Capítulo 1: "Viviendo en las alcantarillas" Algunas veces nos preguntamos ¿Qué haré con mi vida? o ¿Será posible sobrevivir hasta el final? ese era el caso de Samanta Bradley una chica de 15 años que vive en la ciudad de Nueva York con sus padres en un pequeño apartamento, con su madre Flora y su padre Steve su hermana pequeña de 8 años Kaitlyn y su hermano mayor de 17 años Mark su padre no tiene muy buen empleo y es el único que tiene, su madre trabaja muy duro limpiando y cuidando de las 3 criaturas. Samanta vive en un vecindario de clase muy baja, y se educa en una escuela pública, por lo poco que gana su padre al mes, es apenas una mesada, su madre trabaja muy duro cuidándolos a ella su hermanita pequeña que lamentablemente sufre de síndrome de down y al holgazán de su hermano mayor. A Samanta le duele ver a su familia hacer tantos sacrificios para nada ¿No se imaginan el dolor que sufrirían al estar en el lugar de Samanta? a mi si personalmente me afectaría. Pero Samanta no es una de las personas que se dan por vencido tan fácilmente ella luchará para apoyar y ayudar a su familia en lo que fuera necesario. Era un 6 de Febrero y Samanta iba rumbo a la escuela como era de costumbre se desayunaba y su madre le daba un beso en la frente y salía del viejo apartamento, caminaba lentamente las escaleras antiguas de aquel edificio gris, al centro del barrio pobre con casas a medio construir, era una zona muy descuidada y desprotegida por el gobierno ya que estaban en el olvido, Samanta miraba con recelo a la gente que pasaba por su lado. Ella siempre miraba con recelo a las personas que no conocía, simplemente tiene una amiga, su nombre es Luna vivía en Japón pero sus padres se vinieron a Estados Unidos por causa de un enemigo común para los padres responsables el desempleo, Luna es muy buena persona que vive con sus padres de clase media, ella suele tener costumbre de esperar a su amiga en frente de una parada de autobuses no tan lejos del vecindario de donde vive Samanta. Luna: ¡Sam! -Sam era el apodo de Samantha en la escuela- Vamos que se nos hace tarde. Ambas chicas corren a la escuela antes de que toquen para entrar a clases. Luna: Justo a tiempo... -Dijo ella un poco cansada pero como siempre animada. -Sam ¿Cómo te fue en este fin de semana. Sam: Bien y a ti. -Dijo con ese tono frío de siempre. Luna: Yo fui con mi familia a un parque de diversiones. Sam: Se oye divertido. Luna: ¡Es genial! y más cuando estaba en la montaña rusa y... ¡Sam! no me dejes hablando sola. -Pero Sam ya había tomado asiento. Luna: ¡No es justo que cuando te cuento algo divertido siempre tengas que dejarme hablando sola! -Dijo ella tomando asiento justo al lado de Sam. Profesor: Buenos días alumnos ¿Cómo les fue en este fin de semana? -El profesor de ciencias de Sam es muy amable y siempre está al tanto de sus alumnos. Todos: ¡Buenos días profesor Martines! Profesor: El día de hoy tenemos un nuevo alumno, su nombre es Daniel. Daniel es un chico de anteojos y pocas palabras, es un genio en física y química entre otras materias. Profesor: Bueno puedes sentarte en ese asiento que queda al frente. -Dijo el señalando el lugar con un folleto verde obscuro. El chico delgado se sienta y saca uno de sus cuadernos mientras que el profesor manda a Samanta a copiar una teoría en la pizarra. Luego de una larga hora de Ciencias tocan para la hora del almuerzo pero antes el profesor le pide un favor a Samanta... Profesor: Sam. Sam: ¿Qué desea maestro? Profesor: Me puedes hacer el favor y llevar estos informes a la dirección. Sam: No hay problema. Ella fue rumbo a la dirección, pero en el camino por accidente choca con un chico.... Chico: ¡Oye! ¡Pero que te ocurre! Mejor fíjate por donde caminas, para eso tienes los ojos si es que estás ciega. -Y se marcha, pero Sam no le hace caso a su crítica y sigue caminando pensando. Sam: "¿Y a este tipo, que le ocurre?" Al llegar a la puerta donde se encuentra la dirección como toda persona educada toca la puerta antes de entrar y una voz le dice: PASE. Ella entra y saluda. Sam: Buenos días señor director. Directr: Buenas Samanta, hace mucho que no te veía ¿Cómo estás? Sam: Bien... supongo. -Dijo ella en un habitual tono frío. Directr: Que bien, si me permites quiero que le entregues este sobre a tu madre, que se lo hagas llegar por mi parte. Sam: Claro. Bueno nuestra pequeña chica va a hacia la cafetería a almorzar y su amiga Luna afortunadamente le hace una seña con su mano para que se venga a comer con ella y Daniel. Luna: ¿Dónde estabas Sam? Hace siglos te estaba esperando. Sam: Un simple mandado. Luna: Mira Samy el es Daniel, el chico nuevo de nuestra clase. Daniel: Hola Sam. Sam: Un placer Daniel. -Dijo amablemente pero seria. Así transcurrió la tarde hasta el fin de clases. Luna: Oye Sam si quieres puedo ir a tu casa y hacemos la tarea de Matemáticas juntas. Sam: Lo siento Luna pero creo que no... no puedo invitarte, no es por nada malo pero a mamá no le gusta recibir visitas inesperadamente. Luna: Es