El ultimo santo de pegaso (Saint Seiya)

El ultimo santo de pegaso (Saint Seiya)

Es un circulo vicioso, una batalla eterna que nunca acabara, continuamente atraves de los tiempos los dioses se han visto envueltos en conflictos de gran magnitud, solo para que unos cuantos siglos despues despierten para seguir en la lucha, ¿y que reciben a cambio los que ofrecen su tiempo, valor y dedicacion?, ademas de otras cosas, ¿honor, poder, gloria?, etc., bueno, ¡ya fue suciente! y asi sera, alguien tiene que hacer algo. Fue entonces que de la mente mas improbable de todas surgio el primer impulso de revolucion, una nueva lucha y probablemente, la ultima de todas.

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Año 3000 o algo asi, la cosa es que el planeta se encuentra en un grave estado de carencia, basicamente es todo un desierto. Siendo los unicos puntos de agua potable y vida verde los polos, mientras que el resto, esta bien jodido. Aunque la poblacion se redujo bastante, por lo que la situacion no esta tan mal como lo estaria si viviese la misma gente que habitaba el planeta en el año 2010, pero proseguimos.

Hay una ciudad en medio de ese gran desierto, probablemente por donde quedaba la frontera entre Colombia y Panamá, no es muy seguro, pero por alli esta esa pequeña ciudad que sobrevive en ese duro lugar gracias a un oasis, asi es como muchas otras ciudades dispersas por el mundo sobreviven, de las pocas que aun hay mas las que estan cerca de los polos.

En ese pueblo vive un muchacho llamado Yago, de unos quince años, no es muy listo pero es buena persona. De una tez bronceada, no un rojizo o anaranjado, sino un tono claro marron o algo asi, de pelo negro y corto, medio alto y bueno mas cosas. Ya ha esa edad es un productor, osea que trabaja, cuando cumples cierta edad debes aportar o si no, pues te mueres. Debido a que la situacion es dificil para todos los humanos han olvidado toda esa basura de la democracia y los sistemas politicos, viejas leyes y demas, para vivir en comunidad, donde todos tienen que aportar, ademas, la ciudad es pequeña no hay muchos secretos que ocultar si haces algo malo en poco tiempo se sabra y seras sancionado, lo bueno es que no va a crecer la poblacion, ¿y porque?, pues porque se estan llenando de ancianos.

La razon es simple, los jovenes se van a buscar oportunidades diferentes a ciudades mas grandes, han oido cosas muy bellas de algunas muy lejanas pero con la promesa de una mejor vida. Yago quisiera ir, pero sabe que su padre no le dejara ir, parace que por experiencia propia reconoce que aquello es una grandicima perdida de tiempo.

Yago se encontraba en su trabajo, ayudaba al zapatero de la ciudad pues ha hacer sus zapatos que eran los que usaba casi todos los ciudadanos. Pero la noche anterior no habia dormido bien, asi que mientras andaba poniendo algunos clavos babeaba deseando estar en su comoda hamaca.

----flashback----

Yago corria en medio de la noche, pero no estaba solo ya que detras de el venian tres sombras mas, recorrian la ciudad a prisa y no les tomo mas que unos pocos minutos llegar hasta la zona que querian, era el edificio mas alto, de al menos unos 5 o 6 de altura, lo que era sorprendente para tan pequeña ciudad. Con un telescopio algo viejo que llevaban el cuarteto apuntaron hacia una direccion con este viendo con su ayuda algo muy lejano, era un brillo, algo brillaba intensamente a lo lejos en medio de las arenas.

-¿que crees que sea?-pregunto uno de ellos

-no lo se, pero debe ser genial-contesto Yago

-no deberiamos ir hacia ese lugar, es peligroso-comento otro

-bah!, mañana ire cuando termine de trabajar-dijo finalmente Yago

Pasaron un tiempo mas vigilando, pero al final uno tras otro se fue, Yago se quedo solo. ¿Porque esperar hasta mañana si podia ir hoy? Y asi lo hizo, camino por varios minutos, parecia que habian pasado horas, pero en realidad solo paso una hora, quizas un poco menos y se demoro tanto porque la arena dificultaba mucho la ida, ademas de que por tonto no calculo bien la direccion y anduvo dando vueltas por un buen rato, lo que pudo ser un viaje de unos 20 o 25 minutos termino siendo algo como una hora o un par de minutos menos.

