Miraba todo con una mirada vacía y abismal, hasta que recuperé el conocimiento. —Agh, no de nuevo —dije algo asustado levantándome—
—Bueno si tu dices —dije tranquilamente— Me preocupé por como tomaría Sylveon la evolución de Lucario
—A Barniz, tengo algunos asuntos que atender —respondí— No lograba entender del todo como Sylveon se tomaría ver a Riolu evolucionado, supuse mucho
--Vale montate en pidgeotto--Le dije mientras me montaba en.pidgeotto y lucario se puso enfrente mio--
Me monté en Pidgeotto, mientras, miraba a Lucario, no pensé que llegara a evolucionar, así que sólo sentí lástima por Sylveon
Me sujeté como pude, según recuerdo de las descripciones de la Poké Dex, los Pidgeotto vuelan tan rápido que rompen la barrera del sonido
(Alguien que me ayude a salir de aquí ;o; xDDDD) Miré hacia todos lados en busca de alguien, pero no había nadie. Suspiré resignada y miré hacia arriba, por donde habíamos venido anteriormente. ¿Podría subir hasta allí? El problema era que la zona estaba contaminada, y mis pokémon no me servirían de mucho. Me senté sobre una saliente, mirando al pobre Grovyle que ya estaba cansado. —Amigo mio—le dije con tristeza—, nos quedaremos aquí por mucho tiempo.
(No tengo Vuelo, ni Surf xDDDDD moriré aquí [?]) Saqué unas galletitas de mi bolso y me puse a comer mientras escudriñaba el lugar, en busca de algo, como una salida quizá, pero nada. Me encogí de hombros y guardé las galletas; tendría que ponerme a trabajar si quería salir de allí.
Huh... de alguna forma había terminado aquí el camino, frente a un arrecife que no parecía ser para nada una arboleda. —Debimos equivocarnos en algún giro, volvamos a la isla... —dije, mirando el arrecife frente a mí—. ¿Qué será este lugar? No aparece en mi pokedex...
(Te adoro con toda la vida, Nami.) Giré mi cabeza al escuchar unos susurros. ¿Acaso no me había quedado sola? Me levanté rápidamente, con la boca atestada de galletas y le hice una seña a Grovy para que fuese a investigar. Antes de que este se fuera grité con la boca llena: —¿Hayd adguien adquí?—Algunas migas se escaparon de mi boca al hablar. Demonios, soy un asco.