Prisión Boceto

Se acercó, así, a la mesa... y pudo ver que estaba llena de varias bolsas de patatas, platos con algo de comida, y restos del estilo. Estaba algo sucio... pero no parecía haber nada interesante.

... salvo, claro, un papelillo adherido a la misma mesa, un post-it, donde venía escrito a mano:

"Tu canal favorito es el tercero. Echan un programa a las 21:00 que te encanta"

A su lado, otro:

"Si te entra hambre, tienes comida para picar en el mueble de la cocina. Es la sala de la derecha"

Y un último post it:

"Tu teléfono está en el cajón del mueble del televisor. Recuerda cogerlo cuando salgas. Tienes mi número guardado ahí, es el único que tienes".

... un momento, ¿t-teléfono?

 

Hubert

Asentí y, poco a poco, mi semblante también fue recuperando su seriedad. Medité un momento antes de hablar:

—Son muchas cosas para contar. Tal vez lo mejor sea que comience por aquello que conecta todos los casos en los que colaboré con la CSG: el llamado Proyecto de Alteración Molecular... El infame P.A.M.

>>Verás, lo que sabemos hasta ahora de esta organización es lo siguiente...

Le conté sobre los objetivos del P.A.M, sus líderes y los objetivos que perseguían, y cómo torturaban pokémon en el proceso.

[Hablarle sobre el P.AM.]

 

Por un instante, al pronunciar aquellas palabras... "Proyecto de Alteración Molecular"... el rostro de Irvine se ensombreció. Fueron unos segundos, pero su semblante cambió por completo. Tuvo que tomar aire, regresando a sus aires serenos, para decir:

—... no me suena de nada esa organización, pero... todo lo que cuentas es horrible. Quienes sean capaces de hacerle eso a los pokémon no tienen perdón —chasqueó la lengua, apartando la mirada.

Vaya, Irvine no parecía estar siendo del todo sincero. ¿Sería buena idea interrogar al mismísimo campeón...?

 

Mimi Honda

''Vaya, es una lástima… porque definitivamente tu personalidad sobria y aburrida va perfectamente acorde con el aura que trasmites’’

Eso quise decir… pero logré morderme la lengua a tiempo y retener las ganas de responderle. Debía mantener la cabeza fría… entrar en una disputa como esa ahora no era lo más adecuado. Solo nos retrasaría. De modo que obvié su comentario.

¿Nadie les había comentado nada? ¿No sabían sobre el secuestro, la matanza? ¿El P.A.M? ¿No sabían nada de nada? Aquello solo reafirmó mi idea en lo referente a la inutilidad de los adultos que nos rodeaban. Pedían ayuda pero ni siquiera se molestaban en ponerles al corriente de todo.

''Qué incompetencia.''

Suspiré.

—Mi mejor amiga ha sido secuestrada por un maníaco que se hace llamar Justice— expliqué cruzándome de brazos—. Ayer… los presos de los módulos norte y sur perdieron por completo la cabeza y atacaron al hasta entonces director de la CSG para posteriormente suicidarse en una especie de ritual orquestado. La persona detrás de esa masacre no es otro que el propio Justice. Tenemos un vídeo como prueba.

>>Desconocemos como demonios pasó todo pero… sinceramente, eso es lo que menos me importa. Albert era uno de los líderes de Proyecto de Alteración Molecular, una organización criminal responsable de todo tipo de torturas y experimentos horribles con pokémon. Ellie McRoy y Blaise Leblanc, otro de los líderes, también perdieron la vida durante la masacre. Justice parece sentir un odio visceral por el P.A.M… aunque no es de extrañar porque son unos malditos bastardos capaces de someter a pokémon a todo tipo de crueles experimentos por su propia conveniencia.

Apreté los dedos en torno a mis brazos, rabiosa.

—Mi prioridad es la vida de mi amiga, por supuesto— continué—. Y las condiciones de Justice son claras. Si no investigamos sobre el P.A.M acabará con la vida de Emily. No entiendo como los demás pueden forzarse a mantener la calma. Yo difícilmente puedo estar centrada.


[Hablar sobre Justice]

 

Hubert

No. Aunque fue apenas un segundo, no se me pasó por alto el modo en que el rostro de Irvine se ensombreció. Me quedé mirándole detenidamente, buscando sus ojos, pero él ya había apartado el rostro. ¿Qué verdad trataba de esconder Irvine? ¿Era esto por lo que Farrow estaba tan interesado en él?

Me rasqué la mejilla con el índice, con algo más de intensidad que antes. De pronto, me sentí incómodo.

Pero era más fuerte la curiosidad.

—No creas que no me di cuenta de tu reacción —dije, con una sonrisa triste, libre de malicia—. Creo que sabes algo más y me gustaría que me lo cuentes. No obstante, también puedes demostrarme que estoy equivocado. Si quieres, podemos salir a caminar junto a las olas para hacer más ameno este... interrogatorio.

