One-shot de Pokémon - Los héroes van y vienen, pero tú eres eterno

— ¡Papá! —gritó un niño de tal vez unos siete años de edad, sus ropas eran simples, su cabello era rubio claro y sus ojos eran azúles como un zafiro.

— Dime mi pequeño —contestó un hombre castaño y de ojos caramelo. Él antes de ser llamado por su retoño, estaba leyendo un periódico en el cual aparecía una noticia interesante. La noticia hablaba sobre un superhéroe, vestido con ropas extravagantes, que mostraban un parentesco con un Blaziken; casualmente al lado de dicho hombre estaba un Blaziken en su forma mega.

El chico miró el periódico y se alegró, pues, justamente había llamado a su padre para preguntarle acerca de ese curioso hombre disfrazado— ¿Qué opinas de Blaziken Mask?

— ¿Qué opino de él? —repitió el padre mirado la cara de entusiasmo de su hijo.

—Si.

—Bueno Clemont —le respondió el hombre a su hijo, mientras cerraba el periódico y lo ponía en la mesa que estaba enfrente de él—. Opino que es un gran héroe —Lo que dijo el padre, hizo que la sonrisa del joven aumentará de manera increíble—. Pero ¿Sabías que él tuvo que ser entrenado por uno de los mejores héroes de la historia?

La pregunta del mayor hizo que el joven rubio arrugara la cara de forma dudosa— Eso es imposible —respondió incrédulo de lo que había oído.

El hombre rió— Pues si hijo mío, Blaziken Mask fue entrenado por un héroe, que era el protector de Kanto.

— ¿Kanto? Pero eso es muy lejos.

— Lo es, Blaziken Mask tuvo que ir hasta allá para ser entrenado por dicho héroe.

— Entonces, ¿cuál es el nombre de ese supuesto héroe? —preguntó el chico, ansioso por escuchar el nombre de maestro de su ídolo.

— Escucha bien —le respondió—, él se hacía llamar... El Guajolote Macías

El niño miró la cara de su padre, y comenzó a reír por lo ridículo del nombre del héroe— Jajaja... Papá, ya en serio ¿cómo se llama? —después de limpiarse unas pequeñas lágrimas, el chico miró la cara seria de su padre, y comprendió que él no estaba de broma— Entonces, si es en serio, ¿qué es lo que hace tan fuerte al Guajolote Macías?

El hombre sonrío— Verás él poseía la fuerza de un Moltres.

— ¡¿Qué, eso es imposible?!

— Pues así es hijo mío, y no solo eso. Él... —así, el hombre, comenzó a contar las aventuras de la leyenda. Por cada cosa que le contaba, el brillo en los ojos del niño aumentaba.

Luego de un rato de contar las aventuras del Guajolote Macías. El padre, buscó una foto del héroe.

— Él era el Guajolote Macías.

— Wow —exclamó sorprendido el niño por la apariencia del héroe— ¿Puedo quedármela?

— Claro, no hay problema.

— Gracias papá —habló el infante mientras se retiraba, hablando de lo increíble que sería ver en acción al Guajolote.

El padre, luego de ver a su hijo marcharse. Caminó hasta el balcón de su casa, abrió las puertas de dicho balcón y caminó un poco más hasta llegar al barandal.

— Que tiempos aquellos —dijo el hombre mientras veía el cielo nocturno—, me pregunto, ¿qué estará haciendo mi maestro? —la nostalgia lo invadió y recordó aquellos momentos de arduo entrenamiento.

El hombre siguió viendo el cielo hasta que divisó a lo lejos en el cielo, una extraña señal.

— Parece que me necesitan —y con eso dicho el hombre se retiró del balcón, para ejercer su profesión nocturna.

Contenido oculto: El poderoso y gran Guajolote Macías