Long-fic Impossible dream?

Impossible dream?

Hola chicos (L) Traigo un Crossover que espero que sea interesante para ustedes, me costó mucho trabajo acomodar las series e_eUu
Comenzaremos por el lindo Prólogo :3 (?)

Doblaba el papel con movimientos delicados y lentos, una expresión de confianza marcaba su rostro, miró a su alrededor para asegurarse de que nadie haya visto lo que acaba de escribir, dio un suspiro y se levantó haciendo el mínimo ruido.
Caminaba de forma lenta, como una tortuga, aunque las personas que estaban detrás de ella le decían que se apurara ella sólo pensaba en lo que había escrito.
Sus mejillas estaban sonrojadas, al menos así los sentía y así se notaba, cerró los ojos y comenzó a pensar si estaría preparada para lo que había deseado.
Cerró el puño, segura de lo que iba a hacer, abrió los ojos y enfrente tenía un brasero con fuego, algunos papeles quemados dentro de las llamas, ella sacó el suyo y suspiró. Lanzó el papel con confianza mientras las llamas lo consumía.
Se dirigió a su asiento mordiéndose el meñique; de nuevo se rompió una uña.
Al sentarse sólo observaba a la gente tirando sus papeles al fuego, la música era atemorizante, sonaban como alaridos y retumbaban en sus oídos.
De repente en sus pensamientos aparecieron monstruos junto con personas muertas, el sonido del lugar se mezclaban con sus pensamientos, un lugar lleno de velas, pensamientos perturbadores. ¿Sueño imposible?
Sintió un sabor salado en su boca, había mordido la uña de más. El dolor era molesto, así que decidió retirarse del lugar sin que nadie se percatara.
Al salir sacó un pañuelo limpio que había llevado por si acaso y se envolvió el dedo con él. Además, sacó el mp4, desenredó el auricular y comenzó a disfrutar de su “rara” música cuando en medio de la lluvia, se alejaba lentamente y mirando al suelo.
Ella no era una emo, lo tenía claro, a veces llegaba a ser masoquista pero sólo hasta ahí. No llegó al límite de agarrar una navaja y cortarse las venas sólo por haberse aplazado.
Nunca se pintó los ojos. Ni usaba ropa negra con calaveritas. El hecho de morderse las uñas hasta sangrar sólo es un mal hábito que esperemos que cambie.
Entonces, ¿Qué es ella? ¿Una nerd? Tampoco.
Es inteligente, pero no sabe demasiadas cosas. De hecho, lo era en la niñez pero ahora se volvió distraída y desatenta.
Siempre soñaba con personajes que nunca existieron, imaginando que son personas reales y que ella se casa con ellos. Suele confundir los nombres de sus conocidos por nombres de personajes.
Al parecer, ella desea aislarse por motivos obvios para ella, pero cree que nadie la entendería. Su madre no lo hace, su padre hace el esfuerzo por entenderle pero en vano.
Ella ama el rojo, pero le gusta combinarlo con el negro, le gustaría llevar dos coletas al colegio sin que nadie diga “Qué infantil”
Le gustaría dormir todo el día y no trabajar, el trabajo, según ella, no es su estilo.
Ojalá hubiera llevado una sombrilla, se resfriará y quien la cure de su enfermedad no habrá. Se va caminando, su mp4 se mojará y ya no funcionará.
Sin embargo, ella no cuida su aspecto personal. No se peina, ni se lava los dientes dos veces al día, sólo cuando se le da la gana.
Está llegando, escuchando la misma canción todo el camino. Está mojada y no contestará las típicas preguntas de “¿En dónde estabas?” Es un secreto, guárdenmelo, por favor.


Espero que les haya gustado! puppy*

Tengo premiso de blackrose18, así que no me lo muevan~

 

Re: Impossible dream?

Empiezo el primer capítulo, es otro fandom, pero en los próximos episodios ya habrá Rumiko Takahashi :)

IMPOSIBLE DREAM?

EL SER MÁGICO

Era jueves a la mañana, la empleada se fue al colegio a las ocho de la mañana, dejando a una niña de trece años sola en la casa, ésta sólo se quedó durmiendo.

