One-shot de Naruto - Love is [Sasuke&Sakura]

Autora: LacrymosA
Título: Love is
Personajes: Uchiha Sasuke & Uchiha Sakura
Nota: One-shot para la actividad de la Subasta de Konoha. Con esto pago mi deuda hahaha
Dedicatoria: A Hellita/Insane, tardé pero llegó<3

Love is​

Pestañeó varias veces para estar segura de lo que sus ojos verdes veían, debía ser un sueño.

—¿Sasuke-kun?

Claro, era obvio, estaba soñando despierta como muchas otras veces. Nada fuera de lo normal.

—Tadaima.

Oh, no, no lo era. Era real, en serio su esposo estaba ahí de pie en la entrada de su casa, y ella con cara de espanto y sin mover un músculo.

Reaccionó con rapidez, sacudió la cabeza para despabilarse.

—Perdón, perdón, pasa —se hizo a un lado permitiéndole la entrada— No sabía que venías.

El Uchiha se adentró a la casa, observó un poco su alrededor para luego fijar la mirada en su esposa.

—Sarada está en la academia, por si la buscabas.

—Ya veo.

El silencio inundó el lugar.

Sakura se debatía mentalmente en qué hacer después. Eran muy pocas las veces que Sasuke volvía a la casa, y cuando lo hacía, siempre estaba esa incomodidad en ella que no le permitía actuar como una esposa normal. Comprendía a la perfección que su esposo no vendría con una gran sonrisa diciéndole lo mucho que la extrañaba, así que dependía de ella acabar con incómoda situación.

Se armó de valor y adornó su rostro con una sonrisa.

—Debes estar cansado, ¿verdad? —trató de sonar lo más natural posible. Se le acercó por la espalda y le sacó la capa que siempre traía puesta. Él observaba cada movimiento—Ve a darte una ducha mientras preparo algo para almorzar, ¿está bien?

—Gracias.
.
.
.
.

Fueron minutos tranquilos para Sakura. La casa continuaba en quietud, lo único que se escuchaba era el ruido que ella misma hacía al preparar el alimento y a lo lejos también se oía el sonido de la regadera en el baño.

Sonrió.

Su familia no era para nada convencional, habían tenido altibajos que poco a poco pudieron ir solucionando. Sasuke no estaba presente la mayor parte del tiempo. Aún así, sabía que no lo hacía por maldad, comprendía que ese era su deber y no podía hacer más que apoyarlo.

La sonrisa dulce y los ojos llenos de orgullo de Sarada cada vez que su padre volvía hacían que todo esfuerzo valiera la pena. Sus ausencias no eran tan prolongadas como antes y estaba agradecida por eso.

—Sakura.
—¿Eh?

Pero todavía no se acostumbraba a ciertas cosas.

—¿Dónde dejo esto?

Volteó y casi se chocó con el pecho descubierto del Uchiha. Un montón de ropa sucia le bloqueó el camino.

—Y-Yo me encargo.

Le arrebató las prendas de la mano y salió disparada al cuarto de baño. Si su hija estuviera presente se burlaría de ella como si no hubiera un mañana.

Maldito Sasuke y sus abdominales.
.
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.
.

—Era una bebé preciosa, ¿verdad?

Sakura lo encontró en el cuarto de ambos sosteniendo una fotografía de Sarada, la volvió a colocar en el lugar cuando su esposa entró a la habitación. Se acercó a él hasta quedar a su lado.

Sasuke asintió con un movimiento de cabeza.

—¿Preguntaba mucho por mí?
—Lo hacía... ¿Sabes lo que me preguntó una vez cuando tenía cuatro años?
—¿Qué?
—Si nos habíamos besado alguna vez.

Sakura sonrió con nostalgia al recordar ese momento, Sarada tan pequeña pero con una curiosidad enorme. Sasuke la miró esperando que continuara.

—¿Qué le respondiste?
—Que existe algo mejor que un beso.
—Cochina.
—¡Sasuke! ¿Tú también? No me refería a eso.

No podía creer que tanto su hija como su esposo pensaran lo mismo. Él sonrió de medio lado.

—Sabes de qué hablo —instintivamente tocó su frente.
—Lo sé —extendió la mano hasta tocar la frente de Sakura, una leve caricia que bajó hasta su mejilla.

—Nos alegra que estés aquí —lo miró a los ojos, él hizo lo mismo.

Sakura no recibió respuesta, tampoco esperaba una. Pero lo que vino a continuación la tomó por sorpresa.

Los ojos del Uchiha no se apartaron ni por un momento de los de ella, era como si quisiera expresarle algo que con palabras no podía.

El corazón de Sakura comenzó a latir con rapidez, veía como el rostro de Sasuke se iba acercando más al suyo hasta que sintió el suave contacto de sus labios.
.
.
.
.

—Sakura.
—¿Sí, Sasuke-kun?

El Uchiha tardó unos segundos en proseguir, ella lo comprendió.

—Te...

—Shh... —lo silenció dulcemente colocando sus dedos en los labios de su esposo— Lo sé. Yo también.

Fin
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