Aula de Defensa Contra las Artes Oscuras

Lumi.

Unas pequeñas chispas se vislumbraron, pero sólo fueron por unos instantes; estaba yendo por buen camino, no caería en la desesperación como aquel chico llamado Daniel al que le habían quitado puntos por alterar el orden y dañar el moviliario de la escuela.

—Intentemos de nuevo varita. —volví a hablarle a mi compañera de magia—. ¡Periculum!

 

Andrew

Abrí la puerta y el tufo me dio de lleno en la cara. El olor a ajo hizo que llevara el cuello de mi túnica a la nariz para protegerla del olor. Me había perdido en los pasillos y me encontré vagando por lugares desconocidos del castillo antes de que me diera cuenta. No fue sino por la ayuda de un Gryffindor de segundo año que pude encontrar el aula de Defensa contra las artes oscuras.

—Disculpe la tardanza, profesor —me disculpé con la cara tapada—. Uhm, permiso... —dije y traté de ubicar un lugar para sentarme mientras mi vista se acostumbraba al ambiente oscuro del aula. Vi a Kara sentada junto a Evelyn en una de las mesas y me acerqué.

—¿De qué me perdí? —pregunté con una sonrisa. Entonces la chica pasó a explicarme en el hechizo que debíamos aprender. "Periculum" había dicho, un hechizo para pedir ayuda. Asentí y saqué mi varita para luego mirar a los presentes. Imité sus acciones y repetí las palabras mágicas.

—¡Periculum!

 

Danielle Abbadie.

Nuevamente las chispas murieron recién salieron de la varita, arrugue la nariz, si necesitaba ayuda nadie iría a mi rescate.

Deje mi varita en la mesa y mire un momento a los otros, quizá la clase anterior fue suerte de principiante y ahora mi suerte había muerto.

Volví a coger la varita, la tercera siempre es la vencida, así que debo volver a intentar y si fallo intentare de nuevo, no hay que rendirse fácil.

—Periculum.

 

Adam Tyler

La clase se sucedió con normalidad. Cuando el profesor llegó y abrió la boca para hablar, lo primero que quise hacer fue alzar la mano para preguntar si tenía algún problema en su voz... pero desistí de forma inmediata al comprender que tal vez aquello fuese muy maleducado por mi parte. ¿Tendría frío, tal vez? Fuese como fuese no iba a preguntarle, no era tan atrevido. Mamá nos había enseñado a respetar a los adultos, a ser educados y a no preguntar cosas que no eran de nuestra incumbencia.

Miré a Emma de soslayo.

— Esta vez lo lograrás, Em...— le susurré mientras una chica respondía a la pregunta que el profesor... ¿Quirrel? acababa de hacer. Tenía total confianza en las capacidades de mi hermana, sabía que podía hacerlao. Lo de la clase anterior solo había sido mala suerte, nada más. Esta vez iba a conseguirlo y volvería a recuperar la fe y la confianza en sí misma. ¡Por supuesto que sí, y yo estaría ahí para apoyarla! Le sonreí apremiante, antes de abrir mi libro de hechizos y buscar la página que había indicado el profesor.

—Veamos… —musité. Cincuenta y siete... Cincuenta y siete...— ¡Aquí está! Peri... Pericu... ¿Perilum?

No, no era así. Inspiré profundamente, tratando de pronunciarlo bien la próxima vez. Eran muy complicados esos conjuros... ¿Qué idioma sería ese? ¿Alemán? ¿Mandarín? ¿...Francés? No recordaba haberlo oído nunca. Aw, no estaba nada seguro si esta vez lo lograría, parecía complicado. Incluso cuando el hechizo anterior había sido mucho más raro que este. Lo memoricé y repetí en mi mente un par de veces. No perdía nada por probar.

... Cerré los ojos con fuerza y me preparé. ''Allá vamos... ¡Venga varita, confío en ti''

Y exclamé el hechizo a viva voz, apuntado a lo más alto del techo.

 

Kara Willson

>> Por eso, dominarlo será el objetivo de la clase de hoy. A-abran sus co-co-copias de Las Fuerzas Oscuras: una guía para la autoprotección en la pa-página 57, verán info-información sobre la encantación y el movimiento de mu-mu-mu-muñeca a-a-adecuado… deberán intentar ap-apuntar hacia el te-te-techo y conjurar las ch-chispas r-r-rojas, a-así… ¡Periculum!

¿Periculum? hmm, bueno... no sonaba tan dificil, y si había logrado dominar el hechizo de la clase anterior estaba segura de que podría lograr esto, además, tenía la inspiración de sobra de que Evelyn, Jane y Adam ya lo habían logrado, solo tendría que esforzarme igual que ellas y dejar todo como Merlín quisiera.

— Vamos chispitas... no las presionaré ¿vale? — murmuré mirando a mi varita con atención — ¡Periculum!

 

Lumi.

Más chispas salieron esta vez, debía ser cosa de, ¿suerte?, tal vez... pero me encontraba hablándole a mi varita y no sabía por qué me sentía unida a ella cada que conjuraba el hechizo defensor. Miré al hermano de Emma comenzar con su hechizo y tal fue mi sorpresa al ver que lo había logrado al primer intento, de nuevo; eso era tener el don dentro de sí, al parecer no se le complicaba realizar los hechizos.