A las nueve y media, se levantó perezosamente, se puso sus pantuflas rojas con estrellitas blancas y se dirigió hacia el baño para lavarse la cara.

Luego, se estiró un poco y se cambió el pijama por una polera ligera a rayas de color naranja, roja y marrón y un pantalón rojo, aún con las pantuflas puestas pero caminaba lentamente y con cuidado para no mojarlas.

Se sentó un momento cuando escuchó una motocicleta y a sus mascotas ladrando.

El sonido del motor de la motocicleta era inconfundible para ella: Era el lechero.

Ella fue a atender al hombre y descargó la leche en una hervidora, mientras lo hacía, empezó a oír ruidos chillones que provenían de una caja.

Le restó importancia a eso, simplemente entregó la jarra vacía al lechero y entró a la casa.

Luego, ese ruido otra vez, la niña se acercó a la caja temblando, ella era muy supersticiosa, se imaginaba cosas como fantasmas y cosas raras, fuera de lo común. Se acercó a la caja y la abrió con cuidado, y de ella salió volando una criatura verde con plumas. Era su cotorra. ¡Qué tremendo susto se había dado! Dio un grito desgarrador cuando su cotorrita salió de la caja aleando, pero estuvo aliviada porque no fue nada malo.

Un ruido en el ropero, ella y su bocota, fue igual como cuando fue a ver la caja, lentamente y temblando, estaba viendo tanto anime que solía sobre-actuar, pero al abrir su cajón de remeras vio algo inusual, era muy rosa y estaba escrita en inglés, luego una criatura amarilla con la forma de un osito de felpa salió de allí…

- ¡Hola, hola, hola! –saludó con cara sonriente-

Increíblemente, la niña lo conocía. Claro, una friki loca otaku como ella conocería a Kero.

- Oye, ¿eres real? –le preguntó con los ojos casi desorbitados.

- Claro que soy real… -dijo sonriente.

La niña hizo un gesto de sorpresa, rió un poco y preguntó: - ¿Porqué estás aquí?

El guardián se puso serio, flotó y se cruzó los brazos y las piernas y le dijo: - Bien, es algo raro pero… Sakura ha perdido sus alas y sus cartas pierden energía, el mocoso está haciendo todo lo posible para recuperarlas pero por el momento no hay ningún resultado… -Suspira- Le pedí al mago Clow que por medio de magia no lleve con alguien que podría reemplazarla para cuando ella recupere sus alas. Y… como ya ves, llegué aquí… ¿tienes poderes?

La niña puso cara de sorpresa otra vez, sonrió y contestó: - Pues por donde empiezo… Veo fantasmas desde los cuatro años, siempre hacen cosas divertidas pero nunca me dejan dormir, hay de todos los colores: Rojo, negro, naranja, dorado, transparente… Y hacen ruidos, mis padres no los oyen pero yo sí, pero a esta edad me he acostumbrado y ya no me da tanto miedo como antes…

- Con eso es más que suficiente –dijo interrumpiéndola.

Él abrió el libro que contenía las cartas, agarró una y se la dio, la niña la observó, hizo una mueca y le preguntó: - ¿No puedo cambiarlas?

- ¿Por qué? ¿Tienen algo de malo? –preguntó algo intrigado.

- En realidad no, pero sólo me molesta que sea demasiado rosa… -dijo riendo.

Kero se quedó pensativo, la niña se quedó mirándolo, enrulando su cabello, cuando el guardián le dijo: - Creo que no hay problema que las cambies, pero el problema es que no sé cuando terminarán de recoger las alas de Sakura… ¿Segura que lo quieres hacer? Gasta mucha energía y me molesta un poco el hecho que la quieras cambiar porque no te gusta su color –dijo entre dientes.

La niña se golpeó la cabeza con la mano y exclamó: -¡Estoy segura! Sólo dime cómo se hace y asunto arreglado.