Lo importante es que habia llegado a su objetivo, en medio de la arena vio una caja brillante de un color plateado, estaba muy sucia, el polvo lo tenia tan pegado que le fue imposible ver bien los grabados que tenia sobre si la caja, era como figuras de algo. Quizas se trataba de una representacion grabada sobre la caja, pero ciertamente que esta escondia algo dentro, intento sacarla pero era imposible para el solamente, estaba pesada y la arena no ayudaba para nada.

Comenzo a sacar arena como un perrito, pero con cada monton que lograba sacar, se venia encima otro poco, la tarea parecia interminable, asi que lo mejor era tomar otro tipo de accion. Al final vendria mañana con algo para poder sacar esa caja de alli.

----fin flashback----

-¡Yago!, ¡¿que demonios estas haciendo?!-le grito su jefe que desperto al muchacho de su sueño de un golpe

-estaba...yo estaba...trabajando...si, ¡trabajando!-contesto el

-¿en serio?, y te parece muy bonito andar clavando clavos en los zapatos-

-supongo que no-

-no te pago para que supongas nada-

-pero si tu no me pagas, yo solo trabajo aqui porque..-

-¡basta!, no quiero oir mas, retirate-le dijo

-pero si no he terminado mi dia de trabajo-

-tarado, ¿que no sabes que dia es hoy?-le pregunto su jefe

-¿me preguntas por la fecha o el nombre del dia?-

-no, hoy hay celebracion, nuestro fundador que fue quien encontro el oasis, hoy es el dia de su muerte hace unos 300 años atras y lo veneramos por su gran hallazgo, asi que hoy solo trabajamos hasta el medio dia-

-genial, bueno entonces me retiro-

Yago estaba feliz porque le quitaban horas de trabajo de encima, la verdad no le tenia mucho cariño a ninguna celebracion porque tenia que esperar a los 18 para poder divertirse como era debido, bebiendo licor y amaneciendo en un cuarto con mas de una mujer, no sabia como era para las mujeres, pero para los hombres vigorosos asi debia ser, aunque ya casi no habian mujeres jovenes, la mayoria se habia ido, asi que quizas terminaria solo o con algun borracho cerca, quizas era mejor tener 15.

Asi que fue a su casa y evito cualquier mirada con su madre que se encontraba alli y seguro querria ponerle ha hacer algo para la dichosa celebracion, pero Yago tomo lo necesario y partio de aquel lugar. Ya tenia una mejor idea de la localizacion de la caja asi que fue hasta ella.

Al llegar tuvo que quitarle algo de polvo, ya casi ni se veia, sino la sacaba pronto quedaria enterrada bajo la arena, de todos modos, ¿comoe s que sobrevivio tanto tiempo?, a no ser que fuera arrojada recientemente. Con una pala comenzo a sacar arena y mas arena llenandola en unos cubos que trajo consigo, la tarea fue extenuante y dificil, por suerte trajo agua, hasta que consiguio sacar la dichosa caja.

Era una caja grande, le llegaba un poco por encima de su cintura y Yago media 1,78m, y de ancho tambien tenia bastante, ademas de pesada, probablemente unas 100 o 80 libras, apenas y podia jalarla, ¿como llevarla hasta su hogar sin que nadie lo notara?, era su tesoro ahora ya que quien sabe que cosas tan misteriosas ocultaba aquella gran caja.

Fue entonces que escucho aquel ruido, eran motores, mucho de ellos. Normalmente no era gran cosa, se trataba de mercaderes que venian en su rapidas maquinas que se movian como barcos en medio del mar, solo que ahora era en medio de arena. Pero esta vez la preocupacion era ha que no era una o dos, eran muchos motores andando, los vio de lejos eran como esos motociclistas de antaño, tenian cara de malos y rudos basicamente por la imagen que daba pues por la roba que usaban, los accesorios con puas, imagenes de craneos, momentos sangrientos, etc., ya saben, todos montados sobre unas...¿aereo motos?

-que extraño, ¿vendran de visita a la fiesta?-se pregunto Yago, pero ese era un pensamiento muy tonto, porque obviamente no era asi

Por suerte Yago trajo consigo una pequeña carreta, seria dificil con toda esa arena pero podria hacerlo, lo realmente duro fue montar la caja en la carreta. Jalo y jalo y apenas habia avanzado unos 30 o 20 metros, era una cosa dificil.

Mientras que en su ciudad los tipos malos llegaron, la gente les tenia miedo, obviamente porq se les veia con malas intenciones. Pero alguien se puso frente a ellos desafiante.

-¿que desean?-pregunto el padre de Yago

-pueblo de...-dijo uno-¿como se llama este pueblo?-pregunto el que era el jefe, un tipo bien alto y musculoso, tenia mas pircings en la cara que un alfiletero alfileres.

