Padre por acuerdo

Inuno Taisho, dueño de las grandes empresas Taisho Inc. Estaba en estado de gravedad con un pie sobre la tumba. Antes de morir quería ver a su único nieto hacer una cosa que jamás haría por su cuenta: casarse. Por eso ideo un sucio plan con la hermosa Kikyo Haruno para engatusar a su nieto.

Sesshomaru Taisho, nieto del famoso empresario Inuno Taisho. Amaba a su abuelo como si fuera su padre, pero cuando se entero de los planes que tenia su prometida de sacarle dinero a el y a su abuelo enfureció como nunca. Corrió hasta no poder mas, llegando a un pequeño café.

Kagome Higurashi una humilde joven que había perdido a su marido en un terrible accidente por la falla técnica de uno de los autobuses Taisho trabajaba en una cafetería llamada Shikon-no-Tama. Ella había quedado embarazada y tenia que lidiar con su trabajo de la cafetería, en la librería, sus estudios y su próximo bebe.

Sus vidas se cruzaran en un divertido y maravilloso acuerdo...​

 

Capitulo 1:

Kagome Higurashi estaba sentada al final del café, con los pies apoyados en la silla frente a ella. Con la cabeza apoyada en la mano ojeaba un cuaderno, intentando memorizar los puntos más importantes para el examen del día siguiente. El café estaba muerto de tranquilo, excepto por el ruido que hacia Totosai al lavar los trastes. Ella y el viejo llevaban más de 7 meses trabajando juntos. Se había formado una muy estrecha relación entre ellos. De pronto se abrió la puerta del café y entro un extraño, Kagome levanto la vista y observo el gran reloj que había en la pared. Eran casi las 12 de la noche. Suspiro y se puso de pie con torpeza, rezando para que el cliente no pidiera nada más que un café; faltaban 10 minutos para cerrar. Ojala el cliente se marchara rápido.

Era un hombre alto, de piel clara, y si el instinto no le fallaba parecía estar de un humor de perros. Lo miro con recelo mientras se acercaba al mostrador. Se fijo en como iba vestido y se pregunto que estaría haciendo en aquel café un tipo con esmoquin. Al mirarlo un poco más detenidamente pareció recordarlo de algún lado. ¿Acaso lo conocía? Si, estaba segura de haberlo visto antes...

- ¿Que desea?

A pesar del cansancio y de las molestias que sentía, de pronto sintió la necesidad de peinarse y darse un retoque en su maquillaje. De repente su memoria tuvo un momento de revelación. Recordó los veranos junto al mar, cuando ella vivía con su tía Kaede, mucho después de la trágica muerte de sus padres. Joven y llena de vida solía platicar mucho con un grupo de jóvenes mayores que ella, y Sesshomaru Taisho era el que mas le agradaba. Kagome sonrió.

-¿Me da tiempo de tomarme un café?- le contesto desinteresadamente mientras paseaba la mirada por el local vacio.

-Cerramos a las 12- comento mientras tomaba una taza y un plato.

Aquella falta de interés si que le molesto. Claro que había cambiado mucho (muchísimo) en los 10 años transcurridos pero no era para tanto. Al menos podrías haber intentado mirarla mas detenidamente, intentando recordarla. ¿Es que ni siquiera se acordaba de que se había conocido?

-No esta mal- comento después de dar un sorbo de café

-Esta recién hecho. ¿Quiere algo más? ¿Un pedazo de pastel o algo así?

Realmente hablaba mecánicamente pero solo lo hacia para poder disimular un poco. Lo observo fascinada mientras el se tomaba su café. ¿A que se dedicaría? De joven el solía alardear de su talento para surfear. Estaba tan encimada en sus pensamientos que no noto que la miraba fijamente. Se estremeció

-¿De que es el pastel?- se veía a las claras que estaba intentando olvidar su enfado

-Es de cereza, recién lo hicieron en la mañana- el asintió dando la autorización de que se lo sirviera. Después de eso no volvió a la mesa final del café. De nuevo busco el reloj con la mirada, gracias a Kami-sama solo faltaban 3 minutos para cerrar. Suspiro con suavidad y se froto la espalda.

-Debería sentarse, mejor dicho, debería estar metida en la cama ¿Que hace trabajando a estas horas?

-Necesito trabajar

-¿No esta casada?- pregunto después de echarle un vistazo a su mano izquierda

-No, estoy...

-Kagome, ¿Desea el cliente algo de comer? Estoy apunto de cerrar todo

-No, se esta tomando un café.

