Décimo Tras pensar un rato y analizar mi entorno, di con que la calle en la que me encontraba finalizaba en una bifurcación; para mi mala suerte tendría que tomar un camino, ¿acaso era un castigo de Deus por haber mencionado su nombre en vano? O tal vez no... Una sombra cruzó mi vista en cuestión de segundo hasta la calle continua, ¿qué había sido eso? —Vaya, esto recién empieza y ya están corriendo por sus vidas... — Reí y entonces me decidí por seguir a esa misteriosa figura que corría agitada. No tenía, y les seré honestos, ninguna intención inmediata de hacerle daño o algo por estilo... Pero algo más allá de la bifurcación me daba una mala vibra. ¿Podría alcanzar a mi pequeño atleta con cierta destreza? Contenido oculto Dados (3) + Destreza (3) = 6
Séptimo Tan siquiera, después de haber gastado esa moneda las vistas habían sido medianamente decentes, había visto cuatro punto de interés que, si no nos matabamos primero podríamos ir a ver quién podría estar pululando por allí perdido y necesitara algo de... ayuda, sí, ayuda. —Tenemos dos barrios, Takano y Ahoyama, un parque y un bloque de edificios, pequeña scout —le informé llevando mis manos a los bolsillos de mi pantalón, asegurandome de que mi teléfono celular estuviera ahí —. Y como puedes imaginar... estamos en la Torre de Tokyo, lo cual es algo gracioso porque, subimos sin pagar. Una corta risa salió de mis labios, los miembros de seguridad enloquecerían si se les ocurría revisar las cámaras de seguridad y eso creaba una escena muy graciosa en mi cabeza. Me acerqué un poco a la segunda, viendo que era lo que estaba observando ahora que me había distraído en el mirador que nos ofrecía la torre, mas concretamente... el ascensor, ¿qué acaso Tokyo no tenía presupuesto para el mantenimiento de los ascensores? Quizás fuera mejor idea invesigar si había otros lugares de interés. (¿Acierto?) Contenido oculto (1 + 2 Acierto = 3, ni idea si se realizará (?))
Octavo Cuando salí del elevador, mis ojos tardaeon unos segundos en acostumbrarse. Todo parecía indicar que me encontraba en un complejo habitacional; comencé entonces a analizar lo que había frente a mí. Sin embargo, unos pasos me sacaron rápidamente de mis pensamientos, siendo golpeado en la espalda y, acto seguido, el agresor cayó al suelo producto de su propia fuerza: Era una niña pequeña. No alcancé a recuperarme del shock cuando la niña salió corriendo, dejando una llave en el suelo. ¿Debía regresarselas? Tal vez, después de revisar la Puerta D
Cuarto Permanecí oculto en mi plataforma, acurrucado en el suelo, cuando un brillo cegador me envolvió. Lo próximo que recordaba era desperar en una especie de... campo. ¡Oh, este sitio era agradable! Había muchos árboles, quizás pudiera quedarme por aquí escondido. No, no tenía muchas intenciones de moverme, eso lo único que conseguiría sería ponerme en peligro. No, tampoco quería entrar en contacto con nadie. La naturaleza estaba bien, ¡estaba genial, de hecho! Me traía buenos recuerdos de mi pueblo. La ciudad, sin embargo... m-monstruos... ¡Monstruos todos! Me negaba a pisar la ciudad si podía evitarlo, de momento estaba realmente cómodo aquí, no había nada ni nadi... —¡A-ah...! —De nuevo, como en aquella catedral, me llevé las manos a la boca para evitar seguir hablando. ¿¡Q-qué había sido ese ruido!? ¿D-debería huir...? >>Hm... shhh —susurré para mí mismo, aguzando el oído para identificar de dónde provenía Contenido oculto Acierto: 1
Echas a correr haciendo gala de tus habilidades físicas, y por suerte no pareces estar en mala forma. Te abres paso en medio de la carretera dado que no hay nadie más allí, y empiezas a seguir a aquella persona calle arriba, logrando pisarle los talones no mucho después. Antes de acabar en otra calle contigua le empiezas a llamar y aquella persona, que se trataba de un hombre no demasiado entrado en años, se gira hacia ti con cierto aire asustado. —¿Qué demonios haces aquí fuera chaval? ¡Deberías estar escondido en tu casa! —te grita aquella persona, apurada, sin dejar de ver a su alrededor. Parecía que aquello iba realmente en serio. Durante