una pena entonces nos vemos mañana... Sam: si... Samanta fue a su casa algo triste pues no pudo creer que pudo decirle eso a su amiga pero no quiere que vea su situación social, ni que dejen de ser amigas ese es su miedo mas grande. Samy puede amparentar una persona fría y todo lo demás pero es un amor con su hermana menor y alguien triste y muy deprimida pues le duele ver la crisis que atraviesan sus familiares. Llega a su casa y su madre la recibe con mucho cariño. Flora (madre): Hija ¿Cómo te fue hoy en la escuela? Sam: Bien, ah, esto es tuyo dijo el director que te lo hiciera llegar. Flora: Gracias ve y cámbiate que tengo la cena lista. Sam: Gracias. -Dijo con una leve sonrisa. -Bueno, en eso Samanta siempre cambia de actitud cuando está cerca de su familia. En fin, Samy hace lo que su madre le mandó a hacer y cuando salió con un cena lista que era chocolate caliente con tostadas, terminan de cenar y Samanta hace su tarea de matemáticas pero a mitad de un ejercicio complicado se va la energía eléctrica. Sam: ¡¡¡MAMA!!! ¿QUÉ PASÓ CON LA ENERGÍA ELÉCTRICA? Flora: Ya voy con una vela mi hijita. Sam al ver la presencia de su madre frente a su habitación con dos velas le pregunta... Sam: Mamá ¿Qué pasó con la energía eléctrica? Flora: Parece que la cortaron como la semana pasada. Sam: Demonios ¡Cuando van a solucionar esto! Flora: Samanta las cosas no son como una varita mágica, nuestro barrio es un 0 a la izquierda en la sociedad lo único que hay que hacer es llegar hasta el final. Sam: Ya me harté de vivir así, ya no aguanto más al ver la situación que pasan ustedes y también ver a papá trabajar horas extras sin conseguir nada... me da rabia y también la pequeña Kaitlyn si tuviéramos mas dinero le pudiéramos comprar más medicamentos. Flora: Te entiendo Sam pero las cosas no son tan fáciles, hacemos todo lo posible pero no podemos hacer nada mas que seguir hacia adelante para ver que nos prepara la vida. Ahora cero pretextos y hacer la tarea como se pueda jovencita. Sam: Bieeeeeeen. Se puede decir que fue toda una molestia hacer la tarea así, pero Samanta quiere hacer lo mejor posible para ir a la universidad y echar hacia adelante. Sam: Por fin terminé. -Sam cierra el cuaderno y lo pone en su mochila y después se pone la ropa de dormir, después cuando va a la cocina a beber algo de agua mientras tanto no pudo evitar escuchar una importante conversación que se llevaba a cabo en la habitación de los padres de Samy hablando algo muy pero muy serio... Flora: Steve ¿Y ahora que haremos? Steve: No se amor, que vamos hacer si no consigo trabajo para el próximo mes. Flora: Lo que se es que si no nos damos prisa se morirán de hambre ¿Qué haremos? Steve: Lo que queda por hacer es que uno de los dos a primera hora vaya a conseguir trabajo. Flora: Mis niños, y ahora... -Y Flora se puso a llorar, con lo que Samanta pudo escuchar se quedó sorprendida y pudo susurrar en voz baja para que no la escucharan... Sam: Papá se quedó... sin trabajo... -Y se fue cabizbaja a su cama a dormir para saber que le esperaba a la mañana siguiente, solo tenía miedo miedo de enfrentar la realidad miedo de saber que le espera, si podrán vivir ella y su familia en las condiciones que están y especialmente la pequeña Kaitlyn. A la mañana siguiente...
Capítulo 2: "Un día gris" A la mañana siguiente, Samanta se levantó de muy buen humor hasta se podía ver el brillo de felicidad en su rostro y su leve sonrisa en sus labios. Sam: ¡Que lindo día! Flora: Samanta levántate si no quieres llegar tarde a la escuela. Sam: ¡Tarde! Demonios, se me había olvidado activar la alarma. Samanta se levanta de su cama y se pone el uniforme de la escuela los cuales son una blusa de color rosado pastel con una minifalda de cuadros color fucsia y unos zapatos negros de muy mala calidad, y son los únicos que tiene para ir a la escuela coge su malgastada mochila color verde pastel y se desayuna. Samanta se veía muy contenta que hasta bajaba los escalones del edificio de donde vivía brincando en ellos que en uno de ellos se resbaló y se dio en el.... trasero. Sam: Demonios. No volveré a bajar de esa forma ya no eres una niña pequeña Samanta. -Se dijo así misma parándose del suelo mientras sobaba su adolorida parte trasera. Como era de costumbre Luna estaba esperando a Samy en la parada de autobuses. Luna: ¡Sam! Ya estaba a punto de irme. Sam: Mejor deja los pretextos y empieza a correr. Luna: ¡A la orden! Las chicas empezaron a correr rápido, iban muy atrasadas y necesitaban llegar a la escuela antes de que tocaran la campana. Sam: Tenemos que darnos prisa, faltan 5 minutos para que toquen la campana y apenas estamos a dos cuadras de la escuela. -Dijo ella aumentando la velocidad al igual que su amiga. Luna: Pues démonos prisa. Iban llegando a la escuela pero no llegaron a tiempo hace 2 minutos tocaron la campana para iniciar las clases. Luna: No lo logramos... -Dijo ella muy pero muy cansada pues había corrido mucho y su ánima estaba a punto de salir al cielo. Sam: