Pétalos de Rosa

Re: *Pétalos de Rosa*

Hola nenas, lamento la demora ;) aqui les dejo conti... y las vacas estan tan cerca que casi las puedo respirar *-* owo tengo tantos proyectos jejejeje...

~18~

~Regando una Rosa con Alcohol~
​

Entre nuevos encuentros las Rosas habían comenzado a labrar sus diferentes caminos, una velada agradable y divertida les dió la bienvenida a aquellas invitadas especiales y a sus acompañantes, el vino, los cócteles y el vodka fueron los principales actores de la noche, inesperadamente todos los presentes terminaron pasados de tragos a altas horas de la madrugada.
*
En un grado que rallaba enormemente en la inconciencia, lo más saludable en aquel momento era regresar a sus habitaciones antes de que la pérdida del glamour se convirtiera en un verdadero dilema… más de un choque inesperado vendría de mano con los altos grados de embriaguez…
*
Ante los agravios de una noche sin custodia un chico de ojos gatunos y cabello entre negro y verde se encontraba observando desde su balcón las estrellas… aquella noche no se encontraba Genn por lo que sólo contaba con la aburrida presencia de Sakuno, la pequeña trataba de hacer amena la atmosfera y llevarse mejor con su protegido, era algo que tenía que aprender si quería convertirse en una Rosa…

-¿No puedes dormir? –cuestionó la joven con una sonrisa tratando de acercarte a él.
-No tengo sueño –recalcó él mirándola de reojo con una mueca de fastidio.
-Ya veo… pues si te apetece podemos conversar…

La chica comenzaba a sentir cierta tranquilidad, sin embargo en su ingenuidad no vio venir el momento en que el joven se abalanzó sobre ella recostándola a una pared bruscamente… la joven estuvo a punto de llorar con el sólo gesto, Ryoma no mostraba ninguna expresión en la mirada.

-¿Qué haces? –cuestionó ella de forma casi inaudible.
-Estoy aburrido…
-¿Acaso yo te gusto? –no podía evitar el terrible temblor que invadía sus piernas.
-Nunca dije algo parecido… sólo estoy aburrido…

El joven la besó apasionadamente, los pensamientos de la chica estaban en extremo confundidos, le gustaba, él sin duda le gustaba, pero ella a su lado se sentía como un mero juguete, Ryoma comenzó a tocar las piernas de la chica por debajo de su falda, un miedo inmenso se hizo presente… de un empujón la joven se alejó corriendo saliendo de la habitación dejando la puerta abierta.
*
Ryoma frunció el ceño extrañado… “Que chica más rara”… pensó fríamente, caminó hasta la puerta de la habitación con la única intención de cerrarla pero la presencia de una joven lo detuvo… ella estaba evidente pasada de tragos…

-Ryoma… kun… -la chica embriagada recayó en los brazos del chico.
-¿Tu eres Ely cierto? –cuestionó el chico sujetándola a duras penas. –Te llevaré a tu habitación con Gakuto.
-¡No! No quiero ir con él… no quiero…
-¿Y que quieres que haga entonces? –Ryoma no entendía porque se había metido en aquel embrollo.
-Déjame quedarme contigo…


Ryoma observó a la chica de pies a cabeza… muy interesante sin duda, a fin de cuentas estaba aburrido y sin duda la niña tonta no volvería… el joven de ojos gatunos dejó pasar a Ely a su habitación cerrando a sus espaldas la puerta, ella lo besó apasionadamente, desquitando de alguna manera su amor frustrado por el pelirrojo acróbata, el sin nada que perder le correspondió en lo que sin duda sería una noche de pasión en la cual no mediaría ninguna clase de sentimiento… sin saberlo… el joven Gakuto aún estaba despierto observando preocupadamente la hora de su reloj, ojeando la puerta cada cinco segundos después de todo quería verla al menos una vez antes de quedarse dormido… después de todo la amaba.
*
Una joven pelirosa había presenciado el espectáculo desde el final del pasillo… regresar ahora a su habitación no sería posible, sin duda Ryoma estaba más que ocupado, buscar a Sakuno y consolarla sería mucho mejor en aquel momento, pero el alcohol que tenía en la sangre no la dejaría formar dos oraciones coherentes, decidió ir a la azotea en busca de un poco de aire fresco que respirar sin embargo se le habían adelantado… un joven castaño de verdes ojos tenía la mirada perdida en el horizonte… él no había bebido tanto… estaba de alguna manera conciente sin embargo aquello no era obstáculo para herirse a si mismo.
*
Con una pequeña navaja se había mancillado la piel del brazo un par de veces, Genn ahora por efecto del alcohol resultaba un poco más valiente…

