Alberca

Miré a Michael con una gota de sudor en la cara. ¿Ser bueno en informática te hace ser bueno en robótica? Si es así le voy a decir a Brooke que me haga algo.

—Esta muy bien. Se ve que eres bueno. —le respondí y volví a mi dibujo tranquilamente.

En la alberca se respiraba paz y tranquilidad hoy.

 

Entre al lugar cargando una bola de papel, Evangelin me la lanzo al pelo y al encontrarla escribí en mensaje de "Muy gracioso, andar lanzando bolas de papel en el pelo del resto" La mire con un chico que nunca antes había visto, ha de ser nuevo pensé, me senté en una zona con pasto y apunte, lance la bola, pero me sentí muy apenada cuando en lugar de darle a Evangelin, le dio al chico nuevo.

 

-Vale, nos vemos más tarde -dije-
Recogí mis cosas y me dispuse a caminar un rato

 

—Adios. —reí cuando la bola de papel le dio y nose dio cuenta.

Cuando ya se fue la cogí y la desdoblé y busqué con la mirada a Daniela. Al encontrarla sonreí.

—Yo no fui, fue Crow que estaba detrás tuya en la biblioteca. —mentí entre risas y me volví a tumbar y seguir dibujando plácidamente.

 

Suspire de alivio al darme cuenta de que ni noto la bola de papel que lance a el por error.
Me levante y me senté junto a Evangelin, fruncí levemente el ceño.
—¿Que tan ingenua crees que soy? Nadie creería que Crow me lanzo una bola de papel al pelo.

 

—Era broma, no te enfades. —le sonreí tranquilamente. —No creo que Crow se apuntara al juego de la bolita. Además, yo se que no eres ingenua para nada.

 

—No estoy enfadada—. Mostré una sonrisa en mi rostro—. No me imagino a Crow lanzando bolas de papel con mensajes en ellos como si tuviera 8 años—. Solté una carcajada al tener una imagen tan graciosa en mi mente—. Exacto, no soy ingenua.

 

Reí igual ante su respuesta. Crow era demasiado "maduro" para esas cosas.

—A veces, en situaciones de miedo e incertidumbre como la que estamos pasando todos ahora, es bueno reirse y jugar un rato. Te liberas un poco de tanta presión. —sonreí.

 

—Tienes razón—. Me acosté en el suelo junto a ella—. ¿Que dibujas?

 

—Tienes razón—. Me acosté en el suelo junto a ella—. ¿Que dibujas?

 

—A mi gata. —sonreí. —La hecho de menos.

Dibujar. Eso me hacia entretenerme e intentar no pensar en lo mucho que echo de menos estar en casa.

 

Salí de mi habitación más temprano de lo normal, ya me estaba acostumbrando a levantarme sin la necesidad de la luz del sol, me dirigí a la alberca para ver si allí podría adelantar algo de mi trabajo, ya que ayer en la cocina no me funcionó mucho.

— Hola...— saludé a las presentes para dirigirme a la pequeña área verde de la alberca para sentarme a trabajar

 

Observé que Brooke entraba a la alberca con su ordenador. Hacia dias que no la veía.

—Hola Brooke. —la saludé simpáticamente mientras acababa de hacerle los últimos retoques a mi dibujo.

 

— Días sin vernos Evangelin... — dije riendo un poco observando que ella se encontraba dibujando — ¿Has dormido bien? —le pregunté

 

—Pues, bastante bien. Poco a poco una se acostumbra a todo esto. —le respondí dejando a un lado mi cuaderno y sentarme bien. —¿Y tú?

 

— Pues un poco... después de que monokuma nos visitara me quede bastante sorprendida como para poder dormir bien...

 

Aquello me sorprendió.

—¿Monokuma os ha visitado? ¿A pasado algo Brooke? —le pregunté un tanto preocupada.

Cuando el director aparece no es nada bueno, o eso creia yo.

 

— Que va... nos dejo comida en el refrigerador, porque ya casi no había — dije tratando de tranquilizarla — También le hemos preguntado sobre los dos alumnos demás pero no nos aclaró nada...

 

Lancé un suspiro de alivio ante su respuesta.

--Hablando de los dos nuevos, hace rato conocíval alumno 17, se llama Michael. Lo que me extrañó es que tenía tu mismo talento, Brooke.

 

Suspiré por su comentario y me coloqué mis guantes rojos para prender mi computadora

— Créeme que a mi me extraño más... pero dime, es informática completamente o se va a otras ramas como la mecatronica...