[Gladiadores] Rehenes de un imperio

Scato

Miró a Tertius y soltó una pequeña risa –¿Entonces lo tuyo fue sólo suerte eh novato?– Dejó caer su mazo –¡Ustedes los novatos creen que todo esto es un juego; ¡voy a disfrutar cada momento en la Arena donde imploren por sus vidas! – Dos gladiadores junto a él rieron con su comentario – Y tú– señaló a Sebastian – ¿Acaso estás llorando? ¡BA! tu jamás serás un Gladiador; terminarás limpiando el suelo que pisamos– escupió en el suelo – ¡MI MAZO LOS DESTRUIRÁ! ¡INCLUYÉNDOTE AMBROSIUS! Ningún niñato está por encima de mi

 

Tertius

No pude responder ni a la jovencita ni a su "pretendiente", pues Scato había empezado a gritar desaforadamente. Era el momento perfecto para seguir enseñando las artes de la seducción.

Con un rápido movimiento de mi mazo, me solté la trenza, para que mis cabellos rojizos se derramaran ante la vista de la jovencita. Entonces me dirigí a Scato:

—Uno no puede dar buenos golpes cuando está recién levantado —respondí con simpleza, desperezándome.

Contenido oculto

@Amelie

 

Priscus

Uno de los nuevos gladiadores…. Tertius, llego al campo de entrenamiento; al parecer el también estaba intrigado por la nueva pareja, juro que casi pude ver una mirada de resignación al ver al crío… El hombre, que era de mi complexión, tomo de nuevo el mazo y ataco otro “Livius”. El resultado no fue el que él quería pues pude ver como chaqueaba los dientes.

—¡EH! —Grité —Más cuidado la próxima, te falta práctica, es todo… —Le dije a Tertius

Deje a Gaius y me acerque a ver al chiquillo con el arco.

—Quizá, si te quitaras el mugroso pelo de la cara, tu mira sería mejor…— le dije y le entregue una correa de cuero— úsala… seguro te será de utilidad— Dicho eso seguí tratando de hacer ejercicios con mi brazo herido…—Por cierto; mi nombre, como habrás escuchado, es Priscus. —Le grite a lo lejos

 

Scato

–No deberías dormir en estos horarios; para eso está la noche. Pero si tanto esperas que te pongan a dormir permíteme que mi martillo te mande a descansar– Dijo a Tertius levantando su martillo. Gaius se interpuso y tomó la muñeca de Scato donde sostenía su martillo y aprentó con mucha fuerza provocando que este volviera a dejar caer su martillo; Gaius lo retó con la mirada –¡BA! a mi me detienes por provocar un poco y a esos niños los dejas juguetear por horas– Volvió a escupir –Ya veremos en la Arena...

 

Sebastián

Me quedé con la cabeza agachada escuchando como ese scato gritoneaba con alguien más así que sólo tome mi espada y me retiré pasando junto a él —eres un maldito— le grite empujandolo levemente para abrirme paso y me dirigí a los baños.

 

Contenido oculto: Alisse Madness

Dime que no fue a Scato a quien empujaste O.O
Y nooooooo te saliste de nuevo de los límites de la zona de entrenamiento ToT

Esta vez Gaius reaccionó a tiempo y detuvo a Sebastian–No escuchaste a los guardias antes ¿O acaso no te duele ser sometido? No puedes salirte de los límites de esta zona de entrenamiento; sólo Gladiadores lo pueden hacer–

 

Tertius

—Wow, me parece que ese Scato no es un hombre muy amigable —comenté al oído de Gaius en un susurro—. Tiene un temperamento de terror... Me cae bien.

Contenido oculto

@Amelie

 

Gaius se acercó a Tertius aún con Sebastian detenido y los alejó de Scato el cual estaba bastante molesto–No les recomiendo provocarlo; Ambrosius tiene el título de invicto en combate es por ello que es el Gladiador más sobresaliente; pero Scato... Scato tiene el número más elevado de Gladiadores asesinados, nuestro hermanos– Dijo mirándolos– Su mecenas es Naevius, un hombre que prueba constantemente la fuerza de Scato; si el no mata en combate no es beneficiado con favores de su mecenas; Scato no dudaría ni un segundo en matar a un hermano_

 

Kedoku.

