Alguien Dijo Miedo...???

Re: Alguien Dijo Miedo...???

hola!!!! amigo, soy nueva en este ff y me lo acabo de echar todo y ke kres, pero ke kress, ke me encato tu ff esta genial me gusto, me encantan las historias de terror ademas en mi casa se ollen ruidos raros en el baño tu crees se olle a alguien llorar jejeje muajajajja pero no le demos importacia, jeje me sali del tema, esta genial espero la conti, me emocione cuando mencionate a guadalajara sisisisisis genial bye t cuidas mucho espero la conti ok bye.

 

Re: Alguien Dijo Miedo...???

Que onda, jejeje, tarde pero aqui esta
la knti.... xD
Para las que se asustan esta parte no asusta,
pero ya despues, no respondo :D

Aqui va la knti, que va dedikado a ustedes, en especial a Kazami,
que sigue enfermita, amiga recuperate pronto.

Chau.


Despues De La Tormenta... No Viene La Calma 1ra Parte


Sango estaba muy desesperada ya que su amiga aun no llegaba, era ya casi media noche y nada de ella, y lo peor ella no llevaba su celular, no tenía modo de encontrarla, ya había hablado con la mamá de la amiga de Kagome, y le había dicho que ella se había ido hace cerca de 4 horas. Ella le había dicho a Inuyasha y a sus primos, ellos ya habían salido en su búsqueda, pero aun nada de nada, el teléfono sonó.

Sango: Bueno…
Miroku: Sango, aun no ha llegado.
Sango: Ah, no aun no, ya es demasiado tarde –decía muy afligida-
Miroku: Ohh, bueno seguiremos buscando, adiós.
Sango: Adiós. –Cuelga- ¿Kagome, donde estas?

Una joven de cabellos negros, abría lentamente los ojos, se puso de pie, estaba toda mojada y por alguna inexplicable manera tenía mucho miedo, algo que no recordaba del todo, solo la misma niña pálida. Se puso de pie y vio a su alrededor, estaba en una vieja bodega que no tenía techo, y la lluvia seguía cayendo.

Kagome: Ay me duele la cabeza [nuca], y de nuevo vi a esa niña, creo que ya me estoy volviendo loca. Será mejor que valla a casa, Sango de seguro me va a matar, ay… -Tocándose la cabeza- Aunque me siento un poco mareada y la cabeza me duele mucho, ya quiero salir de esta bodega, me da pavor estar aquí –ve su reloj- ¡¿Qué?! Demonios es demasiado tarde, pero, pero ohh maldición.

Cayo nuevamente al suelo, aun se sentía demasiado mal, como para salir de aquel lugar, ahora en verdad que deseaba tener su celular con ella. Cerraba sus ojos y veía nuevamente a aquella niña, nuevamente la lluvia caía un poco más fuerte, tenía frío y estaba muy cansada y tenía miedo.

Inuyasha, buscaba a su nueva amiga y vecina, algo lo tenía bastante inquieto desde que supo que aun no llegaba a su casa, pues el siempre la escuchaba cuando llegaba a su departamento antes de las nueve y media, y eso era cuando era bastante tarde.

Inuyasha: ¡Kagome! ¡¿Dónde estas?! –Caminaba por las calles que gracias a la lluvia, se había quedado sin luz- Sería más fácil buscarla si hubiera luz en las calles.

De pronto pasa cerca de una vieja bodega, y sin explicación alguna, de decidió entrar dentro y vio la silueta de alguien sentada a la mitad de aquella bodega, su corazón brinco de alegría, pues sabia que ella era.

Inuyasha: Kagome –dijo casi en un susurro- Kagome
Kagome: -Lentamente voltea a ver quien la llama- Inu… Inu… Inuyasha -se pone de pie y se lanza a los brazos del joven [para eso si tiene fuerzas xD]- Inuyasha.
Inuyasha: *Esta temblando, pero no es de frío si no de miedo* Eh, Kagome, que te sucedió, por que no llegabas a tu casa, Sango esta realmente preocupada por ti -decía suavemente, tratando de calmar a la chica- Y también yo… -Dijo muy bajito, casi inaudible a la chica-
Kagome: Es que no dejaba de llover, además el granizo, lo rayos, nunca me han gustado las tormentas así de fuertes, soy demasiado miedosa, y a veces llego a imaginar cosas que no están ahí. –Sus ojos comenzaban a llenarse de pequeñas lágrimas-
Inuyasha: Shh, tranquila, Kagome –le acariciaba el cabello mojado- Todo esta bien, estoy aquí contigo, tranquila, tranquila. Ahora tenemos que regresar a casa.