Al levantar la cabeza vio que la miraba. Enseguida se puso colorada, no quería ser la primera en apartar la mirada, y menos de esos hermosos ojos color ámbar. Entonces si darse cuenta lo miro con desafío, molesta por el hecho de que no la recordara

-¿La conozco?

-Hace mucho que no nos vemos, ¿recuerdas la playa Manley?

- Mmm... Hace años que no voy por ahí- se le quedo mirando y de pronto pareció recordar- Tu eres la pequeña Kagome Saotome - ella asintió lentamente con la cabeza, contenta de que la recordara- ¿Que demonios estas haciendo aquí?

-Trabajo aquí, ¿no se nota?

-¿Pero no estas casada?- ella negó con la cabeza y se encogió de hombros- ¿Quieres estarlo? - abrió sus ojos desmesuradamente

-¿Como dices?

- ¿Te casarías conmigo?

-Pe...Pero es que yo...

- ¿No quieres que tu hijo tenga un apellido al nacer?

-Tendrá un apellido, por supuesto- contesto enfadada. ¡Ese tipo no sabia nada de ella!

-¿Estas estudiando?

-En la universidad

-¿Tus padres te echan una mano?

-Sabes Sesshomaru, mi vida privada no es asunto tuyo. Me alegro de verte después de tanto tiempo, pero estoy cansada y quiero irme a casa.

-¿Eso quiere decir que no verdad?

-Solo por que llevan más de 20 años muertos

-Lo siento, no quise lastimarte- ella asintió y se estaba retirando cuando una mano le impido recoger sus cosas.

-Tienes cara de estar cansada

-Si me dejaras guardar mis cosas, podría cerrar e irme a casa.

-Primero deja que te proponga un trato- ella asintió curiosa- ¿Que te parece dejar este empleo, seguir con tus estudios y no tener que preocuparte por el futuro inmediato?

-¿Y que tengo que hacer? ¿Vender a mi primogénito?

-No. Solamente casarte

-¿Y con quien tendría que casarme?

-Conmigo, lógicamente

-No lo dirás en serio

-Lo digo muy en serio- contesto muy despacio, casi susurrando las palabras.

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Fin del primer capitulo.... pfff.... jajá espero que haya sido de su agrado. Comente por favor. ​

Gracias​

 

Capitulo 2

El brillo de sus ojos la aviso de que seria peligroso contrariarlo. Aquel no era el arrogante muchacho de la playa. Era un hombre de unos 26 años, atractivo y peligroso.

— ¿Has bebido?— le pregunto

—Un poco, pero no estoy borracho, si es eso lo que temes. Estoy furioso y con ganas de vengarme, pero no borracho— murmuro, mientras la miraba a los ojos con intensidad— Piensa en el trato que te ofrezco, podrías dejar de trabajar y quedarte en casa con él bebe. Te daría todo lo que necesitaras.

— ¿Y a cambio, que tendría que darte yo?

Nunca pensó que le interesara como esposa o de alguna otra forma. Tenia más de 8 meses de embarazo, estaba hinchada, su bonito cabello azabache había perdido todo su brillo. Tenia ojeras, se las veía todas las mañanas al ir a trabajar, la pregunta que rondaba ahora su mente era: ¿Porque ella? Con su atractivo, su posición social y su dinero, podría encontrar a muchas mujeres que no dejarían pasar la oportunidad de casarse con el ojidorado.

—Si me caso contigo tendré una esposa — dijo con pesar

—Aun sigo sin entender nada— estaba cansada de tanto misterio

—Quiero elegir a mi esposa, y te he elegido a ti.

—Tú no sabes nada de mí

—Kagome, pasamos varios veranos juntos en el mismo lugar. Tú me seguías a donde quiera que fuese, y no solo a mí, también a Inuyasha, Miroku, Koga, Bankotsu, y al imbécil de Naraku. Conocía a tu tía y sé que no estas casada. Eso es todo lo que me falta saber, yo necesito una esposa y a ti no te caería mal tener un marido. Seria temporal y me ocuparía de que no te faltara dinero.