-¡Deja de hacer estupideces! –balbuceó la joven acertando una bofetada en el rostro del chico.
-Genn… -Loki a duras penas podía creer lo que veía, ella le había hablado.
-No entiendo porque quieres lastimarte… idiota… -la chica empezaba a perder el conocimiento lentamente.
-Lo que te hice sufrir a ti fue mucho más que esto… -agregó él tristemente.
-¡Vete al diablo! No eres más que un egoísta, apuesto que te lastimas para sentirte mejor… contigo mismo… pues no me das… lastima…

Genn estuvo a punto de caer el suelo sin embargo Loki logró sujetarla en sus brazos, después de tantos años había logrado tocarla nuevamente… ella no estaba del todo conciente, aquello inhibía su miedo, él decidió llevarla a un lugar más cómodo para que pudiera descansar.
*
Una vez en la sala de estar Genn se libró de los brazos de Loki y caminó torpemente hacia el sofá arrojándose a él de llenó… se veía acolchonado por lo que Genn no pudo resistirse, sin embargo un quejido sobrevivo al aventón de la joven, alguien estaba dormido en aquél lugar y sin duda lo habían despertado abruptamente.

-Auch… eso duele –dijo el joven en un bostezo mientras se sobaba la cabeza.
-No.. puede ser… ¿Jiroh? –Genn pensó que aquella visión era efecto del alcohol en su sangre.
-¡Genn! Que bueno verte… estas tan hermosa como siempre –el chico tenía una cara de emoción sin precedentes.
-¿Qué haces aquí?...
-Vine con Ayane, Oshitari y los demás pero creo que me quedé dormido aquí… -una risa nerviosa salió de los labios del chico.
-Tu no cambias… -Un sonrojo evidente se apoderó de la joven

Una timidez repentina invadió a los dos jóvenes que poco a poco se fueron acercando, recordar viejos tiempos era más que urgente y necesario… un beso precedió a sus angustias… Loki poco más que asfixiado salió huyendo del lugar, verla besar a otro hombre era poco más que devastador, sin embargo él sabía que Jiroh si se merecía su amor… a diferencia de su persona que tanto daño había causado, por lo menos ella le había hablado aquella noche, esa alegría no se la quitarían por nada.
*
Para aquel entonces otra embriagada rosa había llegado a su habitación, su chico estaba profundamente dormido… sin duda podía verse tan adorable entre sueños, sus mechones rojizos cubrían su rostro delicadamente, tenía los audífonos aún en los oídos, sin duda se había quedado dormido escuchando música, la joven un tanto mareada se acercó a él para retirar el pequeño aparato, pudo notar que el chico tenía entre sus manos una fotografía, sus ojos mostraban las sombras de las lágrimas que le habían ahogado… Rumi sintió gran impotencia al ver la imagen de Ann Tachibana en aquel retrato.
*
La joven ensordecida por su falta de juicio apretó sus puños cansada de la situación y comenzó a golpear a Kamio por sobre las sabanas, el chico despertó en un sobresalto y vio como su Rosa tomaba su foto haciéndola pedazos ferozmente…

-¡Rumi ¿Qué haces?! –exclamó el joven sorprendido, al instante logró notar el aroma a licor que la chica emanaba.
-¡Ya no pienses en ella! ¡Olvida a esa zorra! Debe estar vendiéndose –acotó la joven inconciente de sus palabras.
-¿Qué quieres decir con eso?
-Es una zorra después de todo… -la chica se acostó junto a Kamio en la cama, aún seguía golpeándolo pero con menor intensidad.
-Estás muy borracha… -el joven la envolvió entre sábanas y le quitó las sandalias de tacón para que reposara…

Kamio estuvo a punto de marcharse cuando repentinamente ella lo retuvo, aferrándose a la camisa del chico lo jaló hacia ella obligándolo a acostarse a su lado, él comenzó a ponerse nervioso cuando ella lo abrazó con fuerza…