Comienzan su camino de regreso, la lluvia se había calmado por completo, Inuyasha ya había avisado que había encontrado a Kagome, caminaron lentamente, ya que no se veía muy bien en la oscuridad.
Por fin llegaron a los departamentos, subieron lentamente, por el elevador, Kagome, tenía la vista perdida y se veía muy asustada, cosa que a el se le hacía bastante extraño, por que ella iba a estar asustada en un lugar como ese, cerro sus ojos y la imagen de Kikyo y a Ayame herida en el estomago, paso por su mente y recordó los ojos de Ayame.

Inuyasha: *Que demonios, que son esas imágenes, -pensaba, algo molesto- De seguro no ha de ser nada* Kagome, ya llegamos.

Salieron del elevador y se encontraron con las caras de sus amigos, y parientes, todos tenían una cara de preocupación, Kagome se sentía realmente mal, es saber que los había preocupado la hacía sentir miserable, Sango la abrazo y le dijo que no había problema, pero que nunca, pero nunca lo volviera a hacer, Sesshoumaru y Miroku, la veían extrañados, pues Sango les había ducho que ella siempre llegaba muy temprano a casa cuando ella salía sola.
Entraron al departamento de las chicas, y platicaron un poco de lo que había pasado con ella, al principio fue un poco difícil sacarle las palabras a Kagome, pero conforme los minutos avanzaron, las risas se hicieron presentes en la sala de aquel departamento, despues de que les platico, como fue a meterse a un lugar así, a quien en su sano juicio se le ocurre hacer eso [eso es lo mismo que yo dije ¬¬], pasaron unos cuantos minutos y se fueron a dormir, cada quien a sus respectivas camas o departamentos, según e caso xD, Kagome, entraba a su cuarto, se encerraba en el, se desviste y se mete a su cama, pero, recuerda lo que había visto el día de ayer en la mañana.

Kagome: Esa chica Ayame, tengo que saber más de ella, porque termino en un psiquiátrico, aun no le puedo preguntar nada a Inuyasha, -cerraba sus ojos- Inuyasha, que lindo eres…

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Un avión aterrizaba, en el mojado pavimento del aeropuerto, de el bajaban una anciana y su nieto, era de día, alrededor de las 9 de la mañana.

Kaede: Hijo el viaje desde Guadalajara hasta Tokio, algo largo.
Akitoki: X.X *Algo…*, abuela, estoy muy cansado, creo que primero, debemos de descansar un poco, si no serviría de nada, el hacer un viaja tan largo, para que todo salga mal, por no estar bien descansados.
Kaede: *Este muchacho, en verdad que tiene el poder del convencimiento* Esta bien, hijo, será mejor que vallamos a la vieja casa de tu madre, ahí seremos bien recibidos.
Akitoki: Esta bien abuela. Vamos entonces.

Y se fueron a la casa de la madre de Akitoki.

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Hakudoshi: Naraku, el tiempo se acerca, ya casi es tiempo de que hagas caer a esa joven en la trampa.
Naraku: Ja, así es, será igual que con todas las demás jóvenes, siempre caen en la misma trampa, no puedo creer que solo les dices, que en esa casa suceden cosas extrañas, que nosotros mismos creamos, y allá van como corderos al matadero, jajaja, es tan tonto de parte de esa jóvenes, el creer en las leyendas de casa antiguas, es muy provechoso para nuestro fin.
Hakudoshi: Si eso es verdad, no puedo creer que sean tan fáciles de llamar su atención, contándoles historias.
Naraku: Bueno una de esas, era bastante escéptica, me costo mucho trabajo el convencerla, de ir a la mansión del trébol negro, pero gracias a que si fue, pude revivirte a ti, hermano.
Hakudoshi: Y quien lo diría, de eso vana a hacer ya 2 años, lastima de que no atrapaste a la otra mujer.
Naraku: Si los tipos, que venían con ellas, me estropearon los planes, esos malditos, lo arruinaron, todo, pero creo que es la hora de la venganza ¿No lo crees?
Hakudoshi: Si encárgate del que esta fuera de la ciudad, y yo me encargare del que esta con la joven que necesitamos, esto si que es una gran casualidad, volverá a perder a alguien en su vida, pero ahora será ante sus propios ojos.

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Kagome, se había despertado tarde, su maestro particular, tampoco iría ese día a darles clases, el estaba enfermo, vio su reloj eran las 11 de la mañana, Sango le había dejado una nota en la pantalla de la computadora, diciéndole que ella se iría a desayunar con Miroku.

Kagome: Vaya al parecer a ella le gusto ese joven, Miroku, que bien, -enciende la computadora- Bueno, mejo busco la información de esa joven.

De pronto, ella ve como en su mesa de noche, esta un libro de pasta de piel roja, lo toma y ve que es un libro ya algo viejo y gastado, lo abre y ve el titulo del librillo.

