Relatos Mentales(Parte 2)

La realidad supera a la ficción, esa es una frase totalmente conocida, ahora veras porque. Antes de leer esta historia quiero advertirte que el contenido que se encuentra aqui es ficción, pero la enfermedad mental no lo es, es cien por ciento real y las personas que lo viven bajan los escalones hacia la locura, si eres una persona ultrasensible te pido que quites esta historia y que no vuelvas a intentar leerla.

Hoy hablaremos sobre una horrenda enfermedad mental, es conocida como el síndrome de Cotard, pero, ¿En qué consiste? Simple es un trastorno en el que las personas creen que están muertos, además creen que su cuerpo se pudre.

Steven Anderson es un joven de 19 años, vive en Florida, cada dia es rutinario para él, trabaja en una pequeña tienda de antigüedades de su padre con la que es fácil mantener el ritmo y la vida de la familia de dos hijos, entre cajas con artículos viejos y el polvo que se acumula es fácil contraer alergias, asma y enfermedades de esa magnitud.

Un dia al salir de su turno diario los padres deciden llevar a Steven a cenar después de un arduo dia de trabajo, entre quejas y risas llegaron a una pequeña pero reconocida cafetería a pocos kilómetros de la tienda. Al llegar Steven pidió el mismo licuado de chocolate de siempre, la misma hamburguesa con patatas fritas y el mismo helado de postre.

Los padres de Steven le platicaron sobre lo bien que va la tienda y sobre lo mucho que se podrán expandir si continúan de tal manera, Steven es el posible heredero ya que es seis años mayor que su hermano así que por el momento es el único con dicha capacidad.

La noche crece desmesuradamente y se preocupan por la hora, son las 10 Pm y es hora de partir a casa y descansar, en el camino el padre de Steven le hablaba sobre un Cadillac que desea comprar pero que quiere un precio más cómodo para sacar mayor provecho del automóvil.

Mientras hablaban del tema la madre de Steven comento:

-Madre: Yo no creo prudente lo que haces, solo buscas llenar tus bolsillos y olvidas que aquí no solo es el dinero lo importante.

El padre de Steven de una manera tosca y molesta responde:

-Padre: Pues por este motivo cree este negocio, para llenar nuestros bolsillos y en veinte años no te ha faltado un techo o un plato de comida los tres tiempos y una merienda así que te exijo tener un poco más de respeto a mis decisiones.

La madre lo observo con furia y al escuchar eso su madre estallo en ira y exclamo fuertemente:

-Madre: En ese caso deberías llevarte tu negocio al infierno, me aburre pensar que solo piensas en dinero y dejes de lado el resto de tu vida.

El padre comenzó a hablar al mismo tiempo que ella y llego un punto en que no se lograba entender ya que los dos discutían en voz alta y no dejaban al otro hablar tranquilamente.

Steven intentaba calmar la tensión de la discusión y al ver que no funcionaba exclamo con toda su fuerza:

-Steven: Cállense ya ambos, son familia y parecen un par de perros y gatos callejeros peleando por un trozo de carne.

Sus padres no dejaron de discutir y cuando la discusión se tensó más su padre logro observa que estaba a unos pocos metros de chocar con una pared y antes de chocar giro el volante con todas sus fuerzas al lado izquierdo, al hacerlo chocaron de manera horizontal contra la pared, él y la madre de Steven estaban a salvo, pero, Steven estaba inconsciente y su frente sangraba sin control.

Los padres de Steven llamaron a una ambulancia. Su estado era crítico, se rompió tres costillas, una contusión en el cráneo, el cuello y su brazo izquierdo quedo hecho trizas, además de dos hemorragias internas.

El joven despertó después de varios días, pero, al despertar él se asustó y grito despavoridamente. Las enfermeras y el medico de turno corrieron a la habitación del joven no notaron nada mal, no vieron a nadie, no vieron que el estuviera en el piso, solo vieron a un joven gritando sin sentido.

Steven les gritaba de manera eufórica mientras lloraba sin control:

-Steven: Estoy muerto, ayúdenme, estoy muerto.

El doctor lo vio despavorido mientras intentaba explicarle a Steven que su condición era estable y que había logrado sobrevivir al accidente, pero Steven no cedía, el creía que estaba muerto.

Los días pasaron y cada dia Steven era sedado fuertemente para que no gritara y no molestara a otros pacientes, a las dos semanas después de estar hospitalizado dejaron que Steven saliera del hospital, pero al llegar a su hogar comenzó el horror.

Cada dia era un tormento para él, pero todo detono seis meses más tarde, cada dia Steven sentía que algo en su cuerpo no funcionaba y el seguía creyendo estar muerto. Una mañana él se despertó de golpe, sentía que le dolía el cuello, las lesione fueron graves así que el dolor no cesaría en tan solo 6 meses.

El corrió hacia el espejo y al ver horrorizado grito con toda la fuerza de su garganta y todo el oxígeno dentro de sus pulmones, el veía su piel demacrada y podrida, al abrir su camiseta y observarse en el espejo, el veía gusanos arrancar su piel como si fuesen trozos de corteza de árbol cayendo al suelo solo con tocarlos.

Sus padres entraron rápidamente a su habitación pero cuando el gritaba que había visto su cuerpo descomponerse ellos le dijeron que todo estaba bien y que él no está muerto.

El joven no paraba de gritar y de manera desenfrenada se escabullo de sus padres y corrió hasta salir de su hogar, al salir la gente en la calle lo observaba como a un demente.

Steven al notar las reacciones de cada persona comenzó a temblar y prácticamente se congelo en la calle, sus padres salieron, lo llevaron arrastrándolo hacia su cuarto y al llegar le obligaron a tomar unos calmantes y durmió durante horas, pero, al despertar lo primero que hizo fue verse al espejo pero esta ocasión logro contener el grito pero aun así esto no se terminó, el joven se arrojó al piso mientras lloraba y al caer junto al cayo el frasco de calmantes que estaban en el baño, Steven lloraba mientas observaba el frasco de calmantes, en ese momento tomo el frasco y sin medida comenzó a tomar cada una de las pastillas y cuando se terminó todas y cada una de las pastillas se levantó y encontró un bote enorme lleno de pastillas para dormir, esas drogas son generalmente horridas ya que arruinan tu cuerpo al cabo de unos años de consumirlas, pero Steven tomo 3 de un trago, luego otras y otras, después de varias comenzó a sentir mucho sueño y cayo lentamente en el suelo, el seguía un poco alterado antes de caer al suelo pero eso no lo detuvo al momento de chocar contra el suelo.

Unas horas más tarde, a eso de las 6 Pm, su madre preparo algo para que Steven pudiese comer y no tener que soportar tanto medicamento con el estómago vacío, pero al entrar no llego a sentir más que panico y desesperación, Steven se había rendido, Steven se había suicidado.

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SALUDOS A TODOS LOS QUE LO LEAN :D MUCHAS GRACIAS