-eso no les importa, si no vienen de visita, entonces sigan su camino-

-oye, eres muy rudo, nosotros vinimos aqui porque estamos buscando a alguien...un fugitivo que se escapo de prision-

-¿y esta aqui?-pregunto el padre de Yago

-bueno, eso creemos-contesto

-ohh eso creen...pues miren muchachos, si no tienen pista alguna, entonces para que vienen a fastidiar-

-es cierto, pero aun asi buscaremos-

-¡se los prohibo!-grito desafiante el padre de Yago

-muchachos-dijo el jefe y trono los dedos, como una señal

Pasa un minuto, entero.

-oigan-decia el jefe de los aereo motos que surcan por el desierto-no les dije...que cuando, ¡yo!, tronase mis dedos.....este...¡¡¡¡significa que hagan algo monton de tarados!!!!-

Todos sus secuaces comenzaron a hacer destrampes y causar molestias, se metian en las casas y eso a buscar y a destruir si podian, habia que dejar una buena reputacion de que eran malos. El padre de Yago en vano intento detenerles, la verdad solo lo golpearon una vez y quedo en el suelo noqueado.

-¡basta ya!-grito una voz pero nadie supo con seguridad de donde provenia

Comenzaron a buscar todos, hasta los ciudadanos y los malos tambien.

-¡hacia el noreste!-grito la voz denuevo

Pero nadie supo reaccionar ante aquella direccion.

-¡solo miren a la derecha!.....idiotas...-eso ultimo lo murmuro

Fue entonces que todos vieron a la izquierda.

-¡ohh por todos los...!-volvio a gritar asi que salto desde donde estaba, un edifico de unos tres pisos y se poso en medio del conflicto.

Era un encapuchado, no porque era una capucha viviente, sino una persona que ocultaba todo su ser con una capucha, ¿no sabia que hacia calor?, ¡no!, solo es que se trata de un personaje interesante. Pero dejo ver su rostro un poco, era una mujer muy hermosa de pelo rubio largo amarrado con una cola y unos ojos como de un tono griz, bueno al menos de cara estaba bonita, no podian ver lo demas.

-yo soy la que buscan, ¿no es asi?-pregunto ella, era una mujer con actitud, dirigia su mirada ruda hacia el jefe de los malos

-claro...dejame revisar-reviso unos papeles a ver si todo estaba bien-si, eres tu, tal como lo describe la imagen y la descripcion...bueno-

-pero no dejare que te salgas con la tuya-

-mira yo solo te busco porque necesito la caja que tenias contigo-

-esa caja le pertenece al elegido y a nadie mas, le prometi a mi maestro que lo buscaria aunque me tomase toda la vida...-dijo ella-aunq eso ultimo sono tonto, mejor solo dire que lo buscare y lo encontrare-

-vaya, vaya, con que crees que vas a lograr tal cosa, eres una niña muy tonta. Tendre que enseñarte buenos modales para que dejes de hablar tanto-

-¡muy bien!-dijo ella y se puso en posicion de combate

-jajajajaja, ¿que vas a hacerme?, no me digas que practicas artes marciales, pues oara que sepas desde que inventaron la polvora todo eso se acabo boba-y saco su pistola-basta de juegos, ¡¿donde esta la caja?!-

-la escondi en el desierto, ¡jamas la hayaras!-

-dejame adivinar, la tiraste en la arena esperando a que esta la hundiera, ¿no se supone que ibas a buscar al elegido?-

-esta conversacion ha durado mucho, acabemos con esto ya-dijo la mujer

-¡bien!, y para q sepas es nueva, la pistola, asi queras la primera que muera a manos de ella-

Mientras tanto Yago recorria el desierto, ya estaba muy cansado como para moverse y no tenia agua. Fue entonces que sintio una sensacion calida mientras caia sobre las arenas del desierto, le decia cosas como "no te rindas", una voz femenina y comenzo a sentir que las energias le llegaban, ¿que fue aquello? Yago se puso de pie y vio que su aldea ardia en llamas, algo muy malo pasaba. Dejo la caja y fue a ver que sucedia.

¡Bang!

El disparo no pego en ningun lado vital, pero si dio muy cerca del pie de la chica amenazada.