[Interrogar]

 

—... ya veo —Oxy pareció empatizar mucho al oír las palabras de Mimi. Al escucharla hablar de su mejor amiga, su rostro se suavizó, dejando algo atrás su expresión severa—. Te entiendo muy bien, niña. Yo... también tengo a una amiga muy querida. Y lo cierto es que nunca me lo he planteado, porque ojalá que no tenga que verme en una situación así, pero... si Ixie estuviese en peligro, tal y como lo está tu amiga, probablemente yo estaría del revés. Se me olvidaría hasta como respirar.

>> Ese tipo parece peligroso, en cualquier caso. Justice. Je, qué irónico nombre para un enfermo que se dedica a jugar con la vida de la gente de esa forma. ¿Qué tipo de justicia es esa? Ptché. Si esa es la justicia, ojalá todo el mundo fuese injusto.

>> Cuéntame más cosas, chica. Quizá así pueda formarme una idea más clara en mi cabeza sobre todo esto.

Otra vez, ese gesto. Esa mirada ensombrecida. Fue rápido, nuevamente: Irvine parecía ser muy ducho en controlar sus emociones, sin duda. Pronto tomó aire, dispuesto a hablar, siempre sonriente.

—Caray, eso me tomó por sorpresa. ¿Dudas de mí? En fin, uh... —acariciaba su nuca con el cuello—. No tengo mucho que ocultar, a decir verdad.

Irvine - Conocimientos sobre el P.A.M.

Ese P.A.M. es algo horrible, sin duda. Una panda de desgraciados, cuanto menos.

Pero, tristemente, no puedo aportar mucho más al respecto, ¿sabes?

Esa es toda la verdad: no había oído nada sobre el P.A.M. en toda mi vida hasta este momento.

 

Mimi Honda

"Bueno... yo no puedo olvidar como respirar. Porque tengo que salvarla"

De modo que ella también tenía alguien importante a quien proteger. Teníamos algo en común al menos... era la única persona que no me había pedido que mantuviese la calma y que parecía entender mis sentimientos. Esperaba que me reprendiese por ser incapaz de estar tranquila... pero no lo había hecho.

Aquello me hizo dejar algo más de lado mi postura defensiva y descrucé los brazos.

—¿Más...?—inquirí—. Creo que de forma bastante escueta ya te lo he contado todo... profundizaré un poco más sobre el P.A.M; El Proyecto de Alteración Molecular, entonces.

>>Como te conté es una organización criminal dedicada a la experimentación con pokémon. Los someten a toda clase de vejaciones y torturas. Su Guarida está aquí, bajo nuestros pies... pero está vacía. Durante el incidente de ayer todos corrieron a esconderse como Rattata cobardes... quien sabe dónde. Huyeron usando una máquina de teletransporte prosulpasada con la energía de Abras vivos.

Chasqueé la lengua.

>>Es... horrible lo que hacen. Esa guarida es un pináculo a lo más bajo de la naturaleza humana... casi me causa vergüenza ser de la misma especie que ellos.

[Hablar sobre el P.A.M]

 

Hubert

"Otra vez esos ojos..."

—Discrepo con el último punto —rebatí con calma—. De hecho, es ése el motivo porque el que estamos manteniendo esta conversación: cuando mencioné por primera vez al P.A.M., reaccionaste como si supieras de qué te estaba hablando.

[Presionar: Esa es toda la verdad: no había oído nada sobre el P.A.M. en toda mi vida hasta este momento.]

 

Liza White

Después de que los adorables hermanitos Nikolah y la pequeña Talía se presentaran, opté por acompañarles con gusto hacia donde el rubio quería acercarse. Lo cierto es que, en el fondo, estaba realmente cansada de estar sola. Verles alejarse hacia la puerta una vez Erwin les confirmó todo lo que sabían, hizo que una presión en el pecho me obligase a salir corriendo tras ellos. Ahora que había encontrado una compañía momentánea, no me apetecía volver a quedarme sola con mis pensamientos. Todo aquel caso me superaba, me encontraba confusa, aturdida y atormentada por la idea de no haber estado la otra vez para ellos. Aquella pequeña había tenido que ver atrocidades, cadáveres esparcidos en un mar de sangre ante sus inocentes ojos, mientras que yo recorría la isla de Udan ajena a los problemas que asolaban Galeia.

Mordí mi labio inferior, entrecerrando los ojos. Tenía que darlo todo de mí ahora que podía, pero no podía hacerlo sola. Nikolah, Talía y Mimo eran mi pequeño bote salvavidas en aquel instante en el que me encontraba verdaderamente asustada, y no podía dejarlo marchar.