C... cielos. -Dijo ella tirada en el piso tratando de cobrar el aliento. ¿?: Vaya vaya. Luna: Presidenta... estudiantil.... Megan Luther una chica seria autoritaria y muy fría, es una de las cualidades que destacan a su tenebrosa persona. Megan: Ya saben que está prohibido correr por el paseo peatonal. Luna: Fue necesario. Sam: Es... esque... yo y... tuvimos que correr... y... yo. Megan: Esta vez se las perdono pero no vuelvan a repetirlo. -Ella se va dejando a las chicas sin aliento. Luna: Bueno creo que ya tenemos que irnos a clases Sam. Sam: M... me ayudas. Luna: Claro. Ambas fueron a su salón donde estaban dando historia. Sam: Maestro, ¿Podemos entrar? Prof: Claro, y a su amiga también mejor dense prisa que no tenemos todo el día. -Dijo muy alegre el señor de mediana edad. La clase de historia transcurrió muy rápido, hasta la hora del almuerzo. Daniel: Chicas que les ocurrió a la hora de entrada que no las había visto. Luna: Es una historia muy larga querido Dani muy larga. Sam: No hubiéramos llegado tan tarde si Bruja de Vill no se apareciera. Luna: Esa chica parece una retrasada mental da mucho miedo. Sam: Si.... Daniel: A esa aun no la conozco así que me quedo callado. El trío de estudiantes camina por los pasillos, y entonces Sam choca con el mismo chico de ayer. Chico: Por favor ¡Otra vez tu! Estás ciega o que. Sam: Te pasaste niño decrépito. Chico: No me interesa si seas niña o no pero te daré la paliza de tu vida. Luna: Chicos no hay por que pelear... -Dijo ella interponiéndose entre los dos. Chico: Cállate fea esto es entre la rarita y yo. Luna: ¡A quien le dices fea lunático enfurecido! Daniel: ¡Chicos! No hay que recurrir a la violencia. Chico: Cierra el pico nerd. -Y este le arroja los anteojos por los casilleros quedando Daniel casi ciego. Un chico casi siego dos chicas y un chico peleando y una presidenta observándolos no tuvo más opción que recurrir al plan de emergencia. Prof de ciencias: Ethan no puede ser que estés peleando con niñas. Ethan: Ellas empezaron. Prof: Bueno chicos ustedes 4 estarán en la sala de castigo iré a hablar con la secretaria. Si, los cuatro estaban ahí muy enojados. Ethan: Que fastidio. Sam: Cuando descubra quien nos delató le daré la paliza de su vida. Luna: Te apoyo. Daniel: Y yo ni sé que hago aquí. Luna: Cuando hay cuatro caen tres y luego el último. Daniel: pero aun así no debería estar aquí. Luego de esperar al maestro.... Prof: Aquí está la secretaria los llevará a la sala de castigo menos tu Samanta, tengo que hablar contigo. Los chicos fueron a la sala de castigos y el profesor se sienta al frente de Sam. Prof: Samanta Bradley. -Y suelta una pequeña risita. Sam: Que... Prof: Nada. -Dijo el joven profesor de unos 22 años acariciando la mejilla de la joven con el índice pero Sam al ver la acción del profesor quita su mano de su rostro. Sam: Que insinúa... Prof: Nada... -El maestro le tapa la boca a Samanta y la lleva a un armario. Si, un día que había empezado tan bien, y ahora es una pesadilla los días felices a veces los días que aparentan ser felices son en realidad una pesadilla en vida real. Samy se despierta pero se despierta muy confundida con un quizá... ¿Qué está ocurriendo? Su blusa estaba desarreglada y estaba llena de moretones en la barriga aparte de todo esto ¡Estaba encerrada en un armario que miércoles ocurre aquí! Samanta abre un poco la puerta del armario y mira de reojo todo el lugar y no ve a nadie, esta es la oportunidad perfecta de salir corriendo. ¡PUUFF! Sale a la velocidad de la luz, coge sus pertenencias en el salón y se va de la escuela a su casa llorando corre y corre hasta llegar al barrio y al llegar al edificio sube las escaleras como si la estuvieran persiguiendo estuvo a punto de resbalarse en algunos escalones pero no le importó, luego toca la puerta del apartamento y su madre abre muy asustada pues pensaba que era otra cosa. Flora: Samanta que... -Pero no pudo completar la frase ya que ella iba muy deprisa a su habitación. Samy Se quitó la blusa y vio los moretones que el mínimo roce ya le dolían se puso una de las camisetas más cómodas que tenía y se la puso se acuesta en su cama y con las sábanas se cubre de pies a cabeza. Flora: ¡Samanta! ¿Que te ocurre...?
Capítulo 3: "Torrente lágrimas" Flora: ¡Samanta! ¿Qué ocurre? Llegaste muy temprano. Pero ella no respondía... Flora: Sam, ¿Qué ocurre? -Pero no reaccionaba- Samanta... ¡¿Qué ocurre?! Sam: No quiero que nadie me hable... así que vete. -Samanta se envuelve más en las sábanas. Flora: Vamos Samy solo quiero hablar contigo un momento. Sam: ¡Hoy no es un buen día así que vete! Su madre se fue pero algo que ella no notó es que Samanta estaba llorando mientras pensaba "¿Cómo me pudo hacer esto?" . Sufría tanto al recordar los golpes que le daba su maestro, solo deambulaba en su mente el ¿Por qué? ¿Por qué lo hizo? pero para olvidar el asunto Samanta se decide escuchar música en su viejo reproductor de música donde se metían Cds que se lo había regalado Luna hace 4 años, luego saco de