-bueno, no se como le haras, pero me vas a indicar donde esta la maldita caja, la proxima vez no fallare-

-¡detenganse!-grito otra voz

-oh no!, no me digan que tendremos que buscar a otro mas-dijo el lider de los motociclistas del futuro posible

-esta detras de ti-dijo la mujer

El sujeto volteo para ver tras de si a Yago, esto lo aprovecho la rubia para darle una patada voladora a la nuca tumbando al jefe, tomo el arma y apunto a los que aun causaban destrozos. Todos miraron a su jefe vencido y salieron huyendo, si...yo tampoco lo entiendo, pero son muy miedosos porque saben que sin su jefe no son nada para los protagonistas.

Sin embargo algo los golpeo tan fuerte que salieron volando, la mayoria de ellos, frente a todos aparecio un tipo con una armadura de un color oscuro.

-oh no!!-dijo la rubia-y por oh no, es peor que una pistola-

-jiajiajiajia-reia el tipo de la armadura negra-por fin te encuentro Galatea, has sido una niña muy mala, ya sabia yo que esos motociclistas seria una perdida de tiempo-

-es una perdida de tiempo hablar contigo-dijo Galatea-asi que, ¡prueba esto!-le descargo todas las balas al tipo pero ninguna le hizo daño, todas cayeron al piso como si chocaran contra algun muro invisible

-¡no se que diablos pasa!-grito Yago-pero ya me canse de ser olvidado, asi que es momento de hacer algo...que no se que sera, pero sera, ¡algo!-

-niño largate, ¡o sea fuera de la vista de este monstruo!, es un espectro de Hades-

-¿y quien diablos es Hades?-pregunto Yago

-olvidalo-dijo Galatea-yo me encargare-se quita toda la capucha descubriendo, ademas de un buen cuerpo que ella tambien tenia una armadura-peleemos...¿como era tu nombre?-

-soy Raimi, el gusano-

-¡el gusano!, jajajajajaja, ¿y cuales son tus poderes?-se reia Yago-¿enterrarte bajo la tierra?, jajajajajaja, ¡que gran poder!-

-exactamente-dijo Raimi que desaparecio en un abrir y cerrar de ojos y comenzo a destruir varias cosas con sus tentaculos como si fueran gusanos, pero sin hacerle daño a Galatea

Raimi ataco finalmente a Galatea que se defendio dando saltos habilmente.

-¡toma esto Garra del Trueno!(es la tecnica de Shaina)-lanzandole su poderosa garra a Raimi que gimio al sentir el trueno, sin embargo volvio a escabullirse bajo tierra

-¿oiga como hizo eso?, le salieron como truenos de la mano-pregunto Yago

-te los voy a tirar a ti si no dejas de joderme niño-le dijo Galatea esta ves muy molesta con Yago

En cosa de segundos aparecio Raimi tras Yago y le apriciono con sus tentaculos estrangulandolo con aquella enorme fuerza.

-ni se te ocurra Galatea, si me atacas el daño tambien lo recibira el niño-

-¡eres un cobarde!-grito ella furiosa

-jejejeje, asi es, pero he sobrevivido mucho tiempo asi, ¡viva la cobardia!-

-!auxilio!-gritaba Yago

-bien, bien...te llevare a donde deje la caja-dijo ella bajando la guardia

Pero en ese momento algo comenzo a suceder, Yago sintio algo dentro de si, una sensacion y no era una de las raras o algun malestar, sino que aquella energia calida que le salvo en el desierto regresaba y le ayudaba, le daba nuevas energias.

-Yago...-decia una voz femenina como distante-debes despertar tu cosmos-

-¿mi que?-

-el momento de luchar contra Hades ha llegado....-

-pero yo no se quien es Hades-

Yago grito con furia, sentia que algo nuevo recorria su ser, un nuevo poder, memorias de antiguas batallas nunca antes luchadas, veia imagenes de epocas pasadas, ¿que era todo eso y derrepente comenzo a emanar cosmo energias que hizo añicos los tentaculos de Raimi, para sorpresa de todos, especialmente de Galatea y tambien, mas aun para Yago.

-no se que sucede, pero es como si...no me fuera para nada extraño-se decia a si mismo Yago

-¡¿como?!, ¡¿de donde sacaste tanto poder?!-se preguntaba el confundido Raimi-¡que gran cosmos!-

-ahora veraz por meterte con mi ciudad, ¡¡toma!!; ¡meteoro de pegaso!-y como si fuera tan natural como si lo hubiese lanzado otras veces los poderosos meteoros salieron a toda velocidad haciendole un terrible daño a Raimi, haciendo pure su armadura y dejandolo noqueado en el suelo, totalmente.

Galatea aun no se lo creia, pero todo indicaba que habia encontrado al elegido.


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