Mis pies supieron rápidamente la respuesta.

Llegamos así a la playa, donde Handsome, aquel detective de la CSG que tanto admiré en los anteriores casos, se encontraba junto a otras tres personas más. Mientras me aproximaba a un costado de Nikolah, dedicándole una pequeña sonrisa cuando me vio llegar a su lado, me asomé para poder ver, desde la protección que ambos me brindaban, de quienes se trataban. Mi asombro fue mayúsculo cuando reconocí a uno de ellos como aquel hombre que nos enseñó a dar nuestros primeros pasos en la región. ¡Irvine... estaba allí! ¡Hablando con Hubert!

Y no solo estaba él. Pude ver a Mimi entablar conversación con la otra mujer, y también estaba Ian, ocupado en otra conversación más. Al parecer el detective no le dio la respuesta que buscaba, pero Nikolah no parecía ser alguien que se rindiese fácilmente ante una negativa, por lo poco que pude ver de sus intentos y reacciones. Revisé nuestros alrededores, sin dejar de prestar atención a las conversaciones del resto.

—Bueno, parece ser que no hubo suerte. Pero no te preocupes, no se pierde nada por intentarlo —le animé, intentando sacar un tema de conversación mientras se nos ocurría algo—. ¿Crees que quede algo más por hacer hasta que logremos establecer un nuevo punto en la investigación?

 

—Bueno, esa fue tu sensación, en todo caso —comentó Irvine, sonriente. Luego se encogió de hombros—. Yo te estoy asegurando que no ahora, por lo que... lo más lógico es que te hayas equivocado al notar esa reacción en mí, ¿no?

... sin duda, era duro de roer. Mucho.

 

Hubert

[Dejar interrogatorio]

Le devolví la sonrisa.

—Así son las cosas... —comenté, dejando que la ambigüedad de la frase flotara en el aire—. Te pido disculpas por las molestias. Me dejé llevar porque quiero mucho a Emily, a quien Justice tiene secuestrada, como ya debes saber. Todo cuanto puedo hacer para salvarla es recabar información sobre el P.A.M., y he visto en ti una posibilidad de ampliar ese aspecto.

>>Ah, creo que que no te han dado detalles sobre esta persona a la que denominamos Justice.

Así, desvié la conversación hacia los detalles del final del cuarto caso de la CSG, cuando Justice se nos presentó mediante una transmisión.

[Hablarle sobre Justice]

 

Ian

No pude evitar sonreír al volver a encontrarme con Pyro; combates como esos eran difíciles de olvidar. Al igual que aquello que había ocurrido hace poco.

—Me gustaría decir que todo está bien Pyro, pero lo cierto es que no. Lo ideal sería contarte con detalle todo lo que ha pasado desde el principio, pero dada la situación actual, lo mejor será que empiece por el final. Así, al menos, sabrás a lo que nos enfrentamos: Si no pones tu motor a máxima temperatura desde ahora, no estarás listo para una posible tragedia. Una segunda tragedia.

>>¿Y qué mejor manera que una historia de terror? Pero atención, está basada en hechos reales.

Y con esas palabras y una sonrisa forzada, le conté al Grande de fuego sobre el incidente más trágico, grotesco y terrible en la historia de la Prisión Boceto.
>> Hablarle sobre el incidente

Contenido oculto

 

Irvine tuvo un escalofrío al oír todo eso.

—Vaya... desde luego, quien haya hecho eso tiene un sentido de la justicia bastante enfermizo —comentó, cruzándose de brazos—. Hacerse llamar "Justice" me resulta algo hasta irónico.

Suspiró, cruzado de brazos.

—¡W-Wowowow! —exclamó Pyro, dando un paso atrás—. ¡P-Pero...! ¿Eso pasó de verdad? Caray, si yo llego a estar aquí en ese momento, me habría desmayado del susto. Suena a algo horrible —se frotó el cabello, algo aturdido—. Hmmm. Entonces, supongo que lo primero es averiguar cómo se pudo hacer eso, ¿no? El método y tal. Así tendréis de dónde tirar, ¿no?

Pareció meditar durante un rato. Un rato bastante largo. Finalmente, terminó por sonreír.

—Nop, no se me ocurre nada. ¡Preguntadle a Oxy, que ella es la lista aquí!

 

Nikolah Cruz

Me rasqué la barbilla, mientras meditaba las palabras de Handsome. Liza había llegado a mi lado, y el resto de los holders al parecer se mantenían ocupados con esas otras personas. Sí, no tenía mucho con lo que trabajar. Al menos, yo no lo tenía encima. De repente, me vino a la cabeza. Me golpeé la frente con la palma. ¡Obvio que las tenía encima! El aparatejo ese que nos habían dado en algún momento servía también para corroborar y releer las pistas que tanto yo como los otros habíamos encontrado. Rápidamente, saqué la Dex y comencé a navegarla, leyendo antentamente. Habíamos conseguido bastantes, la verdad. No estábamos tan mal como creía.