un momento parece pensárselo mejor, y con un suspiro exasperado, vuelve a mirarte algo más servicial—. Vamos, date prisa, no tengo todo el día y tú tampoco. ¿Necesitas algo? Era el momento idóneo para resolver dudas. ¡+1 Acción realizada con éxito! Pero, al igual que a la Tercera, Séptimo no alcanzó a ver mucho más. Definitivamente solo les quedaba dirigirse hacia el ascensor, y allí, escoger su próximo destino. Por ahora, aunque lo intentasen, los diarios no parecían reaccionar. ¿Y si Deus les había timado y estos en verdad no funcionaban? Abres la puerta D, y en ella te encuentras una estancia bastante bien construida y reformada: contaba con un amplio salón o sala de estar, cocina, cuartos de baño, y tres habitaciones. Incluso tenía un bonito balcón, vaya. Es tu elección escoger por qué sala empiezas a explorar (Vista Lince), y el número de estas que quieras ver. Después de todo... ¿estabas solo allí de verdad? No había ningún tipo de prisa. O eso parecía. Puedes cerciorarte de ello haciendo una tirada de Sentir el peligro cuando quieras. Guardas silencio, intentado descubrir el origen de ese ruido, y de si se trataba de algún tipo de amenaza. Por desgracia, ese sonido no se volvió a repetir... Habrá que seguir con el resto de opciones anteriores por ahora.
Tercera No descubrí gran cosa, realmente. Solo parecía un mirador más, típico para los turistas. Aunque, mencionándolo, ¿por qué no había turista alguno? Normalmente esa zona tendría que estar a reventar de personas. Y sólo estábamos nosotros dos... Sea como fuere, escuché como Séptimo decía que contábamos con dos barrios, una zona vegetal y un nuevo edificio (me alegraba de que hubiese gastado su moneda en el mirador y no en intentar matar un desconocido de la calle). De todas formas, si decidíamos ir a alguno de esos sitios, tendríamos que bajar en el ascensor, y... —Espero que también podamos salir sin tener que pagar —añadí, acompañando su risa. >>Y espero que el ascensor sea más seguro de lo que parece. De todas formas, ¿no podría decirnos esto algo? —murmuré, empezando a trastear en el móvil, sin recibir mayor respuesta que la de un teléfono normal ante los comandos. Suspiré mientras me encogía de hombros. Solo quedaba esperar si el chico aceptaba bajar o tenía una mejor idea.
Octavo —Vaya, es un lugar muy bonito. Podría vivir aquí, pero en este momento tal vez deba darme prisa. El cuarto D era un lugar bastante amplio y bien reformado, con múltiples salas distintas. Pero... ¿Qué estaba haciendo allí? ¿Qué buscaba realmente en ese lugar? No tenía la menor idea. Lo único que había en mi mente era la vaga idea de que, cuando encontrase algo útil en este lugar, me daría cuenta. Sin embargo, recordaba perfectamente que no estaba solo en este lugar, por lo que debía estar alerta en todo momento. ¿Y si... aquel sujeto del elevador... era peligroso? Debía ponerme alerta y sentir toda alarma de peligro.
Décimo "¿Qué demonios haces aquí fuera chaval? ¡Deberías estar escondido en tu casa!" Tras detener a la figura que corría, esa fue la respuesta que recibí. Qué malos modales. ¿Había corrido tras él solo para recibir este trato? Lo miré inexpresivo en lo que recobraba el aliento. Noté, y esta vez solo noté, que se trataba de un sujeto no muy mayor, que lucía bastante nervioso (¿como si escapase de algo o alguien?) y que se había atrevido a llamarme chaval, cuando yo hace años había dejado de ser uno. Me faltaban unos cuantos años para los 30, ¿acaso no lo había notado? En fin, me mantuve en silencio hasta que el sujeto respiró y pensó nuevamente sus palabras. Esta vez, con la misma prisa pero con un tono más cordial, preguntó lo siguiente: ¿Necesitas algo? —Sobre todo información... ¿Qué está pasando aquí?, ¿por qué debería ocultarme? —me dirigí con la brevedad que la situación exigía. Una que otra incógnita invadió mi cabeza. Deus Ex Machina no perdía tiempo en simplezas: Nos había dejado en un tablero muy "interesante". El asco recorrió mi paladar al pensar en un dios con esa voluntad... tan humana. —Verá, no soy de por aquí,— Mentira—¿podría ayudarme por favor?