-No te vayas Akira…
-Es…esta bien –el joven se acomodó a su lado, su calidez era impresionantemente tentadora, ella con los ojos cerrados parecía no menos que una pintura perfecta, un sonrojó invadió las mejillas del chico, comenzaba a entrar en un ritmo romántico y diferente…

Desde que Ann se había marchado no había sentido la necesidad de besar a alguna mujer, pero en aquél momento un sentimiento arrebatador se hizo presente de forma inminente… casi hipnotizado se acercó a ella lentamente “Akira…” susurró la joven suavemente, él no pudo resistir aquel llamado por lo que tomó a la joven presa de sus labios, en un beso con un sabor y un ritmo que nunca antes había sentido, más que deseoso, sus manos comenzaron a jugar sobre la piel de su rosa, arrebatándole toda prenda de ropa la tomó para si aclamante… finalmente ambos se habían embriagado aquella noche de una copa de miles de sentimientos.
*
Un alboroto había causado otra joven desde otra habitación, varios vasos y platos habían reventado contra el suelo en un intento de beber un poco de agua que le quitara de los labios el amargo del licor… Lilium estaba más que mareada… su joven acompañante se levantó de golpe al escuchar los ruidos y fue a la cocina armado con un peluche de felpa, al ver a su rosa respiró profundamente.

-Vaya eres tu… -Eiji suspiró con alivio…

La joven lo observó con detalle, él pensó que sería nuevamente atacado… sin embargo aquello no ocurrió, la joven saltó sobre él y lo abrazó fuertemente, ella sonreía con gran alegría, el gatuno sonrojado no supo como reaccionar ante aquello.

-¡Hermana! –exclamó la joven más inconciente que conciente… Eiji se sorprendió aún más.
-Lilium… soy yo…
-Hermana te extrañaba tanto, quería disculparme por lo que hice –las lágrimas comenzaron a brotar por sus ojos tristes.
-No te preocupes… hermana… ya te perdoné hace mucho –el chico la abrazó con fuerza, él sabía que su Rosa necesitaba con urgencia aquellas palabras, aunque él no supiera de que trataba el asunto, si podía alegrarla era suficiente.

Lilium lloró como nunca lo había hecho, él joven aún incomprensivo del pasado de su Rosa la abrazó lo más que pudo hasta que ella calló finalmente dormida, Kikumaru la arropó tiernamente dejándole su peluche de felpa… un beso en la frente fue su despedida… él tenía demasiadas cosas en que pensar, sus sentimientos ya estaban fueran de control.
*
Un trío de chicos conversaban amenamente entre los pasillos del hotel, hace un tiempo atrás que no estaban los tres juntos, después de todo eran familia y el extrañarse era algo natural…

-¿Y no tienen problemas por pelearse por el mismo chico? –cuestionó el joven Choutarou un tanto preocupado.
-No te preocupes hermano, somos mujeres maduras –acotó Nyumi con su siempre grácil sonrisa.
-Da igual, él será mío… -Gris estaban también muy pasada de tragos.
-Que prima tan fuerte tengo –acotó el chico mientras tomaba a Gris en brazos, ella estaba a punto de caerse.
-¿Ya has visto a Fuji cierto? ¿Por eso bebiste tanto? –Nyumi como de costumbre acertó en el blanco.
-Si… pero eso quedó en el pasado, ustedes son lo único que tengo ahora, yo sólo soy una Ootori… -Los presentes no pudieron evitar angustiarse ante aquellas palabras.
-Syuusuke esta perdido sin ti prima –el joven de la cruz en el cuello estaba bien enterado de la situación.
-No me digas nada… no quiero saberlo.

Ya eran bastantes sus problemas, aquella noche llegar hasta el punto máximo de inconciente sería suficiente para olvidarlo todo… otro joven en las cercanías estaba siento arrastrado a su habitación por su hermana y por su mejor amiga…

-Te pasaste de tragos Keigo –regañó Maya algo enfadada, su hermano no pronunciaba palabra alguna.
-Maya no te enojes, Keigo necesita liberarse un poco –acoto Aya con una sonrisa divertida.
-Lo consientes demasiado Aya…
-No hablen como si no estuviera presente, el que sean las dos mujeres que más quiero no les da el derecho de ignorarme a mi… -el joven fue interrumpido al instante.
-Si a ti y el gran Ore-Sama –agregó Aya con una tierna mirada.
-Nos hiciste falta Ayane, y veo que aún Choutarou te sigue a todas partes.
-Si, es un pequeño muy fiel –Aya mostró cierta superioridad en sus palabras.
-¿Cuándo dejarás de verlo como un niño? –cuestionó Maya intrigada.
-Quizás cuando tu veas a Keigo como tu hermano –respondió ella alejándose del par.