una pequeña caja y saca un CD de la Oreja de Van Gohg que se lo había regalado su hermano en el día de su cumpleaños, en eso pone su canción favorita "La niña que llora en tus fiestas" Leire Martínez. Cantaba la canción en voz baja... Vuela un columpio vacío sobre mi cabeza,Vuela por el cementerio de mi voluntad,Sigo buscando la niña que llora en tus fiestas,suenan campanas sin flor por mi funeral. Mírame con estrella polar a mis pies,Vuelvo a casa perdida otra vez,Por que no se dejar de adorarte, ¡Mírame! Vuela un columpio vacío rozando la arena,Deja las huellas del ángel caído al pasar,Huellas que siempre me llevan a ti quita penas,Como la dosis de vida fugaz que me diste a probar. ¡Mírame! con la estrella polar a mis pies,Vuelvo a casa perdida otra vez,Por que no se dejar de adorarte. Pienso en ti cada vez que me alejo de mi,Cada vez que prefiero morir,Desde el día en que tu me dijiste,Tu carita es una rosa sin abrir. Mírame con le estrella polar a mis pies,Vuelvo a casa perdida perdida otra vez ,Por que no se dejar de adorarte. Piensa en mí cada cada vez que me miras así,se me cosen los labios a ti,y la luna me pinta los ojos. Mírame cada vez que te vas pienso en ti,Cada vez que prefiero morir,Cada vez que me besas así,Cada vez que vas mírame. Sam terminó de cantar pero cuando lo hizo, sintió una gran pena en su corazón sentía frío y culpabilidad, se para de su cama y busca a su madre.Sam: Mamá.Flora: ¿Ya estás mejor Sam?Sam: No se... supongo...Flora: ¿Por qué no te sientas conmigo?Sam se sienta en la mesa en la que suele comer, en la vieja mesa con delantales blancos con bordes rojos con varios hoyos.Flora: Samy... que te pasa. -Dijo ella dándole un cálido abraso a su hija que se sentó al lado de ella.Sam: Mamá...Flora: ¿Qué? Sam: Mamá, es cierto que papá perdió su trabajo. -Dijo soltándose del abraso se su madre, poniendo una cara nostálgica y gris, pero aunque Flora quisiera ocultar la verdad no podía...Flora: Si, tu padre en este momento está buscando trabajo, tenemos la opción de irnos a Tennesse y quedarnos en la casa del padre de Steve pero aun no estamos seguros...Sam: Con que eso.Samanta se para de la silla y entra a su cuarto mientras que una lágrima atrevida sale de su ojo derecho, Sam estaba enojada, no sabía por que pero en su cabeza tenía muchas cosas que maldecir.Mientras tanto...Steve: ¿Que te ocurre cariño? ¿Por qué lloras?Flora: Es que... le he dicho a Sam en la crisis que estamos pasando...Steve: No te preocupes, pronto saldremos de esto, te lo prometo. ---------------------------Se imaginan la miseria que pasa la familia Bradley, un padre desempleado una madre preocupada una pequeña enferma una adolescente deprimida y el hijo mas grande haciendo nada, es una situación desesperante muy desesperante ¿Qué pasará con esta humilde familia?
Capítulo 4: "Samanta, una víctima" Después de todo lo que había pasado el día anterior "Torrente de lágrimas" todo transcurrió totalmente normal, eran las ocho horas y Samanta se levanta de su cama pero... estaba más suave y su habitación era ¿Blanca? y todo era realmente delicado y no tiene la usual camisa vieja de dormir era una bata blanca de lino fino, y cuando abre su armario, hay un montón de ropa, y en una silla de caoba había un uniforme bello, no su típico uniforme rosado con esos zapatos. Luego se los pone y le queda a la medida abre la puerta y ve una escalera en forma de espiral baja cada uno de ellos y abajo hay un elegante desayuno con su madre muy elegante y hermosa, y su padre muy apuesto su hermana no tenía síndrome de down y su hermano mayor estaba afeitado y elegante. Sam: ¡Pero que pasó aquí! Kaitlyn: Hermanita buenos días. Sam: Kaitlyn. Flora: Hija, será mejor que te dejes de bromas y comas que llegarás tarde al Colegio. Sam: ¿Colegio? Mark: Si tontita... Terminan de "desayunar" todos y Samanta sale para ir a su colegio entonces... todo se veía translucido. Sam: "¿Pero que está ocurriendo?" Flora: Sam, sam ¡Levántate es hora de ir a la escuela! Sam: ¡Que pasa! Flora: Sam tienes que ir a la escuela. Esas palabras de su madre le vinieron al corazón sentía espanto... tenía miedo que que pasara lo mismo que ayer en su rostro se veía una notable cara de tristeza. Flora: ¿Estás bien Samanta? Sam: Si estoy bien... Samanta se pone el uniforme coge su almuerzo y se va sin desayunar, Sam caminaba cabizbaja sin ningún interés de lo que pasaba en su alrededor, llega a la parada de autobuses pero no había nadie, pasa de largo hasta llegar a la escuela y camina por los solitarios pasillos de la escuela... ¿?: ¿Me extrañaste? Sam: ¡Maestro! -Iba a salir disparada pero el profesor la sostuvo del brazo muy fuerte. -ah... ¡suélteme! M... me lastima. Prof: ¿En serio? -Y le apretó aun mas fuerte el brazo. -¿Por qué no te lanzas a llorar de una vez por todas? Pero Samanta se resistió, aguantando para no hacer lo que el maestro le decía. Prof: Entonces te resistes a hacer lo que digo. -Luego le sostuvo el pelo desde el cráneo y lo empezó a jalar. Sam: ¡Ya