Sin embargo, una me llamó la atención. Un nombre en particular. Nunca lo había escuchado. Y tal vez Handsome supiera algo, siendo el super detective que era. Me giré hacia Liza, al momento en el cual me hablaba, y le dediqué una sonrisa.

— Siempre se puede hacer algo más. En tu caso, seguir preguntando.— me volteé para mirar nuevamente a Handsome.— Disculpe, Handsome, pero tal vez pueda ayudarnos con esto. ¿Acaso sabe algo o podría averiguar con sus contactos sobre un tal Byron Hopkins? El nombre les ha surgido y parece de especial interés. Se encontraba en las habitaciones de los líderes del PAM.

>> Hablar con Handsome: preguntar sobre una prueba en específico.

 

Emocionada, Emily abrió los cajones del mueble, pero... no había nada allí. Hum. El post-it decía que cada vez que saliese debía llevarse el móvil, ¿significaba eso que el tipo de la casa no estaba allí? ¿Estaría, entonces, sola?

Con curiosidad, alzó la mirada y encontró, justo sobre la tele, una foto enmarcada en un elegante cuadro plateado. La foto mostraba a un hombre de unos cincuenta años, sonriente, con dos niños a su vera, sentado en un sillón. Tenía a una niña pequeña, muy pequeña, de unos dos o tres años, sobre sus piernas... y otro niño, que tendría unos diez años, sonreía, junto al hombre. El niño tenía un rostro que a Emily le resultaba vagamente familiar. ¿Lo había visto antes?

Su vista, tras eso, se desvió hacia el post-it que había justo bajo la foto. Decía:

"Somos tus nietos y tú. Recuerda a Mely, siempre veníamos a jugar ella y yo, tu nieto".

Vaya. Sí que eran sus nietos, ¿eh? Pero, ¿quién era Mely? ¿Y quién era el otro niño?

Obtienes: Foto de familia

 

Hubert

—Estoy de acuerdo contigo —dije.

Me mostraba sereno y pensativo, pero en realidad también prestaba mucha atención a los ademanes de Irvine. La insistencia de Farrow para que viniera había captado mi interés sobre su persona, interés que se acrecentó con lo que ocurrió minutos atrás... Él debía saber, en este momento, que no me había rendido... Pero no podía hacer nada hasta contar con las evidencias adecuadas. Porque su templanza de hierro era admirable.

—Lo que yo me pregunto... —continúe diciendo— es qué fue lo que hizo después... Apenas terminó aquella transmisión en vivo, los presos que habían cometido delitos de gravedad comenzaron a tener un comportamiento violento. Comenzaron a matarse entre ellos... Se suicidaban... Hubo un grupo que mató al jefe Albert enfrente de nuestros ojos... Fue un espectáculo realmente sanguinario. Sin embargo, no nos atacaron. Era como si tuvieran un objetivo específico.

>>Como si estuvieran... poseídos.

[Hablarle sobre el incidente]

 

—¿Eh? —Handsome inclinó la cabeza a un lado—. ¿Byron Hopkins? ¿Ese nombre estaba entre los líderes del P.A.M.?

Pareció meditar por unos instantes.

—¿No era Albert el líder? Aunque claro, tiene sentido que si encontrasteis habitaciones... teniendo Albert su oficina justo encima, sería absurdo ener una dependencia ahí. ¿Quiere decir eso que... hay un líder más que no hemos tenido en cuenta? Hum.

>> Intentaré obtener más información sobre el tipo, no te preocupes. Si consigues algo nuevo, házmelo saber.

Irvine mostró una expresión de genuina sorpresa, pero, nuevamente, fue durante un instante. El tipo parecía ser tremendamente hábil camuflando sus reacciones: uno no se fijaría en ese pequeño detalle si no prestaba la más absoluta atención a todos sus gestos.

—Caray. Eso suena a algo completamente macabro... ¿cómo pudo lograrse tal efecto? Más aún teniendo en cuenta que los alguaciles no se vieron afectados... ¿algún tipo de... hipnosis? ¿Una droga? Pero, ¿cómo lograr que solo los presos se viesen afectados? Hum.

 

Miró por la ventana, que estaba firmemente cerrada y protegida por barrotes: no iba a poder salir de allí fácilmente, no. En todo caso, lo que pudo ver... fue una especie de urbanización. La ventana no dejaba identificar con total seguridad cuál era el sitio donde se encontraba, pero estaba segura de que había estado ahí antes, en algún momento.

Bueno, al menos era un alivio... podía estar segura de que, al menos, no la habían llevado al extranjero.