Vi de nuevo mi varita y la acaricié.

—No hay que desesperarnos e intentemos de nuevo el conjuro. —Sonreí después de volverle a hablar y proseguí a decir el hechizo—, ¡periculum!

 

Danielle Abbadie.

Nuevamente solo fueron un par de chispas. Este hechizo no me estaba gustando, era imposible de hacer para mí, arrugue un poco el ceño, quizá debo practicar mejor la palabra.

Pasé unos minutos repitiendo la pronunciación, había abierto mi libro en la página correspondiente, y agradeciéndo saber leer, estudie el contenido, no se veía complicado.

—Periculum —dije apuntando al techo mientras pedía ayuda divina para lograr el encantamiento.

 

Lumi~

Y volvimos al inicio de donde comenzamos, ninguna chispa se asomó de mi varita... Sin lugar a dudas lo lograría, rendirme no estaba en mi vocabulario. Ricky y Ery habían estado concentrados viendo sus respectivas varitas y buscando una forma para lograr el encantamiento.

—Linda varita, no me rendiré, así que sigamos... ¡Periculum!

 

Kara Willson

¡Oh! habían salido un par de chispitas de la varita, ¡no lo estaba haciendo tan mal después de todo!, le sonreí levemente a mi varita y volví a ver como era el movimiento de varita, la pronunciación y esa clase de cosas. Esta vez, trataría de aliarme con mi varita para que todo resultara y no me exaltara o enojara si no llegaba a salirme este nuevo hechizo que estabamos aprendiendo.

— ¡Periculum!

 

Kara Willson

Otras chispitas nuevamente...

Me estaba acercando... lo iba a lograr, tal vez tardara un poco más de lo pensado pero me rehusaba a rendirme contra las chispas. Apreté mi varita con más firmeza para sentirme más segura conmigo misma y realizar el hechizo como el profesor lo había realizado.

Vamos varita... si no consigo este hechizo no podré ayudar a Evelyn a que se convierta en la super maga del mundo universal... ¿vale?

— Aquí vamos otra vez...¡Periculum!

 

Ricky Moorse

Aplaudió a su compañera de Gryffindor por ganar esos puntos, la pregunta había sido contestada a la perfección. —¡Bien hecho! —gritó directo hacia Victoria Stone, desconocía su nombre pero eso no le impedía para felicitarla de corazón y hacerle un gestito con la mano; el puño cerrado con el pulgar levantado. —Y ahora, niñas... —dijo a sus compañeras de banco, intentando sonar elocuente, pero la chispa se rompió porque comenzó a reír de su propio intento de broma. —Mi varita contiene un dragón y el hechizo es escupir chispas rojas... ¡vamos dragón, escupe fuego! ¡Periculum!

 

Ricky Moorse

Quedó con la sonrisa ensanchada y la varita en el aire, haciendo un ángulo recto con su brazo; pero nada sucedió. Borró la sonrisa y miró la varita de cerca. —¿Estará rota? —se preguntó en voz alta, acercando la varita a su nariz. —¡Periculum!

 

Danielle Abbadie.

Y de repente salieron miles de chispas rojas de la punta de mi varita, era un lindo espectáculo, me preguntaba si se podían hacer chispas de otros colores, si es posible podría montar una linda función a Sophie.

Sonreí animada, era bueno no tardar en las clases, así me daba tiempo de ojear el libro, para la próxima clase mi respuesta sería más acertada y ganaría los puntos para mi casa.

Cuando el encantamiento termino coloque con delicadeza mi varita en la mesa, esperaría unos minutos antes de comenzar a practicar el encantamiento con más calma.

 

Andrew

No ocurrió nada. Agité mi varita unas cuantas veces para ver si así mejoraba la cosa, pero no.

—Bueno... no salió a la primera, no es para tanto, ¿verdad? —dije para restarle importancia—. Vamos, la segunda... ¡Periculum!

 

Ricky Moorse

La varita emitió una ligera chispa roja que quemó la nariz de Ricky; el chico se agarró con la otra mano la punta de su nariz. —¡Ay! —se tocó la leve quemadura y el dejo rojo que había dejado la exposición a la chispita. Comenzó a reír con la boca cerrada, mirando a su varita. —Entonces es verdad: ¡Estás durmiendo, como dijo Ery! Vamos, despierta de una vez, haragán y ayúdame con este hechizo... —nunca se percató que estaba charlando con su varita y el "imaginario" dragón que vivía en ella, solo sonrió y volvió a repetir el hechizo.

 

Kara Willson

Respiré profundamente y noté que Danielle ya había logrado el hechizo, ¡que suerte tenía!, ahora tenía más inspiración para lograr este hechizo, tenía que hacerlo para que la promesa que hice con Evelyn fuera más fácil de cumplir y para que si alguno de mis amigos no podía conseguir el hechizo tratara de darles un poco de suerte como lo había hecho la clase pasada.

¡Todos debíamos lograr esto!

— Vamos varita... se que eres de palo de rosa.. pero te aseguro que las chispitas no te haran nada — tomé algo de aire y me serené un poco, talvez ser hiperactiva no ayudara con este hechizo — ¡Periculum!