Kero buscó algo del libro y sacó una llave en forma de estrella, era rosa y se la pasó a la niña: - Te llevaré con el mago Clow. Con lo que me dijiste de los fantasmas es suficiente para saber que tienes algo de magia, porque ningún humano ordinario puede verlos así como así.

Después de que Kero dijo esto, apareció un círculo brilloso debajo de ellos, la niña lanzó un grito de sorpresa y fueron trasladados a otra dimensión después de que el guardián diga unas palabras.

- ¿En dónde estamos? –dijo tartamudeando.

El ser mágico le dijo que sólo espere y verá, valió la pena hacerlo porque segundos después apareció un hombre sonriente, vestido de azul que usaba gafas.

- Mago Clow, esta es la persona quien has escogido, ¿cierto?

- Oh sí –dijo reconociéndolo. Debo cambiar su llave.

La niña no sabía si sentirse emocionada y gritar como una loca o permanecer callada y portarse como niña buena. Votó por la segunda, pero sólo por curiosidad preguntó: - ¿No hay Juicio Final?

El mago Clow y Kero se quedaron helados.

- Uy, ¿¡cómo se te ocurre preguntar eso, niña!? –le reprochó el guardián.

- Yo contesto esa pregunta, Kerberos, no seas maleducado –dijo el buen hombre, el guardián bajó la mirada con arrepentimiento. No es necesario, fuiste escogida, tú sólo debes encargarte de que las Cartas estén en buen estado y tengan poder. Y lo que ahora debo hacer es cambiar la llave para que los poderes de las Cartas se igualen a los tuyos.

La niña no dijo más nada. Es que… ¿Qué otaku había soñado con tener una vida como Sakura Kinomoto y que ese sueño se le cumpla… así de fácil? Ella tal vez sea un fenómeno para el mundo del anime.

El mago tocó la cabeza de ella y un poder blanco salió de ella. Este poder se mezcló con la llave color rosa que entre brillos y destellos se convirtió en una nueva llave, color roja en forma de diamante.

- Esta joya es tu símbolo –dijo algo confundido. Vaya, que raro, se supone que la forma de los báculos suelen ser acordes a la personalidad de quien las posea… Y tú pareces ser una niña muy delicada.

La niña quería reír… ¿Blanda? ¿Delicada? ¿Dulce? ¿Eso con qué se come? Eso significaba para ella.

¿Por qué la llave tiene forma de diamante si se supone que va acorde con la personalidad de quien la posea? Esa niña es muy dura, puede hasta llegar a ser malvada, es astuta y tiene capacidad de que todos estén de acuerdo con ella.

Kero le pasó una carta al mago, quien al tomarla le dijo a la niña: - ¿Cuál es tu nombre?

- Graciela –le contestó.

- Bien Graciela, aunque creo que ese nombre es algo extraño si estás por China o Japón. –entonces pensó por un rato. Te llamarás Asuka. –le dijo.

Graciela se quedó sorprendida, ¿cómo pueden cambiarle el nombre?

- ¿El apellido también? –preguntó ya en tono desesperado.

El mago le preguntó su apellido, que era “Cabañas”, entonces volvió a pensar.

- Watanabe –mocionó.

Graciela Cabañas, ahora Asuka Watanabe, miró al suelo, algo molesta pero luego miró al mago y aceptó el cambio de nombre.

- Está bien, pero sólo seré Asuka para ustedes y todo lo que tenga que ver con esto de la magia –dijo firme.

El mago sonrió y le pasó la carta que tenía en mano, ella lo miró.

- “The Fly” –musitó sorprendida.

- Bien, ahora lo dejo en tus manos, confío en ti –dijo el mago desvaneciéndose en un hilo de luz.

Kero y Asuka volvieron al mundo real, el guardián comenzó a volar por la habitación de la niña y se sentó en su almohada.

- Oh, que cómoda… Bien, ¿piensas probarla?

La niña suspiró y confiada afirmó que lo haría.

- Bien, ¿Qué esperas?

Asuka tomó aire, extendió los brazos con la llave renovada en sus manos, la carta en su bolsillo y después de pensarlo un momento comenzó a mover los labios. Al hacerlo apareció un círculo brillante debajo de ella.