Me quedé viendo todo en silencio, no tenía intenciones de intervenir ni de decir nada. Vi como el nuevo empujaba a uno de los Gladiadores, creo que ese se llamaba Scato, el gritón. Suspiré al ver los problemas en lo que se habían metido en tan solo unos minutos, me rasqué la cabeza y miré hacia el cielo (o es techo?) como pidiéndole explicaciones a la nada de ¿que yo hice para merecer esto?

—Primer día y busca su muerte, bien hecho campeón.— susurré al ver como salía de la Zona de entrenamiento sin permiso.—Ese chico tiene agallas.

 

Brazhan



Me impresioné por el tiro que había dado, no era el más potente ni el más certero. Estaba seguro que aún seguía siendo inferior a los demás arqueros que había en el lugar, así que mi impresión no duró tanto, pero estaba contento con mi logro.
Llegó aquel tipo fornido a mi lado, haciendo un comentario de mi asqueroso pelo diciendo que tal vez apartándolo de mi cara vería mejor, seguido de eso me entregó una correa para luego alejarse, no sin antes decirme su nombre que por cierto; ya lo había escuchado antes. Priscus.
No me dio tiempo de decirle nada, ni mucho menos pensar en una respuesta adecuada para él. Tomé un mechón de cabello y lo miré con atención, sí, estaba muy mugroso. Me pregunté si en estos calabozos había algún lugar donde me podría dar un baño, pero eso no lo sabría a menos que alguien dijese en algún momento que tenía mal olor y ahí tal vez, podría darme un baño merecedor.
Estiré la correa, notando que no era elástica. Pero no importaba ya que por el momento serviría para controlar mis despeinados cabellos, me daba un poco de pena a decir verdad. Todos verían mi apariencia y… No estaba acostumbrado, pero lo necesitaba para poder tirar correctamente el arco. Me la até sin problemas y suspiré, planeaba seguir intentado mi tiro. Pero…

Escuché la potente voz de uno de los gladiadores con experiencia; gritándole a uno de los esclavos ¿Qué casualidad? Se trataba de aquel rubio. Al parecer el chico no se iba a quedar quieto ni una sola vez, me quedé inmóvil en mi lugar esperando que algo ‘’interesante’’ pasara con aquel muchacho sin remedio aparente.
Tal vez le den una golpiza, o peor; que lo mataran. Pero quien sabe… — Idiota — susurré.

Contenido oculto

Scato matando a Sebastian en 3, 2 ... (?)

 

Sebastián

La furia me consumía estaba a punto de salirme de los límites nuevamente cuando sentí una mano apoyarse en mi —No escuchaste a los guardias antes ¿O acaso no te duele ser sometido? No puedes salirte de los límites de esta zona de entrenamiento; sólo Gladiadores lo pueden hacer– me dijo gaius a lo que yo respondí —lo siento mi mente está muy alborotada y no mido mis acciones —al terminar de decir esto tertius se acercó y le susurró algo gaius dijo que no provocarámos a scato PERO EL EMPEZÓ A PROVOCARME claro que seré gladiador me animaba—estaré entrenando por aya — le dije alejándome hacia una esquina solitaria esperando a que scato reaccionará ante aquel empujón que le di.

 

Scatto tomó su mazo y corrió ferozmente hacia Sebastian pero una espada se interpuso entre su mazo deteniendo el golpe antes de impactar en el hombro del esclavo; Scato levantó su arma y con las dos manos y propinó un golpe en el pecho de Ambrosius, quien había sido el defensor de Sebastian. El golpe fue bueno pero no lo suficiente como para dañarlo de manera brutal; y Ambrosius en respuesta realizó un movimiento transversal en el pecho descubierto de Scato; Scato se quejó y cayó de rodillas colocando sus manos en el suelo, tardó unos segundos en poder volver a respirar.

Todo esto había sucedido tan rápido que los guardias pudieron apuntar sus lanzas hasta el tercer impacto; de este modo Ambrosius y Scato soltaron las armas.

