Harry Potter La carta de mi corazón (Snaly)

PARA MI BELLISÍMA Aretha, te amo mon amour. <333333333333
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Para: Severus Snape, Slytherin.

¿Puedo sentirme nerviosa ahora? Estoy tan feliz de poder escribirte, hace tanto tiempo ya que no nos vemos, realmente espero que cuando nos re-encontremos tú hayas cambiado Severus; es realmente doloroso pelear contigo porque eres una persona importante para mí. No sé qué es de tu vida y talvez a ti yo ya no te importe, has perdido contacto conmigo desde que me casé con Potter, ¿acaso no prometiste estar siempre conmigo?, ¿por qué te convertiste en un pedante justo antes de que me fuera? Cambiaste demasiado cuando ingresamos a Hogwarts, dejaste de ser aquel niño que yo tanto adoré. Me despreciaste y terminaste con nuestra amistad…

¿Recuerdas cuando nos conocimos? Mi hermana me tachaba de fenómeno, siempre me gritaba “¡No hagas eso Lily, mamá te lo ha prohibido y tú lo sabes!” Pero maravilloso fue el momento en el que por primera vez una persona no me lo recordaba. Ambos éramos tan pequeños y tan amigos, hay momentos en los que deseo saber qué nos pasó.
¿Fue acaso algo que dije? Jamás comprendí tu rencor hacía mi marido, Severus y no lo comprenderé si no me lo explicas; deseo volver a aquellos días de infantes, aquellos momentos en dónde me explicabas con gran devoción cómo sería nuestra vida en Hogwarts y el cómo nos escogerían alguna sección en dónde vivir. Recuerdo gratamente tus ojos iluminarse cuando me mirabas y me explicabas cada mínimo detalle, también recuerdo que apartabas tu mirada cada vez que te sonreía por la comicidad con la que confundías ciertas palabras.

¿Sabes? Tengo algo que decirte, no sé si lo has olvidado o quizás ya todo es muy diferente pero…

Y su cabeza dio vueltas, dejó caer la hoja para mirar por sobre el escritorio. Todo eran ruinas…, tomó su cabeza con ambas manos, intentaba cerciorarse de que seguía ahí. Levantó la carta y la arrugó sobre su pecho. Ése día él jamás lo olvidaría…

—¡No, no!, ¡Lily! —gritó histéricamente Snape al ingresar a la habitación y encontrar a su amiga de infancia tirada en el suelo, completamente lastimada y con sangre escurriendo por sus hermosos labios.​

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Potter había muerto en el pasillo y ella tenía una herida que era ya imposible de curar.​

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—Si tan sólo hubiera llegado antes…—pero la leve presión en su mano lo hizo callar.​

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—Severus —susurró ella lentamente mientras lágrimas brotaban de sus ojos…— cuida muy b-bien de mi hijo. Confío en qué serás un gran maestro —tosió— háblale de Hogwarts como me hablabas a mí. Has de él un gran mago —los llantos de Harry se intensificaban.​

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—No hables Lily, por favor. La ayuda viene en camino. —Ella negó y le entregó unas hojas arrugadas y un poco rotas.​

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—N-no podría encomendarle a nadie más ésta tarea Severus…, e-eres mi mejor amigo —Snape tomó la hoja con una mano y Evans la apretó con él— no olvides a dónde vaya siempre estarás en mi corazón…—y su angelical voz desapareció entre esas cuatro paredes mientras su mano caía lentamente al suelo dejando que su corazón dejase de latir. Corazón, que él hubiera deseado amar y ser correspondido...​

—Si tan sólo yo hubiera sido lo suficientemente valiente para decirte realmente cuál era mi apreció hacía ti, jamás hubieras muerto Lily —susurró Snape—, pero mírame ahora. Tú hijo es un gran mago y yo el enemigo de la historia —una mueca se formó en su rostro, una especie de sonrisa melancólica. Tomó su varita—. Hoy es el día en el cual Harry descubrirá la verdad de su pasado, por cual te pido que me des fuerzas Lily…

…te aprecio tanto Severus que talvez si no hubiera conocido a Potter talvez tú serías el padre mi hijo. Algo extraño, posiblemente. Pero te quiero tanto que talvez pudo haber funcionado.

Siempre tuya.​

Lily Evans​