- Llave que guardas los poderes de los diamantes, muestra tu verdadera forma ante Asuka, la valiente que aceptó un pacto contigo… -abrió lo ojos enérgicamente. ¡Libérate!

La pequeña llave se alargó tomando una linda forma. Agarró la carta rosa. Cerró los ojos y dijo:

- Carta que fuiste creada por Clow, abandona esa vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño, hazlo por el nombre de Asuka… ¡Fly!

Entonces el viento comenzó a hacer volar su cabello y unas envergaduras plateadas salían de su espalda.

No se sabe si por emoción o algo parecido, pero apenas sintió el poder, ascendió hasta que sintió un leve golpe en la cabeza y cayó al suelo.

- Oh Dios, te emocionaste –dijo Kero riendo.

Asuka se acarició la cabeza y las alas se pulverizaron, convirtiéndose en una carta color roja, con un diamante al dorso, con unas letras que identificaban quién era el dueño.

Ella sonrió y dejó la carta en su cama, se levantó y se dirigió a la cocina con júbilo y miró la hora.

- ¡Ah! ¡Es muy tarde! –dijo desesperada y fue a buscar su toalla para ir a bañarse. Otro día de rutina más.
Kero sonrió y echó un vistazo a la nueva carta que decía con letra legible: “Asuka”.


Comenten! :gah*
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Re: Impossible dream?

Asdfghjklñ.

IMPOSSIBLE DREAM?

FENÓMENO.

Asuka entró a la habitación fregándose la cara con la toalla llevando puesto su uniforme, con el cabello mojado y sin llevar puesto aún sus zapatos.
-Ah… Es restaurador cuando te bañas en agua tibia… -suspiró- Oye, Kerberos, yo iré al colegio cuando venga mi empleada, sólo te pido que actúes como un peluche más en mi habitación para que mi familia no note nada, ¿Ok?
-Pero Asuka… Cuando estaba con Sakura era lo mismo, ¡quiero mi libertad!
-Pero si no puedes, mis hermanos se pondrán como locos y mi madre; peor. –le explicó.
Kero entendió y se dirigió hacia los peluches completamente “deprimido”.
La puerta del frente se abrió, entró una joven con uniforme gris de pelo enrulado.
-Graciela, prepárate más rápido, aún no te peinas ni te pones tus zapatos. Vamos, ¡rápido, rápido! –le ordenó.
Ella sólo dijo un “Tsk” y se fue hacia su zapatero a buscar su calzado. Mientras la otra chica comenzó a sacar algunas cosas de la alacena para preparar el almuerzo. El guardián simplemente se quedó quieto.
A la hora de almorzar discutió con su empleada desde el rezo hasta el último bocado, al levantarse de la mesa se digirió a la puerta cuando escuchó que su empleada tenía algo que decirle.
- Oye “loser”, te olvidaste tu recreo.
Ella bajó la cabeza enfadada, agarró su merienda agresivamente y se fue.
En el camino, volvió a encender su mp4, escuchando una música que la hacía soñar en algo imposible de realizar. Pero si ahora tenía en su poder las Cartas Clow… ¡Podría ser posible lo otro! Ay, deja de soñar niña, no puedes tener tanta suerte.
Dios, hoy debía llevar un transportador para Matemáticas, pero si pasa por una tienda se le hará tarde, bien, si se apura no hay problema. Al menos, muchos problemas no.
Comenzó a correr para llegar a la tienda, pero mirando a los lados antes de cruzar, usando reglas básicas.
Al llegar, exhausta, se encontró con alguien…
-Hola, prima, ¿Cómo estás?
Ella se quedó pálida y quieta, tartamudeando le respondió: - Bien… Bien…Bien… ¿Y tú?
El joven le sonrió y le respondió que se encontraba bien, que vino a comprar unas hojas para su trabajo de esa noche.
-¿Qué te pasó en el dedo? –le preguntó.
-¿Huh? Ah no, sólo me mordí la uña, malos hábitos, tú sabes… -dijo riendo.
-Ya no debes hacer eso –dijo sonriéndole.
Ella sonrió y compró lo que necesitaba, al salir se despidió de su primo, pero él sacó algo de su bolsillo y se lo dio.
- Toma, compré dos caramelos, te doy uno –sonrió.
Ella lo tomó, se lo agradeció y se fue corriendo.
- Oh… Es tan amable, lástima que es mi primo… -dijo sonrojada.
-Vamos Asuka, deja de soñar, es un amor imposible… -opinó Kero.
Asuka frenó de golpe… Se enojó con el guardián que prometió que cuando sea hora del recreo lo pondría en su lugar por decir eso… Además de haberla seguido…