“La Mansión del Trébol Negro”

De entre las paredes de la habitación de Kagome, se ve como unos ojos la observan a traves de ellas, un hombre encerrado en el cuerpo de un niño, aquel que desde el momento en que la vio, ya deseaba poder acabar con ella, y poder usar su alma para poder abrir el portal que une al mundo de los demonios, y alcanzar su objetivo, el poder absoluto, incluso si de usar a su propio hermano, se trataba, eso no le importada, el obtendría lo que deseaba cueste lo que le cueste.
Y con ese libro, el que le acababa de obsequiar a esa joven, era el inicio de su plan.

To Be Continued…

 

Re: Alguien Dijo Miedo...???

bueno como tuve q volver a escribir el post lo resumire en visita estos fics: cantico de sangre... una historia q revolucionara el mundo de lkos vampiros (mio) y vida en los suburbios q es d alguien muy especial al q todos extrañaremos pero yo lo estoy continuando. y la conti estubo muy chida y continualo pronto!!!!!!!!!!!!!!!!!!! y deja d ver tanta xnografia q si sigues escupiendole a la compu x ver a una tipa buena nunca vamos a tener conti!!!!!!!!!!!!!!!!!!

 

Re: Alguien Dijo Miedo...???

Jejeje, que bien que les gustara, pronto muy pronto
siii, muy pronto, jajajaja, lo kntinuare de hecho
creo que sera en unas kuantas horas, espero xD

Muchas thanks por sus kmentarios me alagan ;)

Chau

 

Re: Alguien Dijo Miedo...???

Que onda aki esta, ya llego la
knti, la knti, jejeje xD
See lo se tanto alboroto por una
knti, ¬¬ jejeje pero a mi me gusta
festejar xD de todo xD

Va para todos y todas las que me leen.
Como es la 2da parte del kpitulo anterior,
no dara miedo, por que todo es a su tiempo xD
jejejejeje.
Espero sus kmentarios.

Chau.

Despues De La Tormenta...... No Viene La Calma

Kagome: *¿De donde salio este libro?, nunca lo había visto antes* -Veía el librillo, no se animaba a leer lo que en el decía, así que lo dejo en el lugar donde lo encontró- Mejor busco lo que en verdad, me importa.

Va a la computadora, e inicia su sesión en Internet, busca en favoritos lo que decía de Ayame, lo encontró y veía lo que decía de ella.

Kagome: Veamos, esto es un video, dios porque la grabaron, y como es que esta en Internet. Ah, veamos que dice:

[Esto es lo que dice en la pantalla de la computadora]

Se ve a una joven en bata larga y blanca, los cabellos rojos un poco enmarañados, ella esta esposada, tiene la mirada perdida y de vez en cuando ve a la cámara, con esos ojos que solo transmiten una gran confusión, al parecer no sabe ni siquiera en donde esta.
Uno de los hombres, al parecer el doctor a cargo de la entrevista, habla primero.

Doctor: Muy bien, Ayame, dinos por favor, ¿Qué fue lo que paso?

Ayame: Lo que nos paso esa noche no fue un simple accidente en el auto, esa noche mi mejor amiga, fue brutalmente asesinada, por una espectro, esa cosa se levanto de una cama, jajaja, de pronto solo vi que a ella, le arranco la cabeza -hablaba pausadamente- a mi me dio con una enorme daga en el estomago, nosotras gritábamos el nombre de nuestros novios, pero ellos no lograban entrar, por fin, la puerta se abrió y entro Kouga, Inuyasha detrás de el, Kouga me levantó, e Inuyasha solo vio el cuerpo de ella en la cama, jajaja, el cuerpo se levanta y su cabeza regresa, el cuarto se pone de color rojo y el piso se mueve, ella trata de matar a Inuyasha, y le dice que todo fue su culpa, Kouga me deja y ayuda a su amigo, salimos de aquel cuarto y a la vez de la casa, arranca el carro y Kouga maneja, una monja se nos aparece y despues el carro se va… cae en una barranca, no se como fue pero… salimos con vida, jajaja, como ve doctor. ¿Verdad que van a investigar la casa esa? ¿Verdad Doctor?
Doctor: Si Ayame, ahora, por favor… -Se corta el video-

Kagome, se había quedado con la boca abierta, no era posible, que demonios había sido lo que esa pobre chica, había pasado. Nunca se había sabido de que alguien, quedara loco por sufrir un accidente de auto, pero y si no había sido un simple accidente, si era verdad lo que ella había dicho en el video, tenía que averiguarlo.

Kagome: ¿Qué fue lo que les paso?, *¿Será verdad, lo que esa chica ha dicho?*
Alguien toca a la puerta del departamento, ella aun estaba en esa pequeña pijama que usaba para dormir cuando hacía calor en las noches, [un short y una playera de tirantes, de color negro, pero eso si el cabello perfectamente bien peinado]. Pero se imaginaba que era su amiga Sango, ella casi siempre, si no es que siempre, dejaba las llaves olvidadas, y como ya eran las 11:30 se imagino que era ella.