Ya era bastante tarde, Ayane estaba cansada, decidió dejar a los hermanos a medio pasillo y despidiéndose con una sonrisa se encaminó a su habitación… Keigo acompañó a Maya hasta su puerta…

-¿Estas seguro que puedes llegar a tu cuarto solo? –cuestionó Maya bastante preocupada.
-Estaré bien Maya…
-Entonces buenas noches hermano –Maya abrió la puerta de su habitación para marcharse…
-Te amo… -susurró Keigo...


El joven abrazó a su hermana en un desesperado gesto por demostrarle sus sentimientos, ella lo sabía y su abrazó le movió el alma entera, un beso en extremo apasionado le precedió, cientos de caricias desbocadas se hicieron presentes… Maya se alejó a duras penas, si seguía así no podría separarse de él aquella noche y estar en un pasillo público sería ciertamente muy riesgoso para ambos… finalmente él decidió marcharse por su bien mutuo y ella entró a la habitación en un inmenso suspiro.

-Pensé que no entrarías –la voz de un joven sacó a la chica de sus pensamientos… Momo estaba sentado en el suelo a un lado de la puerta.
-¿Lo viste? –cuestionó la chica inmensamente preocupada.
-No vi nada… tan solo escuché la voz de un hombre –el joven sonrió dulcemente, de ser cierto si lo había visto todo pero prefería callar.
-Ya veo, lo siento –ella por alguna razón se sentía terriblemente avergonzada.
-Estas temblando, ese chico te dejó deseosa por lo visto.
-No es nada…

Maya caminó al borde de su cama, estuvo a punto de echarse a llorar cuando él la abrazó por la espalda.

-Déjame reemplazarlo –susurró Momo hundiendo su cara en el cabello azulino de la joven.
-Momoshiro… -a Maya comenzaba a contársele el aliento.
-Si él no puede estar aquí para ti déjame reemplazarlo al menos esta noche…


Sus palabras finalmente habían pasado el límite de la osadía, se había controlado mil veces anteriormente sin embargo aquella noche le sería imposible hacerlo, ella estaba tan hermosa y se veía tan vulnerable… el hombre que amaba no era nada más ni nada menos que su hermano, ahora Momoshiro estaba más que convencido que debía salvarla de aquella relación pecaminosa.

-Llámame Takeshi…

Ni una palabra más fue entonada en toda la noche… el joven no se atrevió a hacerle el amor a su Rosa, sabía que ella se resistiría y a larga sentirse tan traidora tan sólo haría hacerla sentir mucho peor... Más sin embargo la besó… la besó como nunca antes había besado alguna mujer, le robó el aliento por horas, besó cada rincón de su cuerpo, se le fue la vida en cada roce, saboreó el todo de su silueta perfecta, sintió abrumadoramente la humedad de su lengua, la besó como si nunca pudiera besar a nadie más… jamás… y aunque no le entregó su cuerpo terminó por regalarle el corazón.
*
Para aquel entonces Sayu y Mary también habían regresado a sus habitaciones, Syuusuke recibió a la primera con una abrazo, ayudándola a cambiarse y recostarse terminó por arroparla dulcemente… la había extrañado… en tanto que Bunta estaba enrollado en el sofá a punto de llorar, quería comer algo dulce, pero no había nada en toda la habitación, para mayor de males Mary lo había dejado encerrado con llaves, apenas se abrió la puerta el chico saltó sobre ella reclamando el beso que tanto necesitaba… sus ansias de dulce que calmaron finalmente quedándose ambos dormidos sobre las mismas sábanas.
*
Una nueva Rosa se encontraba en la entrada de su habitación, el ojal de la puerta ofrecía resistencia para recibir la llave que la dejaría entrar, estaba demasiado bebida como para que su equilibrio la ayudara en algo ante aquella situación, de un momento a otro unos brazos masculinos habían rodeado a la joven por la espalda… un suspiro se hizo presente… la chica volteó bastante enfadada, ya conocía aquel aroma.