Varios alumnos estaban sentados al frente de un colegio grande, de uniforme color marrón con amarillo, Asuka llegaba algo sonriente, comiendo el caramelo que le regalaron, escuchando música.
Sonó el timbre y todos los alumnos entraron mientras hablaban y comentaban. Asuka, al poner un pie dentro cambió la mirada, su flequillo tapó sus ojos y paró, dejó de sonreír y se puso seria. Apagó su mp4 y levantó la mirada. Cambio de personalidad.
Siguió caminando y muchos la miraban, Kero comenzó a mirarla desde una abertura de la mochila y se quedó confundido.
Al llegar a su salón, saludó a quienes la saludaban, colocó su mochila y se sentó y estrelló su cabeza por la silla.
- ¿De vuelta no durmió nada anoche? –comentaban algunos.
El profesor de Matemáticas entró saludando y ordenó que saquen el transportador y el compás. Asuka se heló… Se le olvidó el compás.
Se levantó y comenzó a pedir uno prestado, pero todos “debían usar el que trajeron”
-Si yo fuera tú, te la prestaría –dijo enojada y se dirigió a su asiento.


En un lugar anormal estaba una colegiala de uniforme verde sentada sobre la roca menos áspera que encontró esperando a alguien. Esa persona apareció.
Era una chica con el cabello hasta las rodillas color rojizo, ojos violetas sin brillo, mirada vacía; llevaba un vestido de tul con mucho vuelo color blanco y andaba descalza.
-Señorita Kagome, le tengo nuevas noticias –dijo inexpresivamente.
Kagome se levantó ansiosa y le pidió que se lo dijera.
-Hay otro pozo que conecta a este mundo.
Ella casi se cae para atrás, ¿otro pozo? Kagome, desesperada le preguntó:
-¿Cómo? Akari, dime, ¿cómo pudo aparecer?
Akari se sentó a su lado y explicó que es muy extraño ya que la presencia apareció la noche anterior.
-Me pregunto si Naraku tiene que ver con esto –se preguntaba con la mano en la barbilla.

El profesor escribía ecuaciones en la pizarra mientras algunos alumnos sólo chisteaban y hablaban, una alumna dibujaba maravillosamente y Asuka sólo miraba el techo.
Entonces se escuchó un ruido que trajo alegría para todos. La campanilla.
-¡Bien! ¡Genial! –exclamaron algunos mientras salían afuera.
Cuando todos salieron, Asuka se quedó sola, entonces se volteó y comenzó a hablar con Kero.
-¿Por qué me seguiste? –le regañó.
Kero salió tomando aire, parecía exhausto y le respondió:
-Sentí la presencia de Yue.

Comenten, les pido con el corazón en la mano! ;_____; (?)
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Re: Impossible dream?

DIOS, ya me había olvidado de esto xD
Traigo la conti después de meses tiempo.
Y si los Betas se pasan, pido por favor que dejen coment y críticas :santo:


-¿C-Cómo dices?- tartamudeó la joven.

- Así como lo oyes y fue antes de salir –agregó.