Kagome: Ay Sango, por favor cuando vas a aprender a no dejar tus llaves -abriendo la puerta- Para otra ocasión, te dejara afuera. Pasa anda.
Inuyasha: Bueno, en cuanto vea a Sango se lo diré –Un poco sonrojado y viendo sus pies-
Kagome: ¿Eh? –se gira lentamente, con la cara tan roja como una fresa- Inu… Inu… Inuyasha, ahh, -sale corriendo en dirección a su habitación, para ponerse algo más decente- Ahh, con esto voy a aprender a vestirme temprano.
Inuyasha: -Entra en el departamento y se siente para esperar a Kagome- *Creo que es muy linda, hasta cuando se sonroja*

Kagome, salio de su habitación, vestida con una playera negra, unos jeans y zapatillas deportivas negras.

Kagome: Ah, esto, discúlpame por… ahh.
Inuyasha: No, te, no te preocupes, bueno venía por que te quiero invitar a tomar un helado, esta haciendo mucho calor y…
Kagome: Acepto, vamos pues.
Inuyasha: Bien, salgamos entonces.

Y ellos se fueron al parque, un lindo tiempo juntos, pensaron que ahora deberían salir más seguido.

En el cuarto de Kagome, se que algo o alguien salía de entre las paredes, aquel mismo hombre encerrado en el cuerpo de un niño, admiraba las fotos de Kagome, que ella tenía siempre en su tocador alrededor de su espejo, tomo su peine y lo observaba detenidamente, al parecer ella era lo que el había esperado, al fin su tonto hermano había dado en el clavo, ella, tenía lo que necesitaban para volver a ver a su padre y así junto con el sus poderes, el verla asustada en la casa de terror, ese rostro con algunas lágrimas en los ojos, en verdad que le había encantado, esa joven que no aparentaba más de 17 años, lo volvía loco, simplemente era eso, el ahora deseaba tenerla, y el mismo ofrecerla en sacrificio.

Hakudoshi, a pesar de que aparentaba ser un niño de alrededor de 10 años, el sabia muy bien como mover a la gente a su gusto, a pesar que resucitó hace ya casi 2 años.

Hakudoshi: Ja, linda mujer, serás de nadie más -tomando una de las fotos del tocador y guardándosela- Pronto, muy pronto me ayudaras a tener el poder que me merezco. –Dibuja una mueca llena de sarcasmo y desaparece- Kagome…

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Kagome e Inuyasha regresaban del parque, ambos con una nieve doble de fresa, y saboreándola, parecía una pareja de amigos que tenían años de conocerse, algo que en verdad era muy extraño, por el simple hecho de hablándose eran muy pocos días, pero a ellos no les importo, la gente los veía caminar y como si de una pareja de recién casados los saludaban muy formalmente.

Inuyasha: Kagome, alguna vez te has preguntado el porque vivo solo, y casi no salgo de casa.
Kagome: *¿Qué acaso puede leer la mente?* Por… porque lo dices.
Inuyasha: Eh, no por nada, será mejor que regresemos, creo que tú amiga, invito a mis primos y a mí a comer en su casa.
Kagome: ¿Eh? Yo no sabia nada. Ay Sango tú siempre invitas a gente y hasta despues me avisas, jajaja, siempre es así. –Sonriéndole a Inuyasha-
Inuyasha: No te molesta.
Kagome: Claro que no -Tomando a Inuyasha del brazo- Vamonos.
Inuyasha: Si, vamos.

El día calurosa, se transformo en uno muy frió, el aire comenzó a hacerse muy fuerte, el sol fue cubierto por unas nubes, extremadamente negras, cosa que a la pareja de jóvenes, impresiono, pero nuevamente Kagome decidió por caminar tranquilamente, ahora al lado de Inuyasha, la lluvia parecía que seguía a Kagome, llego el momento en que los rayos nuevamente hicieron su aparición, solo que estos comenzaron a caer a tierra, y lo que más extraño parecía era que caían aproximadamente a un par de metros de Kagome e Inuyasha. La calle carecía de un lugar para cubrirse y a donde quiera que ellos iban, también lo hacían los rayos.

Kagome: *Esto es demasiado anti natural, esto no puede estar pasando* -Corría al lado de Inuyasha- Ya casi llegamos.
Inuyasha: *Esto es raro, por que caen tan cerca de nosotros* Demonios –Se tropieza y cae al suelo- Ay, mi tobillo.
Kagome: -Se detiene- Inuyasha, recárgate en mí, vamos -Trataba de mantenerlo en pie, pero llego un momento en el peso los venció- El rayo.

Un rayo iba directamente a ellos, el sonido se escucho seco, ninguno se atrevía a abrir los ojos, hasta que…


TO BE CONTINUED......