Mansión Abandonada

— ¿De que sirve tener muchos amigos si unos dos estarán ahí cuando lo necesites más?— Pregunté.— Piensa eso y luego responde que te quise decir, sí lo haces te ayudaré en poco.— Sonreí recostándome de lado en el suelo cubriéndome con la manta y echándome a dormir.

 

—No sirve de nada... —saqué una conclusión, para encender una linterna e irme al campamento que tenía en el patio—

 

Me desperte sonriendo y cansado del mismo lugar por lo que le dejo una nota a mizuki la cual decia "Nos vemos en el Claro Pincel" una vez que deje la nota me sali de la mansion y me monte en pidgeotto para despues que este despegara al claro..

 

Me desperté y vi una nota en el suelo y empecé a leerla y miré a mi alrededor y vi a Rojo dormido por lo que le dejo la misma nota a su lado saque a Aerodactyl, me monte en el de un salto y me fui volando hacia el claro

 

Me desperté tranquilamente y ví aquella nota
—Diablos, siempre me dejan tirado... —me quejé sin duda alguna—

 

Saqué a Aerodactyl para irme volando al claro Pincel

 

Los días pasaron y finalmente el momento llegó: La retirada de la mansión y un nuevo pokémon.
— Nos vamos.— Tomando la esfera de captura salimos del lugar en un ave de acero algo lenta.

 

Skarmory descendió frente a la mansión abandonada, aquella que habíamos explorado con el resto hace tan poco tiempo, pero sin embargo se sentía hace un millón de años atrás…

—Bien, ya llegamos —exclamé, bajando de un salto de Skarmory—. Aquí dentro hay todo tipo de pokémon tipo fantasma, psíquico y siniestro, y la última vez que estuve aquí vi algunos Murkrow… ¿lista para capturar uno?

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@Jenna Bodt Fubar

 

Yo me bajé de un salto, con un poco de mareo.

Me paré a escasos metros de la mansión y puse las manos en jarras, asintiendo con determinación. Una fugaz sonrisa pasó por mis labios.

—¡Sí, preparada estoy!

 

—Muy bien, adelante entonces… ¡a la mansión! —declaré, adentrándome junto con Jenna y mi Skarmory.

Una vez estuvimos dentro, vimos el lugar en concreto, que se veía tan abandonado y lúgubre como la última vez que había visitado… ahora, si tan sólo pudiésemos encontrar un bendito Murkrow...

 

Varios escalofríos me recorrieron la espalda una vez entrado en la enstancia. Un lugar tenebroso, abandonado a su mera suerte y los pokémon más tétricos se adueñaron del lugar. ¡Tampoco limpiaron las telarañas! Me di un buen susto buscando, no es que las arañas, precisamente, sean mis mejores amigas.

De repente, me pareció ver algo en una esquina.

—Eh, Effy...

 

—¿Sí, Jenna? —le pregunté, volteándome. Puso una cara extraña cuando vio una telaraña y por un momento pensé que se iba a desmayar del susto.

No muy lejos de nosotras, un Misdreavus y un Yamask paseaban con tranquilidad. Me pregunté si ese Misdreavus sería el mismo que había visto la última vez, el espíritu de aquella mujer...

 

Yo me aparté y al girarme vi a un Yamask y un Misdreavus.

—¡Oh, un Misdreavus! —exclamé, con una risita. Siempre me habían gustado—. Bien, sigamos buscando.

 

—Puedes capturarlo aún si te gusta… —comenté, notando su interés en aquel tipo fantasma. Dimos un par de pasos hacia adelante, aún buscando al tipo siniestro/volador. Un Duskull solitario flotaba por ahí melancólicamente...

 

Yo empecé a tararear una canción porque comencé a incomodarme con silencio tan sepulcral y los sonidos que emitían esos pokémon no me tranquilizaba. Sin olvidarnos que tenía la sensación de que muchísimos pares de ojos nos observaban en silencio, mofándose de nosotras en silencio, por la ignorancia que desprendíamos al no saber nada de la mansión y entrábamos como Pedro por su casa.

—Me estoy empezando a cansar —refunfuñé poniendo los brazos en jarra y fruncía el ceño—. ¡Dichosos Murkrow, que aparezcan! —me quejé ahogando otra exclamación.

 

Asentí con la cabeza, de acuerdo con sus palabras; era cansino buscar tanto y no tener éxito.

En eso, un Haunter descendió de la planta superior junto con dos Gastlys que lo acompañaban, riendo y sacando la lengua mientras los dos Gastlys tenían esa sonrisa amplia y tenebrosa plasmada en la cara. Pensé por un momento…

—Sabes, Haunter también puede ser un pokémon muy fuerte si lo entrenas bien, ¿no te interesará atraparlo también, Jenna? —le comenté a la joven, haciéndole seña a Skarmory de que continuara también con la búsqueda del ave siniestra.

 

Yo me puse a su lado y le miré.

—¿Sí? —miré al Hunter, el cual tampoco le parecía importarle nuestra presencia. Tras meditarlo un rato, sonreír y asentí—. Claro, por qué no.

Me puse en modo de ataque, sacando a Luxray y tras una batalla, lo capturé.

[¿Ahora qué? (?)]

 

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Ahora pones en tu ficha que atrapaste al Haunter y seguimos buscando al Murkrow XD

—¡Bien hecho! —felicité con un breve aplauso ante la demostración de poder del Luxray. Todavía seguía sin entender porque ella insistía que no era fuerte cuando tenía pokémon como Luxray o Infernape, pero que va… de todos modos, le sonreí mientras ella guardaba la pokebola con el recientemente capturado Haunter—. Ven, sigamos buscando debe estar en algún lugar...

 

Yo asentí y sonreí, satisfecha por la captura.

—Murkrow's, apareced~ —canturreé en voz baja.

 

—Vamos, sólo ten un poco de fe… —le dije, intentando animarla. Parecía contenta con su reciente captura, pero no quería que el no encontrar este pokémon le tirara los ánimos renovados por el piso…

En ese momento, dos Murkrow pasaron volando por sobre nuestras cabezas, y supe que era el momento.

—¡Adelante Jenna, captúralo!

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¡POR FIN APARECIERON! :'D @Jenna Bodt Fubar