—No me lo trago. Dame unos cuantos días para pensarlo— su propia contestación la horrorizo, pero no se hecho para atrás. Seguramente Sesshomaru había estado bebiendo mas de lo quería reconocer. Si lo tranquilizaba se iría pronto y sin problemas

—Me doy cuenta de que la idea te resulta extraña; también mi madre y mi abuelo se quedaran sorprendidos. ¡Maldita sea, elegiré yo a la mujer con la que me case aunque sea lo último que haga! Volveré mañana a las 8 menos 20 para oír una respuesta. Yo no te exigiré nada, ni tú a mí, la única diferencia es que estaríamos casados y tú no tendrías que trabajar

Por un instante se dejo llevar por su imaginación. Que sueño mas tentador al no tener que volver a preocuparse por el dinero, poder quedarse en casa con su bebe y no tener miedo del porvenir

—Créeme, no te tendrías que preocupar por nada. Piénsalo. Mañana cendre a que me des una respuesta— dijo mientras se ponía de pie. Saco unos cuantos billetes de su cartera y los tiro descuidadamente sobre la mesa— Gracias por todo Kagome

Cerro la puerta, recogió sus libros se puso el abrigo. No podía hacer otra cosa más que darle vueltas a la extraña proposición.

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White Kitty: jaja a ok.... ammm, que bien a mi tambien me fascinan los SesshxKag, espero que este capitulo sea de tu agrado :DD. Gracias por ayudarme con las faltas de ortografia, la verdad aun me cuesta muchisimo trabajo :P​

Luli-chan: Gracias por tu consejo del guion largo jaja. Amm pues espero que tambien te guste este cap y comenta ¿no? jeje a ok :DD​

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Gracias, que pasen una genial semana​

 

Capitulo 3


En aproximadamente daria a luz a su bebe. Necesitaria todo el dinero que pudiera ganar. De pronto Totosai comento

—¿Quien era el tipo que entro a ultima hora?

—Alguien que conoci de niña. Sesshomaru Taisho

—Interesante joven. Muy bien vestido, y muy seguramente orgulloso. ¿Que queria?

—Algo sumamente extraño, el dijo algo....

—¿Que te dijo?

—Que me casara con el

—Muy bien hecho

—¿Que?— exclamo sumamente confndida— Sr. Totosai, el no me conoce y ademas...

—Niña, no le des tantas vueltas al asunto. Estaras mejor casada, y estarias en casa con el bebe, sin trabajar y sin preocuparte por el marido (n/a: que genial jeje) ¿Te gusta el tipo?

—A lo mejor, pero eso no deberia importar demasiado. Tenia 10 años que no lo veia

—Quiza lleva enamorado de ti todo ese tiempo— ella se echo a reir

—Realmente lo dudo, mas bien pienso que se trata de una broma

—Ningun hombre le pide a una mujer que sea su esposa de broma.¿Que sientes por el?

—De joven estuve enamorada de el, pero conoci a Renkotsu y todo quedo en el pasado, ademas...

—Chica, tu y Renkotsu eran felices, pero nunca fue el amor que uno desea en la vida

—Yo amaba a Renkotsu— protesto molesta

—Se que lo amabas, pero jamas me parecio que estuvieras enamorada de el.

Las palabras de Totosai eran duras, pero no por eso dejaban de ser ciertas. Habia amado a su esposo y habia llorado su muerte, pero incluso en los mejores momentos de su matrimonio, se preguntaba si no habria algo mas. Ciertamente algo fallaba en su relacion. El ambiente estaba humedo y habia niebla, no podia pensar en otra cosa mas que en la rara preposicion de Sesshomaru.

—Piensa en lo mucho que te beneficiara este matrimonio, aunque sea solo temporal.

—Supongo que lo hare— despues de todo no le quedaba otra opcion

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Sesshomaru Taisho paseaba por la calle, ajeno al frio que le daba en la garganta. Estaba tan furioso que ni lo notaba. ¡Malditos abuelo y mama! El largo paseo desde el teatro de opera no habia sido suficientemente largo para calmarlo; el whisky tampoco habia sido de mucha ayuda.​

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Habia pensando que Kikyo queria casarse con el por que lo amaba, no por su dinero; o mas bien, por el dinero de su abuelo. Desde que se habia enterado, esto lo consumia por dentro.Su abuelo lo habia presionado para que casara, llevababa mas de 5 años haciendolo, pero esta vez se habia pasado. Su madre tambien estaba obsecionada con el mismo asunto. Se imaginaba la cara de su madre al decirl.e que se iba a casar con una camarera.​

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De pronto una importante pregunta se le vino a la mente: ¿Y el padre del bebe? Seguramente habia huido al enterarse que ella esperaba un hijo​

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La luna menguante brillaba en el cielo, ¿Que pasaria de ahora en adelante?​