Séptimo Gruñí en voz baja al notar que solo nos quedaba ir al asensor de mala muerte que irónicamente se encontraba en un lugar que estaba seguro que contaba con gran cantidad de dinero para tener uno nuevo, ¿o es que acaso se divertían viendo las miradas de las personas pensando si ese día en específico el asensor decidiría desplomarse? Aunque... pensandolo bien... yo sí lo haría. Hum, ahora comenzaba a tener sentido el hecho de tenerlo de esa forma. "Y espero que el ascensor sea más seguro de lo que parece. De todas formas, ¿no podría decirnos esto algo?" —Parece que nuestro querido Deus nos ha dejado algo de intimidad y sin futuro —bufé, obligandome a ir con ella a ese asensor y esperando, al igual que ella, que fuera mucho más seguro de lo que aparentaba —. Debe de serlo, morir aquí sería algo totalmente patético, vayamos a la cafetería quizás encontremos más cosas gratis... Sin más, apreté el botón que nos llevaría a ese lugar de ser posible, en una pieza.
Mire hacia arriba notando a una sombra pasar rápidamente, tal vez estaba tratando de ocultarse. Mi mira se vuelve fría y letal, mi objetivo era otro ahora. — No escaparas. — Dije con voz baja y sería. Comienzo a observar el lugar, y busco una posible ruta para poder alcanzarlo, pero la única forma es subír hacia donde esta. Hora de usar mi Destreza
Quinto Luego de verificar el panorama afuera, regresé a mi posición anterior en mitad del pasillo. Pese a la altura a la que me hallaba, lo mejor era no dar mi ubicación a cualquiera que anduviera por allí. Quizás yo no hubiera conseguido ver a nadie, pero quién me aseguraba que alguno de los otros no. ¿Deus? Sí, cómo no... Palpé el sitio donde escondía la libreta, inseguro de cómo y cuándo usarla. Desconocía si debía hacer algo previo antes de poder usarla porque, daba por sentado, que en verdad funcionaban. ¿Qué gracia podrían obtener esos dos de mentirnos? Pues yo no encontraba ninguna, más tomando en cuenta que ansiaban un ganador en esta loca apuesta. Como sea, lo importante aquí era comprobar este sitio. Así que me dirigí hacia las puertas de enfrente. En total, este piso contaba con cien habitaciones y, de encontrar algo cómodo y seguro, hasta podría transformarlo en mi guarida. La idea en verdad me atraía.
Cuarto ... No, ni un solo ruido... Eso significaba que... —¡Yay, estoy solo! Joo, por fin me dejan esos señores malos —me quejé cruzándome de brazos, con gesto de enfado—. ¡Pero nunca me encontrarán, nunca! Y si alguno se me acerca ¡se va a enterar! ¡Le daré un buen zas! Y y y luego un ¡pum! Hm, sí, ¡eso es lo que haré! —Imitaba los movimientos con gran dramatización, lanzando puños al aire, creyendo que realmente podría enfrentarme a alguien si se diese el caso. >>A ver, ¿qué ha pasado y por qué estoy aquí? ¡Oh, sí, recuerdo el cuaderno de dibujitos! Ay, ¿lo sigo guardando? —Rebusqué en mis bolsillos rápidamente hasta dar con él—. ¡Síp, aquí está! Aún intacto, ¡puedo dibujar tantas cosas! Voy a empezar... dibujaré ese árbol. ¡Hala, qué grande es! ¡Seguro que mide por lo menos cien metros! —exageré imaginando la cantidad de personas que habría conocido aquel árbol. Sin embargo, antes de comenzar a dibujar nada, preferí echar un vistazo a mi alrededor. ¿Dónde estaría? Contenido oculto Vista lince: 2