basta! -Victoria para el profesor Samanta no puede aguantar tan tremendo jalón, luego el maestro levanta a Samanta por el pelo y luego la tira al piso como si fuera una basura. Prof: Nos vemos a la hora de Ciencias Samanta. -Y se marcha dejando a Sam adolorida en el frío piso de la escuela. Sam duró varios minutos para recuperarse y se levanta con algo de dificultad pero consiguió estar de pie pero al caminar cojeaba y su expresión facial cambió a una muy dura parecía un cristal irrompible. Iba caminando por los pasillos muy despacio y se encontró con Ethan. Ethan: Bradley, parece que el profesor te libró del castigo... Sam: No quiero hablan sobre eso. -Y paso de largo pero el chico sostuvo su brazo como lo había sostenido el profesor pero mas suave. Ethan: ¡A donde crees que vas! Sam: ¡AH! -Y ella cae de rodillas por el dolor. Etha: ¡¿Que pasa?! -Dijo al ver la reacción de la muchacha, pero le sube la manga de la blusa, y ve una cicatriz roja parecían marcas de dedos. -¡Demonios! ¿Que te ocurrió? -Pero ella no quiso dar información en lo absoluto- Mejor vamos a la enfermería. -Ethan se la llevó a tirones a la enfermería por el otro brazo. Sam: ¡A donde crees que me llevas! Ethan: A la enfermería, a donde más. Sam: ¡Yo no te pedí que me ayudaras! Ethan: ¡Pero lo necesitas! -Y se la lleva al sitio sin importar escándalo que armara. EN LA ENFERMERÍA: Sam: No debiste. -Dijo ella cuando Ethan de vendaba en brazo. Ethan: Si lo dejaba así podría ser peor. Sam: "¿Desde cuando le importo a este tipo?" -Pensó mientras lo seguía con la mirada cuando recogía sus cosas. Ethan: Ahora ten mas cuidado. Sam: Gracias... supongo. -Cogió sus cosas y sale a su sala de clases. Para su mala suerte tocaba el maestro de matemáticas y había llegado tarde, otra vez. Sam: "Demonios, las maldigo por siempre matemáticas" Prof. M: Señorita Bradley, nos podría explicar este ejercicio. Sam: ¿Ah? Que duro, bueno, Samanta explicó como pudo pero el maestro la dejó afuera. y al lado de su salón se quedó esperando hasta la hora de literatura que parecía jamás llegar. ¿?: Señorita Bradley, va a entrar al salón si o no. -Era su maestra de literatura, o mejor dicho la bruja de literatura. Sin más que responder se levanta del piso y se integra a clases, durante la clase Samy hizo el intento de no dormirse pero el sueño gano la batalla. Prof. L: ¡Señorita Bradley! O presta atención o se va de la clase. Sam ¡Que! Prof. L: Como iba diciendo, este mes nos concentraremos en la literatura española, asignaré un trabajo individual, analizarán en profundidad una de las novelas del escritor español Miguel de Cervantes Saavedra, eso es todo. -Tocan la campana que indica la hora del almuerzo. -Pero antes este trabajo deberá ser entregando en dos meses. Todos salen a almorzar pero Samanta no le había dado apetito, y fue a dar un paseo por los pasillos pues Luna no vino hoy y menos con Daniel pues era bastante raro para ella y no soportaría ni medio segundo con él. Pero se encuentra con la mala suerte su profesor de Ciencias. Prof: Entonces en que quedamos preciosa. -A punto de agarrarle el brazo pero ella fue más hábil y se le escapó, corre pero el profesor va tras ella aprovecha esta oportunidad ya que los pasillos y los salones están desocupados a esta hora, Samanta se esconde en una sala de música donde esperaba que el profesor saliera. Y por fortuna se encuentra con Ethan. Ethan: ¿Bradley? ¿Que hace...? -Pero no pudo continuar la frase ya que alguien estaba abriendo la puerta. Ambos estudiantes se encierran en un pequeño armario y Ethan muy confundido de pregunta.... Ethan: Pero que... Samanta: ¡Baja la voz! -Entonces se escucha el profesor hablando solo. Prof: Mmm... ¿A dónde se fue? -Dijo rascándose la cabeza y se va. Samanta mira de reojo todo el lugar y ve que no está y salen. Ethan: ¡Puedes decirme que diablos estabas haciendo! Samanta: Es que... eto... Ethan: ¿Por qué huías del profesor? Samanta: ¡Eso no te incumbe! Ethan la agarra del brazo y se pone más agresivo. Ethan: ¡No me voy de aquí hasta que me digas que rayos está pasando!
Capítulo 5: "La dura realidad" Ethan: ¡No me voy de aquí hasta que me digas que está pasando! En ese momento Samanta no sabía que hacer, seguramente no hay una ley específica en las leyes de la vida para ocasiones como estas pero algo era seguro, todos estaban actuando extraño, desde ayer el profesor a actuado muy extraño, luego Luna, no fue hoy a la escuela bueno eso no es raro pero sin avisar o llamar antes, pues cada vez que Luna no iba a la escuela llamaba a su casa bueno lo que sea que haya pasado llamaba, Sam estaba por su parte muy preocupada por su amiga su única amiga en toda la sociedad estudiantil de la escuela. Ethan: ¿Qué está ocurriendo Samanta? -Dijo este mas calmado. Pero este no era el momento de tomar las cosas a la ligera, Samanta estalló en ira. Samanta: ¡¡¡QUE DIABLOS TE OCURRE!!! ¿POR QUE AHORA TE IMPORTO, EH? PASAS TODO EL TIEMPO DESDE QUE TE CONOCÍ DICIÉNDOME RARA Y EL PECADO DEL MUNDO Y AHORA ESTÁS COMO