba "asegurándome de que estuviese bien". No sabía bien cómo reaccionar a eso, de hecho la primera impresión que me dio eso no fue precisamente la mejor, así que tomé aire hondamente y proseguí a preguntarle:

—Dime que esto no fue una burla... por favor —dije, cerrando los ojos para contenerme lo que más podía. Esperaba que no fuera el caso, sino la situación no iba a tomar una muy buena dirección que digamos, y realmente no quería que eso pasara.

 

Kara Willson

"Dime que esto no fue una burla... por favor"

Ladee ligeramente mi cabeza al no entender que estaba diciendo esa clase de cosas, ¿por qué eso sería una burla como el lo estaba diciendo? — ¿Por qué sería una burla? — pregunté claramente confundida — Solo quería comprobar si estabas bien... Mis familiares me hacían hacer eso cada vez que me golpeaba o algo parecido y si ellos lo hacían...me gustaría confiar que lo hacían para mi bienestar y no por bromear conmigo...

 

Ryder Parker.

Wow, wow, wow. ¿Era una tradición familiar? Well... lo admito, es bastante particular, pero se agradece el fondo... era una buena intención. Aunque la chica fue un poco invasiva y toda chillona, debo admitir que no me cayó mal, al fin y al cabo, tuvo una buena intención y eso se agradece.

—Bien... —susurré, más calmado—. Mi nombre es Ryder, ¿tú eres...?

 

Kara Willson

"Bien... Mi nombre es Ryder, ¿tú eres...?"

— Mi nombre es Kara, Kara Willson es un placer conocerte Ryder — sonreí bastante tranquila y estrechaba su mano al momento que me presentaba con él, después miré un poco a mi alrededor, al parecer eramos los únicos aquí en los pasillos. — ¿Ibas a un lado en específico antes de nuestro pequeño accidente? — pregunté algo curiosa, inclinándome ligeramente hacia delante y atrás mientras esperaba

 

Ryder Parker.

Kara... Kara. Me quedé pensando, ¿habré escuchado mal y querrá haber dicho Karla? Es que es un nombre muy... peculiar. Es como "cara" de precio o "cara" de rostro. En fin, no me iba a detener mucho a pensar eso. Eso de que un nombre pueda ser común o no depende prácticamente de dónde vengas.

—A decir verdad, sí —respondí, serenamente—. Hoy tuve un día muy movido así que ahora quisiera ir a descansar un rato en la sala común de mi casa. Así que te dejo para que sigas tu camino tú también, nos veremos luego.

Asentí como señal de despedida y me dirigí a la primera escalera que pillé que me llevaría a la sala común de Ravenclaw. Al estar frente al cuadro dije la palabrita clave (la cual recordé de milagro) y entré al lugar.

 

Frans Andersson

—Agh —musité mientras cojeaba por aquel pasillo eterno, aburrido e invariable del maldito internado donde me hallaba preso. La pierna me dolía, sí, pues ese engendro de Peeves nos había intentado dar una buena paliza, ¡y vaya si casi lo consigue! Con todo, no logró derrotarnos, y fue él el que se desvaneció en la nada, lejos de mi vista, al fin. Pero, si la pierna me dolía, veinte veces más dolía la nariz. Comenzaba a dudar que, tras esos eructos infectos de aquel bicho, mi snetido olfativo volviera a ser el mismo. ¡Qué rayos! ¿Qué había que comer para que alguien expulsase semejante aberración de olor? ¡Podría apostar un brazo a que había armas nucleares más inofensivas que aquello! —. Tche. Y ahora, ¿qué?

Eso. ¿Y ahora qué? ¿Qué era lo siguiente? ¿Encerrarme en mi habitación y seguir lamentándome de mi horrible futuro entre aquellas paredes? ¿Vagar como un alma errante más de las muchas que había pululando entre los cuadros y paredes de Hogwarts? O... ¿acaso había algo más entretenido que hacer? Algo que no pusiese en peligro la inteegrsidad de uno de mis cinco sentidos, claro.

Caminé por el pasillo de forma patética, sin rumbo aún, pensando en cuál sería la próxima sorpresa desagradable que me reservaría Hogwarts.

 

Frans Andersson

Caminé y caminé, buscando algo que hacer. Y finalmente, encontré un rumbo para mi paso lento y torpe. No es que fuese gran cosa, pero al menos había tenido una idea para matar el tiempo y hacer algo con mi mísera existencia. Agh, aquel lugar acabaría por consumirme.

Crucé pasillos y subí escaleras. Y finalmente me encontré delante de un espejo. Y suspiré. ¿Qué otra cosa hacer si no...?

 

Daniel Brown

Cuando Peeves cayó la misión terminó. Ese tío empezaba a hartarme mucho, más le valía no cruzarse conmigo a solas en un pasillo... Salí de la cocina (no sabía si se podía andar por ahí) y volví a los pasillos. ¿Qué más me quedaba por hacer aquí? Volvía a estar solo y sin ningún plan. Quizás lo más coherente sería volver a la sala multipropósito para entrenar, pero eso ya pasaba a ser aburrido. ¡Ya era un gran mago, esos debiluchos no estaban a mi alcance!

Volviendo mi vista hacia lo que me rodeaba, me fijé en que aún me faltaba mucho por conocer de este colegio, así que empecé a andar sin rumbo.

—"Estudios Muggle" ¿Y esto? ¿Para qué querría nadie estudiar esa bazofia? Meh, voy a ver qué hay dentro... —abriendo la puerta con algo de miedo, asomé la cabeza para ver que no había nadie, la clase estaba vacía. Solo un espejo al fondo... ¿Qué haría eso ahí?—. ¿Un espejo? Esto oculta algo, fuera de aquí. ¡Wingardium Leviosa!