Sientes ese molesto ambiente de tensión a tu alrededor, y por precaución decides cerrar la puerta tras de ti al sentir efectivamente aquel sentimiente peligro. No escuchas nada claro, sin embargo. Pero nunca estaba de más darse algo de prisa. Gracias a tu acción, serías alertado en caso de un peligro próximo. Efectivamente, no estabas solo allí. ¡+1 Acción realizada con éxito! El hombre enarca una ceja, realmente contrariado. No puede creerse que un extranjero esté campando a sus anchas por las calles desiertas de la ciudad. Con el tiempo echándose encima, trata de ayudarte con lo mínimo posible, algo desconfiado quizás. —La ciudad ya no es segura —logra pronunciar al fin, sin dejar de atender a su alrededor—. Nadie sabe lo que está ocurriendo, no quieren darnos respuestas, pero la gente está desapareciendo sin dejar rastro. Así que coje provisiones y enciérrate donde sea, pero no te quedes aquí parado. Antes de echar a correr una vez más se gira ante ti, como si en el fondo sintiese algo de lástima al verte tan perdido. —Algunas calles más abajo hay una zona turística con varios mapas para extranjeros. Coge uno, te hará falta. Y con esta indicación, el hombre echa a correr calles arriba, perdiéndose finalmente. No te da tiempo a asimilar lo ocurrido cuando un hombre aparece corriendo hacia donde estás, como si tratase de seguir al que te había ayudado sin mucho éxito en su carrera. Ahora estáis frente a frente... Las opciones a escoger serán las mismas que en el post anterior, para ambos. ¡+1 Acción realizada con éxito! Y el ascensor cayó y todos murieron, fin. Ups, la narradora tuvo un percance. En fin. En primer lugar todo parecía ir en orden, mas la tensión era palpable. Demasiado extraño cómo en aquellas condiciones un ascensor podía verse tan nuevo e impecable, como si alguien lo estuviese manipulando y no fuese un simple fallo del mecanismo. Y antes de poder llegar a la cafetería... El ascensor se detuvo. Los diarios seguían sin funcionar ante una situación como esta, maldita sea. ¿Tentarían a la suerte y seguirían probando tocando los botones? (Suerte). Sin embargo, algo se habia escapado a vuestros ojos. Algo... ¿pero el qué? (Vista Lince). Una risita muy familiar resonaba en el techo del ascensor. Una muy, muy familiar... Decides entrar por las puertas de enfrente al pasillo que indica: "Habitaciones 500-550". Te das cuenta entonces de que se trata de un largo pasillo iluminado por tenues luces de neon, todo completamente blanco e higiénico. Vas viendo puerta por puerta cada habitación cerrada, y empiezas a darte cuenta del posible lugar en el que te encontrabas. Sí, lo sabías, este lugar era... (Acierto). Si decides continuar paseando, puedes probar a entrar en cualquiera de las habitaciones, quizás había suerte y estaban abiertas (Suerte). Empiezas a fijarte mejor a tu alrededor. Te encontrabas en una especie de plaza bastante rústica, rodeada de árboles y casas de no más de una planta. Logras ver un cartelito en la entrada de la plaza, y al acercarte ves claramente: "Plaza de Pueblo Naota". Pueblo Naota... Crees que recuerdas algo sobre ello. ¿Lo recuerdas? (Acierto). Por otro lado, vuelves a escuchar otra vez ese crujido, pero esta vez ya está demasiado cerca de ti como para pararte a analizarlo. Quizás solo sea un animal, o una persona del pueblo o... ¿Qué harás? ¿Correrás? (Destreza). ¿Intentarás pensar en algo a pesar de la situación? (Ingenio). ¡+1 Acción realizada con éxito!