Asuka se puso la mano en la barbilla y comenzó a pensar quién sería Yue. Debería ser alguien nuevo en el barrio… O alguien que ya estaba pero Yue utiliza su cuerpo, no, mejor derriba esa suposición. Ella se cuestionaba hasta que llegó a sospechar que pudo haber tomado el cuerpo de mujer tal y como lo hacía Nakuru. Pero iba más a la idea que era un hombre.
Entre pensamientos vino uno que la hizo temblar, ¿y si un ser querido resulta ser Yue?
Debe ser ilógico, ya que Kero lo sintió antes de salir, así que la única en sospecha llegó a ser su “linda” empleada.
Si es ella, poco le interesaba la persona en sí, porque es realmente fastidiosa y si realmente no existe es buena noticia para ella. Así que su plan era que, al salir del colegio la encarará para ver a Yue. ¿Olvidé mencionar que ella es muy fangirl de Yue?
El recreo terminó y los alumnos comenzaron a entrar siguiéndolos detrás el profesor de Trabajo y Tecnología, la materia que más odiaba.
El profesor ordenó que vayan todos al taller y que lleven sus mochilas ya que la clase iba a ser supervisada ya que la iluminación y el aire acondicionado no funcionan correctamente.
Asuka hundió a Kero hasta el fondo de su mochila, la cerró y la colocó sobre el hombro y salió detrás de sus compañeros y escuchó la voz fastidiosa de su compañera de trabajo.
-¡Graciela! ¡Apúrate! ¡Debemos llegar primero para soldar antes! –ordenaba, es decir… sólo la llamaba pero para Asuka era una orden que la molestaba.
-¡Mande! –le contestó y corrió como pudo hasta llegar allí.
Casi sin aliento y sintiendo sed, Asuka subió con su compañera hasta que sintió una sensación rara.
Un aura negra cubría el taller como si estuviera embrujado, nadie lo estaba notando. Sólo eran Kero y Asuka los que lo sentían.
-Espero nada más que hayas traído cartas –susurró Asuka mientras caminaba en “cámara lenta” por el aura maligna.
-Traje diez ¿Es suficiente? –sonrió.
-Si son útiles, enhorabuena.
La compañera de Asuka corría hasta el lugar donde soldarían, sacó la cerradura y abrió la puerta pero…
-¡Patricia, cuidado! –gritó Asuka a todo pulmón.
Un monstruo de siete metros con forma de araña salió y la agarró ante la mirada atónita de todos los alumnos y el profesor.
-¡Ahhh! ¡Sálvenme! ¡Dios Mío! –gritaba la chica apunto de llorar del miedo.
Pero todos se asustaron y salieron afuera, menos Asuka, Kero y otra compañera que se quedaba mirando al monstruo con curiosidad, sin tenerle miedo alguno.
-Tsk, demonios, ¡Natalia, sal de ahí! –gritó Asuka.
Kero exclamó que no tenían tiempo que perder, que era mejor destruir a aquella alienígena y Asuka tomó aire y pronunció las mágicas palabras a viva voz apareciendo el círculo rojo con forma de diamante debajo de ella.
-Llave que guardas el poder de los diamantes, muestra tu verdadera forma ante Asuka, quien aceptó esta misión contigo. ¡Libérate! –exclamó y el viento comenzó a hacer volar papeles y las escobas se caían. El pequeño diamante se convirtió en un báculo rojizo hermoso.
La compañera que estaba entre la vida y la muerte no se había dado cuenta del poder, pero la otra compañera lo había visto todo.
-Tú… -musitó. ¡Demonios, ese era mi deseo desde la primera vez que vi el anime!
-¿Oh, en serio, Natalia? ¡El mío también! –festejó.
-Asuka, no pierdas tiempo… -le regaño Kero.
-Bien, es mi misión. ¡Oh, yeah! –dijo sacando la carta del salto diciendo: - Carta que fuiste creada por Clow, abandona esa vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño, ¡hazlo por el nombre de Asuka! ¡Jump!
Entonces a sus gastados calzados deportivos le salieron pequeñas alitas y Asuka se maravilló, pero al ver al frente el miedo volvía.
El monstruo era asquerosamente horrible y se imaginaba el enorme terror que su compañera estaba pasando. Sólo pudo suspirar y que el coraje la acompañe.
-Un momento, Asuka, no liberarás a tu amiga si no usas la espada…
Ella lo sabía, sólo que el miedo la dominaba y ni siquiera se dio cuenta que el profesor llamó al 911 y que su otra compañera había salido afuera.
-No hay moros en la costa… ¿Verdad, Kerberos?
Él afirmó que sí, entonces Asuka prosiguió cambiando otra carta. La de Espada.
Mencionó las conocidas palabras y la carta cambió a un color rojo y el hermoso báculo se convirtió en una espada delgada pero muy filosa que es capaz de cortar algo tan blando como un huevo como algo tan duro como el acero.
El monstruo la miró y echó una carcajada, esto la asustó y le comenzó a hablar.
-La veo, tú la tienes, el amo Naraku tenía razón…
-Na-na-na… ¿Naraku? –pensó para luego sorprenderse del supuesto destino que le esperaba. No… Debe ser… ¡Una coincidencia! ¡No, un sueño! ¡No, una pesadilla, debe ser una pesadilla!
El monstruo amenazó con matar a su compañera, quien ya estaba inconsciente, si no le entregaba lo que quería. La perla de Shikon.
-¿Estás loco? –comenzó a reír. ¡No tengo tal cosa! –exclamó saltando y cortando el brazo donde se encontraba su compañera, liberando un asqueroso gas. Ewww… Debe ser una extensión… -pensaba mientras Kero se transformaba y salvaba a la compañera.
Esa extensión se molestó mucho con ella, que extendió uno de sus peludos brazos y la agarró, apretándola.
-¡Ah! ¡No, por favor! –lloriqueaba.
Kero la vio en aprietos y decidió lanzar llamas al demonio. Éste comenzó a rugir y soltó a Asuka del dolor. Ella cayó al suelo violentamente provocando un desmayo.
-¡No, Asuka, no es momento de siestas! ¡Despierta! –insistió Kero sacudiéndola.
El monstruo se tambaleaba y dio un tremendo rugido que hizo que todos los vidrios del lugar se rompieran.