SI TE DIERA MIEDO QUE ME PARTA UNA UÑA, ¡TE DIGO ALGO! ¡¡¡ME LARGOOO!!! - Auch, eso si que dolió pero Samanta no toleraba otra caballerosidad de parte de Ethan no decidió huir, se quedó hasta que concluyeran las clases. Samanta: "Hoy han terminado las clases muy temprano" -Pensó mientras se alejaba del gran portón de la escuela- "Esta sería la oportunidad de visitar a Luna, me he preocupado mucho por ella, espero que ella esté bien". Samanta tomó rumbo hacia la casa de Luna, Luna vivía en un vecindario tranquilo y muy bonito comparado en la alcantarilla de delincuencia en donde Samanta vivía. Sam: Bueno, aquí es... -Se decía así misma. Toca la puerta unas veces, y abren la puerta solo un poco lo suficiente para que la madre de Luna "Kahoko" se pudiera ver. Kahoko: ¿Si? -Ella se veía con los ojos hinchados y rojos, al igual que su nariz parecía como si hubiera llorado. Sam: Hola señora soy yo, la amiga de Luna ¿Me recuerda? Samanta Bradley, vine la semana pasada con Luna a hacer el pastel de manzana... -Sam no llegó a terminar la frase por la interrupción de Kahoko. Kahoko: Lo siento Samanta pero ella no está. -Y cierra la puerta bruscamente dejando a Sam paralizada. Sam: ¿Pero qué fue eso? -Samanta dio media vuelta y se va a su casa muy pensativa. Sin tener nada que hacer fue a su habitación a leer el libro asignado para su trabajo de literatura. Sam: Vaya a suerte, "Don Quijote de la mancha" bueno empecemos, Capítulo uno, ...De un hidalgo de nombre no quiero recordar... -Y así siguió leyendo en voz baja hasta que concluyó el primer capítulo. -Bueno... no entendí nada -Dijo ella tirando su libro a al piso, tirada en su cama se frota los ojos para asegurarse si estaba en la realidad, si era un sueño de esos que la invadía de sorpresa, pero no era así, todo era real - Demonios, vaya a día, todo está muy extraño desde el día de ayer, ¿Qué está pasando? Pero hablando de raro ¿Qué mosca le picó al profesor de ciencias? ahora solo está golpeándome, también está Ethan el día de ayer estaba que me odiaba pero ahora está mas caballeroso que nunca, y Luna, bueno la madre de luna, Kahoko siempre es amigable pero ahora está como si hubiesen matado a alguien muy querido. -Pero luego piensa y se levanta de la cama como si hubiera despertado de una pesadilla- Oh quizá... ¡SUS CEREBROS HAYAN SIDO SUCCIONADOS POR LOS EXTRATERRESTRES! ¡Y ESTÉN PLATEANDO INVADIR AL PLANETA TIERRA! Esperen un momento, no soy ninguna nerd, además ¡es ridículo! ¡ni siquiera los extraterrestres existen! Cae en la cama aliviada, había mucha paz en la casa, mucha, para ser exactos. Y esa paz deja dormida hasta la mañana siguiente, Sam se levanta muy temprano como a las 5 de la madrugada para ser exactos pero Sam no le interesa a que hora se levantó o no, solo se puso el uniforme e hizo el desayuno, dejándolo servido con una nota que decía: "Me fui temprano al colegio, el desayuno está en el refrigerador". Samanta caminaba por el pavimento, el día estaba nublado y frío, luego silbó una ráfaga de viento dejando a Samanta helada: Sam: Debí traer mi abrigo... -Se dijo así misma y siguió su camino a la escuela. Llega y no hay nadie, solo ella y la soledad, tenía la esperanza de que su amiga viniera hoy pero no fue así, fueron transcurriendo las horas pero Luna no había llegado, tocan la campana y espera un poco con la esperanza de ver a su amiga pero no llegó nadie, su cara reflejaba tristeza y desilusión, a punto de entrar al edificio una voz apresurada se venía hacia ella pero era Kahoko... Kahoko: ¡Samanta! no se si este sea el momento pero, esto es departe de Luna. -Le entregó un sobre que decía "Solo para Samanta". Sam: Gracias Kahoko. Sam fue a clases, pero durante ella estaba perturbada, un sentimiento la invadía pero no sabía que era. A la hora del receso fue caminando por los pasillos sola, y se encontró a Ethan. Ethan: Bradley. -Dijo el con su actitud seria- Estás triste... y si te pregunto porque me dirás que no me incumbe o que me vaya de tu vista. -Pero no era así, a punto de irse.... Sam: Ethan, ¿Has visto hoy a Luna? Ethan: No, no le he visto desde ayer. -Con el testimonio de Ethan, ella se puso aún más triste y se fue del lugar. El tiempo pasó tranquilo, para los demás alumnos parecía que la hora de la salida era eterna pero Samanta no le dio importancia. ¡Por fin! Salida de los estudiantes, Samanta cogió rumbo a su casa pero a medio camino una gota cayó al suelo luego dos y después comenzó a llover, al parecer, hoy no era el día de Samanta todo estaba en contra de ella, solo esperaba que sus familiares no lo estuvieran. Llega a casa toda empapada pero no había nadie, a Samanta no le da importancia la ausencia o no de sus familiares, entonces, tira su uniforme en una silla para que se seque y secaba sus zapatos con un viejo trapo se da un baño y se pone cómoda, dura varios minutos sentada en la cama mirando hacia el ventanal que queda al lado de su cama mirando como las gotas de lluvia caían en el cristal, de pronto se acuerda de la carta que