El golpe de Scato en Ambrosius había sido fuerte pues la fortaleza de Scato era indudable; en cuanto al ataque de Ambrosius, si aquella espada hubiera tenido filo Scato estaría muerto; en su lugar quedó una gran línea rojiza, como de una herida por quemadura; la piel no se abrió pero el impacto de la espada puso en peligro su vida.
Scato levantó su rostro y dedicó una fría mirada a Ambrosius el cual permanecía estóico.

Los guardias se alejaron al ver que todo se había calmado –Ambrosius y Scato han obtenido una penalización por realizar un combate dispuestos a lastimarse uno al otro; sus castigos los dictaminará Gallio después de consultar con sus respectivos mecenas–

Scato se levantó con esfuerzo y frente a Ambrosius y Sebastian dijo –Ustedes son los siguientes–

 

Contenido oculto

ya me empeze a asustar, ¿moriré tan rápido? Tengo miedo pero que he hecho D:

 

Contenido oculto: explicación del combate

Bien; los dados que tiré son de probabilidad de ataque; ya que no puedo mostrarles los dados que utilizan estos gladiadores experimentados.
El primer dado fue "1" significa que el ataque no se llevó a cabo
El segundo dado fue "3" que significa que el ataque se llevó a cabo pero a la mitad de su fuerza
El tercer dado fue "5" que significa que el ataque se llevó a cabo con todas sus fuerzas

En pocas palabras, tuvimos suerte xD el ataque a Sebastian fue nulificado y el ataque hacia Ambrosius no fue mortal, menos mal porque un mazo si rompe los huesos xD

 

Primus y Henxia, dos esclavos que ingresaron a la zona de entrenamiento junto a los demás esclavos habían sido regresados a la estancia de esclavos, al parecer la falta de alimento los había llevado a un desmayo; probablemente desde su captura fuera del Coliseo, no habían probado un bocado.

Sebastian había aceptado su error por el combate entre estos dos Gladiadores (post siguiente a este), pero los guardias no le respondieron; Ambrosius sólo pasó junto a él colocando levemente su mano en el hombro del esclavo –Pelea bien, con eso saldarás la deuda que tienes conmigo– Dijo Ambrosius dirigiéndose a las habitaciones de los Gladiadores.
Y después de la pelea entre Scato y Ambrosius, aparecieron nuevos guardias; pero no venían a interrogar a los gladiadores, venía a llevarse a los esclavos a la segunda etapa de su entrenamiento del dia de hoy.

Brazhan; Priscus; Sebastian y Cornelia

La práctica de entrenamiento siguió para los Gladiadores, pero no para ustedes los esclavos; sin previo aviso los guardias les arrebataron las armas, las cuales colocaron en sus cinturones y después los volvieron a someter para amarrarles las manos.
–Veamos si tienen suerte para conseguir mecenas– Dijo uno de los guardias; de manera veloz los jalaron hasta llevarlos por una especie de rampa; ya conocían ese trayecto porque vieron ahí caminando a Otho; el esclavo que murió a manos de Ambrosius.

El guardia de la entrada se levantó de su asiento y comenzó a girar un torno el cual activaba el movimiento con poleas para abrir la reja principal a la Arena de Coliseo. Ese enorme escenario estaba vacío en ese momento, por lo mismo se veía aún más grande que cuando estaba abarrotado de gente; pero ese no era su destino; avanzaron un poco más para salir del Coliseo, junto a el había una pequeña Arena donde varias personas de alta cuna los observaban desde los asientos; la mayoría eran escoltados por soldados imperiales.

​

Los guardias los llevaron a la parte central de aquella pequeña Arena ahí había elementos parecidos a la Zona de entrenamiento del subterráneo del Coliseo; muñecos, bloques y dianas de paja. Los guardias liberaron sus manos de las ataduras y les entregaron sus respectivas armas. En ese momento un señor muy bien vestido se colocó frente a ustedes en las gradas.