Séptimo ¡Simplemente genial! Antes de siquiera llegar a la cafetería el asensor se detuvo sin muchas advertencias, sin pensarlo demasiado miré mi celular y no parecía que fuera a decir nada interesante mas que la hora en la que el maldito destino nos había dejado encerrados en este lugar sin tener la molestia de poner algo de música y pasar el rato de una forma mas amena. —Esto es una muy mala broma... —solté un leve gruñido, golpeando levemente la puerta con la palma de mi mano —, y por si fuera poco parece que tenemos risas de fondo en vez de música... Suspiré, comenzando a mirar a mi alrededor para intentar ver algo más util que un par de botones. (Vista lince) Contenido oculto 5 + 1 = 6 Acciones realizadas: 2
Octavo Preferí ser cuidadoso, por loque cerré la puerta de la habitación... y luego fui demasiado cuidadoso, porque verifiqué 5 veces que, efectivamente, estuviese cerrada. Y sí, lo estaba, pero eso no me impidió verificarlo una Sexta vez. Una vez que me cercioré completamente, comencé a recorrer el lugar, palpando todo lo que tenía a mi alrededor; comencé entonces a pensar en mi situación: No sabía que hacer, ni donde estaba, ni contaba con ningún recurso. Sólo eramos mi ropa, el diario y yo. —Y el segundo ni siquiera funciona —resoplé, al ver que no era capaz de encenderlo—. En una situación como esta, lo primero es conseguir provisiones. Me dirigí a la cocina, en busca de comida o algo interesante. [VISTA LINCE]
Miro a mi alrededor, no estaba muy desencaminada. Así que un observatorio... no es un mal lugar donde comenzar. Miro a la réplica del sistema solar, me fijo en la Luna. Cómo la odio, si tuviera un misil gigante... Pero de nada sirve pensar en rencores pasados que pocos entenderían, ahora que ya puedo ver es hora de comenzar a explorar este lu... Un ruido detiene mis movimientos. ¿Pisadas? ¡Maldición, había alguien aquí! Esto no me gusta nada, debo pensar rápido. Alguien o algo conoce mi posición, está escapando; pero aún no me ha visto, ¿o sí? Las pisadas se oyeron desde fuera de esta sala, por lo que se ha movido al oír el ruido que debió producir los mecanismos que abrieron el techo y el cambio de luz. Lo que sea que se esté moviendo es bastante perceptiva, más motivos para preocuparme. No puedo quedarme tranquila hasta que no identifique la amenaza. Debo encontrarla sin que me encuentre a mí, de descubrirme estaría en un peligro mayor. Salgo de la sala a hurtadillas lo más rápido que puedo sin romper el Sigilo. Es preferible que se escape a ser descubierta. Contenido oculto: Tirada Sigilo 1 + Tirada 5 = 6
Décimo "Nadie sabe lo que está ocurriendo, no quieren darnos respuestas, pero la gente está desapareciendo sin dejar rastro. Así que coje provisiones y enciérrate donde sea, pero no te quedes aquí parado." Así advirtió el sujeto con una desbordante desesperación en sus palabras. ¡Qué mente tan perversa tenía nuestro Deus Ex Machina! ¿De qué se trataba todo este espectáculo? Antes de esfumarse calle arriba, el hombre no tardó en darme otro consejo al cual no le presté demasiada atención; sin embargo, y ante la incapacidad de poder formular cualquier respuesta, sentí que otro individuo se acercaba con velocidad. Logré voltear a tiempo y ahí mismo, cara a cara, me encontré con un sujeto bastante alto y corpulento que yo había visto antes. Por supuesto que lo tenía claro esta vez. —Tú debes ser el Segundo, y no creo equivocarme— Sin sacarle la vista de encima, di unos pasos hasta posicionarme exactamente frente a él, tal vez para esperar algún movimiento. Tenía que ser un poseedor del diario. Aquella silueta, la más grande de todas, que había elegido un pergamino sin hacer demasiado escándalo era inconfundible... ¿Estaría ahora mismo en peligro?, ¿o podría tratar con un tipo como este?— Parece que a nuestro querido anfitrión le gusta el suspenso, ¿no lo crees así?— Desconfiado y con mucho cuidado, revisé el bolsillo de mi pantalón. Ahí estaba la agenda que había tomado antes en la Catedral, ¿me sería de ayuda ahora mismo? Era arriesgado intentar echarle un vistazo ahora mismo de todas maneras. Tal vez si apostaba por cierta destreza podría salir de ahí y evitar un enfrentamiento en el que, ahora mismo, traía clara desventaja. Por otro lado, podía esperar aún una respuesta más civilizada de su parte. Combatir cuerpo a cuerpo era mi última vía útil. Contenido oculto Dados (2) + Habilidad destreza (3) = Acción realizada (5)
Quinto Continué caminando por el pasillo hasta detenerme en la habitación 550. Todas y cada una de ellas estaban cerradas, pero ¿lo estarían bajo llave? No obstante, el recuerdo que el sitio me traía apenas si me permitía ejecutar cada paso. Deseaba salir de aquí, pero estaba seguro de que había una razón por la que la luz me trajo hasta aquí. Quizás si me permitía investigar un poco más... —Pero lo mejor es andarse con mucho cuidado (Acierto). Contenido oculto Acierto 3 + tirada 3= 6.