-¿Qué diablos quieres Oshitari? –exclamó Kiana con una evidente mueca de fastidio.
-Me gustaba más cuando me llamabas Yuushi –dijo el joven mientras se acomodaba los lentes.
-Eso ya fué…

La chica le dio la espalda a su perpetrador e intentó nuevamente abrir la puerta de la habitación, desafío que hasta el momento le seguía resultando imposible… el joven aprovecho la torpeza de la Rosa para aprisionarla nuevamente, esta vez con más violencia comenzó a besarle el cuello y la espalda descubierta por el escote.

-¡No me toques! –exclamó ella un tanto nerviosa.
-Antes no me decías eso… -Yuushi la observaba con deseo y fascinación.
-Antes no sabía que eras un patán…
-No es para tanto… -el joven le robó un beso de los labios, ella lo empujó al instante.
-¡¿No es para tanto?! Hiciste lo que quisiste conmigo y me humillaste, me trataste como un objeto y… ¿NO ES PARA TANTO? –la chica había perdido la calma.
-Pese a todo eso sabes que te amo.
-Vete al diablo…

La chica estuvo a punto de arrojar sus llaves al suelo del enfado, sin embargo Yuushi divertido sacó de su bolsillo otro juego de llaves y sin ningún problema abrió la puerta de la habitación con sigilo.

-¿Cómo tienes la llave de mi habitación? –cuestionó ella a punto de explotar.
-Siempre tengo a la mano las cosas que me importan –acotó él guiñando un ojo.

Finalmente Yuushi se marchó y ella pudo respirar, entrando a su habitación pensó que no tendría caso echarle cerrojo, después de todo él ya tenía llaves y nadie más que él le preocupaba a la joven en aquel preciso momento.
*
Finalmente dos lindas jóvenes habían optado por dormir aquella noche en un enorme sofá que había en la sala de estar del hotel, después de todo regresar a su habitación con la poca voluntad que el licor les proporcionaba era sin duda infinitamente peligroso.

-Gracias por acompañarme Hikaru –dijo Natsu acomodándose sobre las almohadas.
-¿Tan peligroso es Shiraishi? –cuestionó la joven curiosamente.
-Mucho, si llegaba con alcohol encima no me salvada nadie –acotó Natsu divertida.
-Si bueno… -un par de pensamientos pervertidos cruzaron la mente de Hikaru en milésimas de segundos.
-Lamento causarte problemas, de seguro Kaidoh no te causa este tipo de inconvenientes.
-¡Eh!... no…no para nada –la joven tragó saliva y un escalofrío le rodó la espalda.
-Por cierto no has notado que él tiene un muy buen trasero… -Natsu había tocado un tema bastante delicado.
-¿Eh? ¿Trasero?... No, no para nada, no me fijo en esas cosas –más de un recuerdo le vino a la mente a la Rosa…
-Claro, buenas noches –dijo la sempai.
-Buenas noches –acotó la joven entre nerviosa y sonrojada, las imágenes de Kaoru le invadieron los pensamientos hasta que finalmente se quedó completamente dormida.


Así habían sido las cosas y sin saberlo muchas historias estaban por comenzar en tanto que otras encontraban su final… el pasado de ciertas rosas nuevas estaba a la vuelta de la esquina y el paso siguiente al estrellato estaba cercano… muchas cosas más estaban a punto de suceder entre los pétalos y espinas de las Rosas.

~Continuará~


:rosa: May Atobe :rosa:


¿Que pasará en la siguiente? ¿Que pasados serán revelados? ¿Que historias terminarán? owo.... no se lo pierdan en el siguiente episodio juaz xD​

 

Re: *Pétalos de Rosa*

Girls gracias por sus post, al respecto
varias cosas, omg! si gozo con el trasero
de Kaoru pero me quedo con el de Momo xD
owo... xD jajajajaja, no tomen alcohol es
malo para la salud xD y por ultimo... lo
prometido es deuda, Gris me chantajeo
diciendome que cuando suba mi conti
en petalos ella subiria la suya en Flores
aqui mi conti xD Gris bella espero la tuya
juaz.... ja-ne