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Todos los alumnos ya estaban en frente de la institución cuestionándose de lo que estaba pasando. Algunos padres fueron llamados también, en especial los de las chicas que se encontraban adentro. Por el momento, ningún policía, ni ningún bombero se atrevía a entrar.

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Asuka sintió las sacudidas de Kero y poco a poco iba recuperando la conciencia y se repetía: “Nunca me había quedado inconciente, ¡Genial!”. Pero Kero la calló diciéndole que su misión era acabar con aquel demonio.
-¡Sí! –afirmó firmemente.
Parecía que al quedarse sin conciencia, había perdido su cobardía y su miedo. Ahora parecía que sería capaz de todo. Si no quedó claro, ¡hará lo que sea!
-Kerberos… ¿Cuáles son las cartas que trajiste? –preguntó intentando pensar en un plan.
-Si mal no recuerdo… Viento, Vuelo, Salto, Espada, Agua, Fuego, Tierra, Poder, Escudo y… Dulce –sonrió al decir la última palabra.
Asuka se golpeó la sien con la mano y pensó en lo que iba a hacer. Podría quemar al monstruo, pero eso podría incendiarlo todo. No… Tiene la carta Agua también. Aunque hubiera preferido que Kero traiga la carta Pequeño para encogerlo y aplastarlo de una vez.
-Pásame las cartas de Agua y Fuego. –pidió.
-¿Eh? ¿Segura? Con eso ya cambiarás cuatro cartas hoy, y tu energía se…
-¡Lo sé! Pero, yo…
No terminó su frase cuando el monstruo, harto de esperar que ella mueva un dedo, la agarró y se la llevó. Asuka pataleaba pero no tenía tanta fuerza.
Kero agarró la mochila de la colegiala y los siguió pensando en qué hacer.

​

*​

Una joven de uniforme verde corría por el campo cuando encontró algo conocido pero anormal. Encontró el segundo pozo devora huesos.
-¡Chicos, miren!
Uno de ellos llegó y se sorprendió al verlo. Más cuando la joven presintió la perla de Shikon.
-Voy a pasar –afirmó, disponiéndose a saltar.
-Yo te acompaño –dijo alistando su arco y flecha.
Se agarraron de los brazos y saltaron a ver qué cosa misteriosa había al fondo.