le dio Kahoko en la entrada de la escuela. Sin mas busca su mochila verde y busca la carta con su nombre en el sobre. Ella abre la carta y lee... "Para mi amiga Samanta" Primeramente te digo el deseo que tenía de verte por última vez amiga, los momentos que pasamos juntas las risas, esos fueron los momentos más felices de mi vida puedo decir que eres una de las mejores amigas que he tenido, se que despedirme mediante esta carta no fuera la mejor forma de decir adiós pero me siento culpable de no cumplir mi papel como amiga correctamente, los últimos meses me he metido en muchos problemas en la calle; me he sentido tan acorralada que he decidido terminar de una vez con esto, lamento el sufrimiento que te podría causar mediante este escrito pero quiero que sepas que yo no quería nada de esto, principalmente lo hago para protegerte mi querida amiga, que ahora lo pienso y te considero como mi hermana como una parte de mí. Amiga lo siento mucho pero hoy de decidido terminar con esto así que... Hasta siempre Samanta Bradley. Estas palabras le llegaron como una lanza al corazón de Samy, no podía creer lo que estaba pasando ella... no podía creer que ella haya tomado esas medidas solo pensaba que era un sueño pero no lo era era la dura realidad la dura realidad, la vida suele ser injusta, por un momento se torna color de rosa y luego se descubre como un manto gris. Samanta entre gemidos, arroja el papel al suelo y recoge sus piernas para abrasarlas fuerte y recostar su cabeza, obscurecía más y más en la habitación y afuera en la tormentosa lluvia se oían los rayos destructores...
Capítulo 6: "Condolencias" A la mañana siguiente samanta despierta las 10 para ser exactos, para fortuna de ella ya se había olvidado de todo sobre la nota de su querida amiga y de su último "adiós" mediante esta, se levanta con algo de confusión. Luego de pararse con todo y ropa de la cama rascándose la cabeza y dando un gran bostezo, dirige su mirada al piso y ve un papel arrugado en el piso lo abre y lee lo que dice, en ese momento entró en la realidad y cambió totalmente la expresión de su rostro a uno triste y afligido. Se dirige a la mesa y sus padres muy preocupados le preguntan _¿Estás bien Samanta? -Dice su padre._Si. -Le respondió._¿Segura?_Si.Mientras desayunaban, suena el teléfono y su madre lo atiende..._¿Hola?_Hola, soy Kahoko la madre de Luna quisiera hablar con Samanta._Seguro. -Flora deja el teléfono sobre la mesa y llama a su hija- ¡Samanta! Te llaman por teléfono.Sin pretextos Samanta se dirige donde su madre que tiene el teléfono el sus manos._Hola. -Dijo Samanta._Samanta, leíste la nota que te di ayer ¿Cierto?_Si._¿Crees que puedas ir a mi casa hoy?_Claro._Bien ¿Qué tal a las tres?_Bien no hay ningún problema. -Después de esto cuelga el teléfono y vuelve a desayunar.Vuelve a la mesa con cara como si nada hubiera pasado y continúa comiendo, pasaron largas horas que Sam pasaba deprimida en su cuarto y llega la hora de irse a su casa. Se pone una blusa gris y unos jeans viejos que le quedan algo estrechos, y por último unos zapatos grises.Llega a la casa de Kahoko y cuando abre la puerta, Samanta ve muy angustiada a la señora Kahoko._¿Sucede algo? -Preguntó Sam algo intrigada._Nada, te estaba esperando._¿Pensó que no iba a venir?_No nada de eso, toma asiento. Samanta toma asiento, y Kahoko al lado dándole el frente..._Dígame para que quiso que viniera. -Dijo Samanta con ese tono seco de siempre._Solamente quise aclararte algunas cosas de la nota... -Pero Samanta no la dejó terminar._Dígame, ¿Qué clase de problemas en la calle ha tenido Luna?_Aún no se sabe, la policía sigue investigando, según dicen Luna... pertenecía a una pandilla o algo parecido pero hasta que no se vean los resultados de la investigación no sabremos nada._Entonces se suicidó... -Dijo Samanta algo entristecida._Eso es... 100% seguro... pues cuando le hicieron una autopsia y encontraron en su estómago una pastilla de Cianuro._"¿Por qué Luna?" - samanta se quedó literalmente traumatizada, no podía creer que por tan feliz que fuera su amiga, pudiera hacer cosa tan semejante...._Ven... acompáñame.Kahoko lleva a Samanta a la habitación de Luna, donde ésta le regala un bonito collar en forma de media luna color plateado._Esto es un recuerdo de mi hija Luna. -Dijo ella mietras miraba a Samanta con ternura._P... pero no puedo aceptar esto...._Por favor, es un regalo de parte mía y de Luna._Gracias.... supongo, creo que tengo que irme_La enterrarán mañana. Si quieres ven.Mientras Sam dejaba a Kahoko en la habitación ella dijo._No tiene que decírmelo... -Y se fue. Al otro día, en el entierro de su amiga Luna todos lloraban, todos menos San que miraba con resentimiento la tumba de su amiga pero a la vez con disgusto y tristeza, al terminar, Samanta se quedó mirando la tumba de Luna con una rosa blanca en la mano para dejársela, pero antes hablaba sola..._Amiga... me da disgusto que hayas tomado esa cobarde decisión pero es tu elección si decidiste no estar el el mundo, simplemente eres una de mis mejores amigas y aunque no estés siempre estarás para mi. -Es algo raro pero Luna y Samanta eran amigas desde los 7 años y ya eran como hermanas se querían mucho._Veo que te duele mucho... -Dijo su madre con algunas lágrimas en su rostro._Ella era como mi hermana mayor... siempre solía decirle que los duendes vivían en la Luna para molestarla._Pero... ya no está._Eso no es cierto Kahoko, ella vive en cada uno de nosotros en nuestros corazones, cada mal chiste que contaba estará en nuestras mentes para siempre._Es cierto. Samanta, hoy me has enseñado una valiosa lección._¿eh?