Segundo Ese hombre me dijo algo bastante raro, pero probablemente deba hacer caso por una vez en mi vida. No obstante, no pude decir otra cosa, pues alguien está frente a mí, un participante, y probablemente enemigo. Mi pupila se encoje al fijar mi vista en el, cierta tensión recorre mi cuerpo. Al principio permanezco inmóvil, pero no las acciones de este tipo hacen que no baje mi tensión, pues al parecer el busca algo por su espalda... Un arma o algo parecido a mi pergamino. El hablarme ya era un error, si corría sería peor para el. —... No hagas eso... — Dije con seriedad Mi cuerpo se relaja un poco y mis manos no abandonan mis bolsillos en ningún momento. — La muerte nos asecha a ambos, será mejor que vigiles tu espalda... Aunque... Los ojos a veces traiciónan — Mis ojos se ponen en búsqueda de algo posiblemente útil, era cuestión de suerte encontrar algo
Efectivamente, al observar por un momento el ascensor con mayor detenimiento, veis encima de vuestras cabezas una compuerta de emergencia, que os permitirá salir del ascensor y acceder a las escaleras de emergencia contiguas a esta. El problema es que sois dos personas, y la compuerta está algo alta. Tendreis que pensar en cómo vais a abrirla y salir ambos. Para realizar una proeza física (Destreza). Para tener una idea (Ingenio). Si quereis probar a hacer reaccionar el aparato (Constructor). La risa ha cesado. Alguien parece estar expectante de vuestro siguiente movimiento. ¡+1 Acción realizada con éxito! Te adentras en la cocina sin demasiados ánimos, pero parece que vas a salir de allí bastante contento. Después de una exhaustiva búsqueda logras encontrar una botella de agua, una lata de conservas y una bolsa de aperitivos. Parece que el resto está completamente agotado, como si alguien hubiese vaciado todo por algún motivo que desconocías. Nada parece escucharse al otro lado de la puerta. ¡+1 Acción realizada con éxito! Te encaminas hacia la puerta de salida de la manera más sigilosa posible, y gracias a ello parece que nadie te ha llegado a ver. Logras asomarte en el momento exacto para ver a una mujer correr a toda prisa, tirando sin querer al suelo un recipiente que se encontraba en una de las mesas, haciendo que acelerase la marcha. Al haber tenido tanta precaución has llegado un poco tarde para poder detenerla, pero quizás aún no es demasiado tarde. Parecía muy asustada por alguba razón que desconoces... Si quieres seguirla: (Destreza). Si quieres continuar explorando tus alrededores (Vista Lince), si quieres asomarte a las ventanas, también están disponibles. ¡+1 Acción realizada con éxito! Si lo deseas, puedes echar a correr perfectamente hasta perderte calles abajo, tu destreza es suficiente para hacerlo. Pero al parecer el hombre no tiene intenciones de perseguirte. Tú decides qué hacer en este caso. Segundo sin embargo, miemtras empieza a buscar algo por los alreedores, no pareció tener demasiada suerte. Según lo que quieran escoger hacer a continuación, se abrirán nuevas posibilidades. Eh, espera un momento... ¡Décimo, tu diario está brillando! ¿Qué estaba pasando? ¡+4 Acciones realizadas con éxito en total! Sí, lo sabías. Este lugar era... El hospital de Naosuke, el más famoso de la ciudad. Ahora ya no tenías ninguna duda sobre ello, y lo mejor es que al tratar de recordar acertaste en que... ¡Tu casa no quedaba muy lejos de aquí! Con nuevas posibilidades sobre tu ubicación actual, es tu elección continuar con las opciones anteriores. ¡+1 Acción realizada con éxito!