–Ustedes son los nuevos esclavos del Coliseo; personas cuyos pasados deben ser borrados de nuestra historia. Pero el Emperador ha visto potencial en ustedes y gracias a su benevolencia, están aquí frente a nosotros y no en una fría prisión esperando su ejecución–Aquel hombre bien ataviado se llama Gallio, es el organizador que resultó herido, y por ello usaba finas sedas para cubrir parte de su rostro– Este lugar es conocido como la Arena Olimpia; aquí se llevan a cabo diversos eventos, los más conocidos son las ejecuciones; pero también es aquí donde ustedes, los esclavos, nos demuestran su fuerza a nosotros, sus futuros mecenas–Le hizo una seña a uno de los guardias que estaban en la Arena, el cual asintió con la cabeza y llevó a todos los guardias a rodear la Arena–Los mecenas de los Gladiadores, son aquellos que apostarán su dinero a sus victorias, son aquellos que comprarán su armamento, los que si lo merecen les regalarán el mejor alimento, ¡las mejores mujeres!– Miró a Cornelia– U hombres– Regresó su mirada al centro– Los mecenas son aquellos que les darán una vida de lujos así como la que llevan muchos Gladiadores; pero al igual que un mecenas puede dar, también puede arrebatar; si fallan irán perdiendo cada uno de sus beneficios; es por ello que ante todo, deben satisfacernos– Este era el mismo discurso que aquel hombre repetía cada vez que se topaba con esclavos –Ah, y si alguno quiere hacerse el gracioso y lastimarnos en este momento, no deben olvidar la muerte del esclavo que presenciaron esta mañana; aquel muchacho intentó asesinarme y su vida terminó en la espada de Ambrosius–
Los soldados imperiales se posicionaron frente a cada uno de los mecenas; esta vez no sería posible dañarlos.

Contenido oculto

Ya han demostrado su valía a los Gladiadores, ahora les falta sorprender a los mecenas; un buen desempeño puede traerles grandes beneficios; espero su suerte los acompañe :3
Por lo tanto deben hacer lo mismo con los muñecos de paja; tirar 2 dados de 1o caras y un dado de 5 caras
También está la opción de no hacer nada; pueden negarse a atacar pero evitará que sus mecenas les compren mejor armamento. Y su promedio en las pruebas bajará.

 

Sebastián

aún me dirigía hacia mi objetivo cuando escuche los pasos de scato dirigiéndose a mi por un momento quise subir mi espada para protegerme pero no me daría tiempo, la velocidad de scato era más que la mía, definitivamente era mi fin, cerré los ojos y un sonido de otra espada me hizo abrirlos de inmediato ¿ Ambrosius? me ha salvado la vida, no puedo creerlo.
los guardias les dieron un castigo a ambos pero yo no quería que Ambrosius estuviera involucrado y pagará las consecuencias por mi culpa así que me acerqué a él preguntándole como se encontraba y antes de que me respondiera me dirigí a uno de los guardias —yo tomaré el castigo de Ambrosius.

 

Tertius; Kedoku; Alethia y Sextius

[El día de hoy lo tienen "libre" pueden explorar el subterráneo; platicar con cualquier Gladiador que deseen, descansar, etc. Les recomiendo ir entablando discusión con los Gladiadores, interrógenlos para saber con quien contar y de quien cuidarse; busquen información que les pueda ser útil; cómo preguntar si alguien conoce los nombres de sus mecenas y si pueden comentarles algo de ellos.
Toda información será útil]

El comedor ha sido abierto para que los Gladiadores puedan almorzar y tomar todo lo necesario para recuperar sus energías.

[Un buen lugar para charlar]​

 

Sebastián

—Tengo que dar lo mejor de mi, por Ambrosius— me dije buscaba un buen lugar para entrenar. Por otra parto quería disculparme con Cornelia espero encontrarme con ella.

 

Contenido oculto: Alisse

Tu no puedes salir de tu lugar! D:< Aun no eres gladiador, eso es para los viejos que entraron antes que nosotros!

 

Alethia

Después de ver a los chicos hacer barbaridad y media me salí de ese lugar y camine al comedor, puede y ahora si me den buena comida.

—¿Donde estarán mis demás compañeros? —Al llegar al comedor, no estaba tan lleno, había pocos soldados, pero entablar una charla no sería difícil para alguien como yo, ya que las mujeres no se ven mucho por aquí.

—¿Alguien me puede dar comida por favor?

Contenido oculto

;-; me dijeron vieja. Jajaja.... :c