_Que no importa donde Luna esté ella estará cerca de nosotros. ella vivirá en nosotros._Me alegro de que aprendiera... -Dijo Samanta apunto de irse. Habían transcurrido semanas y meses y no la escuela no era lo mismo sin Luna... hasta que un día todo cambió.Un día una chica iba corriendo por los pasillos hasta que se topa con Sam.¿?: ¡Oye! -Dijo ella tanto casada como agobiada.Sam: ¿¡Quien eres!?¿?: Soy...
Capítulo 7: "La chica nueva" Parte 1. ¿?: Soy Michelle, mucho gusto, y eres... Sam: Me voy de aquí. -Y se va de largo dejando a Samanta hablando sola. Michelle: ¡Oye! Espérame. Michelle, una chica de 15 años varios centímetros más alta que Sam, de pelo café obscuro al igual que sus ojos, algo imperativa y muy sonriente. Michelle: ¡Sabes! Es la primera vez que estoy en Nueva York, es muy emocionante ver tantos edificios grandes ¡sabes! además creo que tu y yo seremos muy grandes amigas no... -Pero Samanta no la dejó que terminara de hablar. Sam: ¿Amigas? Pero que idioteces dices, yo no vengo a la escuela a hacer amigas, solamente a estudiar, además, yo no tengo amigas y jamás las tendré, si me disculpas, tengo que ir a mi salón. Después de que Samanta dejara a Michelle sola, mientras que ella se fue a su sala de clases. El maestro de matemáticas estaba dando la clase hasta que el director estuvo a la presencia de todos. Direc: Chicos tenemos una nueva estudiante, su nombre es Michelle, espero que sean buenos con ella. Prof. M: Bien Michelle puedes sentarte al lado de la señorita Samanta. Sam: "Recórcholis, tenía que ser"- Pensaba mientras dirigía su mirada hacia la ventana para no ser notada por Michelle. Michelle: ¡Hola Samanta! ¿Así es tu nombre? ¿Verdad? Sam: Ya te dije, no me interesa ser tu amiga. -Dijo con ese tono frío de siempre. Michelle: ¡Vamos sam! -Dijo con una voz insistente. Sam: Ya te lo dije. Pasaban las horas y horas y Michelle solamente ponía a Samanta mareada de tanta habladera: "¡¿Y esta cuando va a parar?!" pensaba Samanta algo irritada, en la hora del almuerzo era habla y habla y habla y chistes y chistes que provocaron en Daniel escupir la leche por la nariz. Mientras Michelle contaba uno de sus chistes. Samanta estaba a punto de irse mientras que Michelle le detiene... Michelle: Vamos Sam... no te has reído de nada de nada. ¿Qué ocurre? ¿A caso te sientes mal? Sam: Me siento de maravilla y ¿Quién se va a reír de las bobadas que dices? -Y se va del lugar. Michelle: ¿Y qué le pasa? Daniel: no le hagas caso, siempre es así, según creo es una extraterrestre. Michelle: ¡Eso es ridículo! -Se para de su asiento y sigue a Samanta. Mientras tanto, Samanta iba tranquilamente por los pasillos hasta que se encuentra con alguien... Ethan: Bradley... Sam: Que quieres ingrato. -Y se fue rápido pero este fue más ágil y la sostiene del brazo. Ethan: Aún no he terminado. Sam: No tengo ganas de hablar con nadie. Ethan: Viniste mas gruñona de lo normal.... Sam: ¡Cállate y suéltame! -Se llega a zafar del agarre del chico y se va a clases pues ya habían tocado. En clases, Michelle se le había tirado en cima a Samanta en preguntas.... Michelle: ¿Donde estabas Sam? Sam: No te importa. Llega la maestra de literatura y mientras daban la clase, Sam como siempre le aburría lo que decía la profesora y hacía el intento de no quedarse dormida. Prof. L: Chicos, les asignaré un nuevo trabajo y lo harán en pareja, a cada pareja les daré un folleto para que hagan la pequeña práctica. Fue asignando uno por uno hasta que Samanta se llevó una gran sorpresa... Prof. L: Y la última pareja será... Michelle y Samanta. Sam: "¡¿QUE?!" -Miraba media sorprendida a la profesora. Michelle: ¡SI! haré el trabajo con Samy. -Dijo muy entusiasmada mientras que Samanta solo pensaba que era un castigo divino por tratarla tan mal "Y ahora..." estaba muy alterada no sabía que hacer. Mientras que en la hora de la salida. Michelle: ¡Oye Sam! nos vemos mañana en mi casa después de la escuela. -Samanta no llegó a decir nada, solo asintió con la cabeza y se fue a su casa mientras que sus familiares se escuchaban muy felices... Sam: ¿¡Por que tanto alboroto!? -Dijo Samanta muy gruñona. Mark: ¿Qué te ocurre hermanita? Celebra porque tu hermano mayor consiguió trabajo, ¡repartidor de pizzas! Sam: púdrete. -Solamente eso pudo decir mientras iba a su habitación y se tapaba la cara con una almohada pensando en como sería el día de mañana con Michelle.
